¡Ay, Dios mío, qué movida! Fabricio Alvarado, buscando revancha política, acaba de soltar la bomba de su fórmula vicepresidencial para las elecciones del 2026. Y no cualquier dupla, ¡son pura sangre de Puntarenas y Limón! Parece que le agarró el tupo de conectar con el electorado costero, y vaya que hay votantes ahí afuera esperando que alguien les preste atención.
Como ya todos saben, Alvarado viene intentándolo desde hace rato, imagínense, ¡tres veces! Este es el tercer tiro al arco, y este parece que quiere apuntarle directo a esos cantones donde el turismo manda, donde la pesca sigue siendo sustento de familias, y donde a veces se sienten olvidados por San José. Ya se sabe que Nueva República tiene que salir del círculo vicioso del Gran Área Metropolitana si quiere tener oportunidad de ganar, y apostar por las costas era un movimiento bastante listo.
El primero en presentarse, David Segura, un hombre curtido en mil batallas políticas en Puntarenas. Ese mae conoce la provincia como la palma de su mano, así que Alvarado seguro espera que él pueda movilizar el voto en esas partes. Conoce a los pescadores, a los hoteleros, a los agricultores…un verdadero conocedor de la realidad puntarenense. Se nota que buscaron a alguien con arraigo, alguien que huela a tierra fértil y a mar salado.
Y luego tenemos a Rosalía Brown, la diputada limonense que ya ha demostrado saber cómo desenvolverse en la arena política. No solo es legisladora, sino que además ya fue vicepresidenta de la Asamblea, así que tiene el visto bueno de cómo funciona el gallito en San José. Llevar a una mujer a la fórmula siempre suma puntos, especialmente en estos tiempos que la igualdad de género es un tema candente. Además, representa al Caribe, esa vara que tantas veces queda relegada.
Ahora bien, analizarlo con frialdad, la jugada es clara: Alvarado busca sumar votos en provincias que tradicionalmente no han sido su fuerte. Puntarenas y Limón tienen un potencial enorme, pero también tienen problemas particulares, como infraestructura deficiente y desempleo. Si logra convencer a la gente de que puede solucionar esos problemas, quizás tenga una oportunidad real de llegar a Casa Amarilla. Pero, diay, la política es impredecible, ¿quién sabe qué va a pasar?
Muchos analistas dicen que esto es simplemente una estrategia publicitaria, una forma de captar la atención de los medios y de proyectar una imagen de acercamiento a las bases. Que Alvarado, en el fondo, no tiene ninguna intención real de cambiar las cosas, pero necesita un disfraz para llegar al poder. Yo creo que eso es exagerado, aunque tampoco descarto que haya un poco de postureo involucrado. En fin, la política es un brete complicado.
Con esta presentación, la contienda electoral promete estar más encendida que nunca. Ya los otros partidos van a empezar a moverse, a sacar sus propias cartas, y a tratar de restarle brillo a la fórmula de Alvarado. Vaya que vamos a tener unos meses intensos llenos de debates, promesas y acusaciones. ¡Prepárense para el chapuzón, porque la cosa está que arde!
En fin, ahora me pregunto: ¿Esta apuesta de Nueva República por las costas será suficiente para darle la victoria a Alvarado en 2026, o simplemente es un paliativo ante la falta de propuestas sólidas a nivel nacional? ¿Ustedes creen que realmente conectarán con el electorado costero o caerán en el mismo error de ignorar las problemáticas internas del país? ¡Den su opinión en el foro, quiero leer sus ideas!
Como ya todos saben, Alvarado viene intentándolo desde hace rato, imagínense, ¡tres veces! Este es el tercer tiro al arco, y este parece que quiere apuntarle directo a esos cantones donde el turismo manda, donde la pesca sigue siendo sustento de familias, y donde a veces se sienten olvidados por San José. Ya se sabe que Nueva República tiene que salir del círculo vicioso del Gran Área Metropolitana si quiere tener oportunidad de ganar, y apostar por las costas era un movimiento bastante listo.
El primero en presentarse, David Segura, un hombre curtido en mil batallas políticas en Puntarenas. Ese mae conoce la provincia como la palma de su mano, así que Alvarado seguro espera que él pueda movilizar el voto en esas partes. Conoce a los pescadores, a los hoteleros, a los agricultores…un verdadero conocedor de la realidad puntarenense. Se nota que buscaron a alguien con arraigo, alguien que huela a tierra fértil y a mar salado.
Y luego tenemos a Rosalía Brown, la diputada limonense que ya ha demostrado saber cómo desenvolverse en la arena política. No solo es legisladora, sino que además ya fue vicepresidenta de la Asamblea, así que tiene el visto bueno de cómo funciona el gallito en San José. Llevar a una mujer a la fórmula siempre suma puntos, especialmente en estos tiempos que la igualdad de género es un tema candente. Además, representa al Caribe, esa vara que tantas veces queda relegada.
Ahora bien, analizarlo con frialdad, la jugada es clara: Alvarado busca sumar votos en provincias que tradicionalmente no han sido su fuerte. Puntarenas y Limón tienen un potencial enorme, pero también tienen problemas particulares, como infraestructura deficiente y desempleo. Si logra convencer a la gente de que puede solucionar esos problemas, quizás tenga una oportunidad real de llegar a Casa Amarilla. Pero, diay, la política es impredecible, ¿quién sabe qué va a pasar?
Muchos analistas dicen que esto es simplemente una estrategia publicitaria, una forma de captar la atención de los medios y de proyectar una imagen de acercamiento a las bases. Que Alvarado, en el fondo, no tiene ninguna intención real de cambiar las cosas, pero necesita un disfraz para llegar al poder. Yo creo que eso es exagerado, aunque tampoco descarto que haya un poco de postureo involucrado. En fin, la política es un brete complicado.
Con esta presentación, la contienda electoral promete estar más encendida que nunca. Ya los otros partidos van a empezar a moverse, a sacar sus propias cartas, y a tratar de restarle brillo a la fórmula de Alvarado. Vaya que vamos a tener unos meses intensos llenos de debates, promesas y acusaciones. ¡Prepárense para el chapuzón, porque la cosa está que arde!
En fin, ahora me pregunto: ¿Esta apuesta de Nueva República por las costas será suficiente para darle la victoria a Alvarado en 2026, o simplemente es un paliativo ante la falta de propuestas sólidas a nivel nacional? ¿Ustedes creen que realmente conectarán con el electorado costero o caerán en el mismo error de ignorar las problemáticas internas del país? ¡Den su opinión en el foro, quiero leer sus ideas!
