Ay, Dios mío, qué vaina más grande. Resulta que doña Marta Esquivel, la exprimadora de la CCSS, ahora diputada candidata con Pueblo Soberano, decidió meterle un buen golpe al PLN presentando un amparo y nulidad ante el Tribunal Supremo de Elecciones (TSE). Parece que la cosa está más caliente que gallina pochada.
Pa' ponerlos al día, doña Marta está metida en el famoso caso Barrenador, ya saben, aquel lleno de licitaciones turbias y contratos sospechosos. Ahora, además de enfrentar eso, quiere echar pa’ atrás la asamblea nacional del PLN realizada el 13 de septiembre, donde eligieron candidatos presidenciales y ratificaron la fórmula. Su argumento, según parece, es que no asistió la asamblea cantonal de San Ramón, Alajuela. ¡Como si eso fuera razón suficiente pa’ tumbar toda una elección!
Y no solo eso, doña Marta también mandó a volar varias resoluciones del TSE – DRPP-4572-2025, 4700-E3-2025 y 5503-E1-2025 – buscando que se anulen junto con la asamblea nacional del partido. Claramente, doña Marta está buscando cualquier resquicio legal pa’ causar revuelo y hacerse notar en esta campaña. A ver si así consigue quitarle la atención a todos esos problemas en los que anda metida, ¡pura estrategia, diay!
Lo más curioso de todo es que, aunque la ley da margen al PLN para seguir adelante con sus procesos internos pese a esa falla administrativa en San Ramón, doña Esquivel parece que se hizo la dormida. El TSE ya había dejado claro, con todas las letras, que la ausencia de San Ramón no impedía al PLN presentar candidatos a la Presidencia, Vicepresidencias o diputaciones. ¡Eso ya estaba clarito, mi pana! De hecho, el TSE enfatizó que la única consecuencia sería que el partido podría perder la deuda política si no completaban la renovación partidaria.
Las resoluciones del TSE eran claras como el agua de Barva: 'la situación presentada con la no celebración de la asamblea cantonal de San Ramón… no condiciona la posibilidad que tiene el PLN de presentar candidaturas'. ¿Se enteró doña Marta de esto? Porque pareciera que vive en otro planeta. Y lo peor es que, aparentemente, ella ni siquiera era delegada ni excandidata en el PLN, ¡más bien andaba buscando cómo meterle dos dedos al pastel desde afuera! ¡Qué desfachatez, fiu!
El Código Electoral establece claramente que las solicitudes de nulidad deben estar basadas en un derecho subjetivo o interés legítimo. Y aquí viene la jugada maestra: doña Esquivel ni siquiera intentó postularse por el PLN. ¡Solo busca fastidiar, pura intención de querer monopolizar la polémica! Un verdadero despiche jurídico, diría yo. Parece que busca darle morcilla al ambiente político y distraer de sus propios bretes, ¡pura picardía!
Recordemos que el TSE ya había concedido una dispensación al PLN para realizar su asamblea nacional sin contar con San Ramón, y luego incluso les dio más tiempo. Pero eso no parece importarle mucho a doña Marta, que sigue empecinada en buscarle la quinta pata al gato. Lo que sí advirtió el TSE es que, de no completar la asamblea cantonal, el PLN podría perder la contribución estatal que reciben después de las elecciones. ¡Un buen incentivo para que se pongan las pilas, eh!
Ahora me pregunto, ¿cree usted que doña Esquivel realmente espera ganar este recurso de nulidad, o simplemente está buscando llamar la atención y desestabilizar al PLN? ¿Será que esta movida va más allá de un simple problema administrativo y tiene intenciones políticas ocultas? ¡Dígame, qué piensa usted sobre esta querella y cuál cree que será el desenlace final de este tinglado?
Pa' ponerlos al día, doña Marta está metida en el famoso caso Barrenador, ya saben, aquel lleno de licitaciones turbias y contratos sospechosos. Ahora, además de enfrentar eso, quiere echar pa’ atrás la asamblea nacional del PLN realizada el 13 de septiembre, donde eligieron candidatos presidenciales y ratificaron la fórmula. Su argumento, según parece, es que no asistió la asamblea cantonal de San Ramón, Alajuela. ¡Como si eso fuera razón suficiente pa’ tumbar toda una elección!
Y no solo eso, doña Marta también mandó a volar varias resoluciones del TSE – DRPP-4572-2025, 4700-E3-2025 y 5503-E1-2025 – buscando que se anulen junto con la asamblea nacional del partido. Claramente, doña Marta está buscando cualquier resquicio legal pa’ causar revuelo y hacerse notar en esta campaña. A ver si así consigue quitarle la atención a todos esos problemas en los que anda metida, ¡pura estrategia, diay!
Lo más curioso de todo es que, aunque la ley da margen al PLN para seguir adelante con sus procesos internos pese a esa falla administrativa en San Ramón, doña Esquivel parece que se hizo la dormida. El TSE ya había dejado claro, con todas las letras, que la ausencia de San Ramón no impedía al PLN presentar candidatos a la Presidencia, Vicepresidencias o diputaciones. ¡Eso ya estaba clarito, mi pana! De hecho, el TSE enfatizó que la única consecuencia sería que el partido podría perder la deuda política si no completaban la renovación partidaria.
Las resoluciones del TSE eran claras como el agua de Barva: 'la situación presentada con la no celebración de la asamblea cantonal de San Ramón… no condiciona la posibilidad que tiene el PLN de presentar candidaturas'. ¿Se enteró doña Marta de esto? Porque pareciera que vive en otro planeta. Y lo peor es que, aparentemente, ella ni siquiera era delegada ni excandidata en el PLN, ¡más bien andaba buscando cómo meterle dos dedos al pastel desde afuera! ¡Qué desfachatez, fiu!
El Código Electoral establece claramente que las solicitudes de nulidad deben estar basadas en un derecho subjetivo o interés legítimo. Y aquí viene la jugada maestra: doña Esquivel ni siquiera intentó postularse por el PLN. ¡Solo busca fastidiar, pura intención de querer monopolizar la polémica! Un verdadero despiche jurídico, diría yo. Parece que busca darle morcilla al ambiente político y distraer de sus propios bretes, ¡pura picardía!
Recordemos que el TSE ya había concedido una dispensación al PLN para realizar su asamblea nacional sin contar con San Ramón, y luego incluso les dio más tiempo. Pero eso no parece importarle mucho a doña Marta, que sigue empecinada en buscarle la quinta pata al gato. Lo que sí advirtió el TSE es que, de no completar la asamblea cantonal, el PLN podría perder la contribución estatal que reciben después de las elecciones. ¡Un buen incentivo para que se pongan las pilas, eh!
Ahora me pregunto, ¿cree usted que doña Esquivel realmente espera ganar este recurso de nulidad, o simplemente está buscando llamar la atención y desestabilizar al PLN? ¿Será que esta movida va más allá de un simple problema administrativo y tiene intenciones políticas ocultas? ¡Dígame, qué piensa usted sobre esta querella y cuál cree que será el desenlace final de este tinglado?