¡Ay, Dios mío, qué torta! Resulta que los gringos, con toda su pinta de estar avanzados, andan tramando algo que suena a broma de ultratumba. Parece que ahora, además de mirarte la cara y ver si tienes pinta de ser ‘pesado’, van a empezar a revisar tu IMC y si tienes algún familiar con necesidad especial para decidir si te dan o no la visa. ¡Imagínate la bronca!
La cosa empezó porque el secretario de Estado, Marco Rubio (sí, ese mismo), mandó una circular a todas las embajadas pidiendo que valoren estas cosas al momento de otorgar visas de larga duración. Según ellos, la obesidad podría significar “atención médica costosa y prolongada”, y tener a alguien a cargo con discapacidades, pues eso implica que podrías no poder trabajar. ¡Tremendo pretexto para discriminar, brete!
Y ojo, que esto no aplica pa’ los turistas rápidos, sino pa' aquellos que quieren echar raíces allá. Ya saben, pa' venir a vivir, trabajar y formar familia. Imagínate tener que demostrar que estás en forma y que tu mamá no necesita constante cuidado para entrar al país. ¡Un verdadero papelón!
Según KFF Health News, fue quien dio la primicia y confirmaron con una fuente interna que sí, la circular existe y es tan rara como parece. Para ponerle contexto, Estados Unidos ya está bastante cargado con gente con problemas de obesidad –casi el 40% de la población, dicen–, y la mayoría de estos casos se concentran en los estados donde Trump tiene más apoyo. ¡Qué casualidad, diay!
Ahora bien, no es la primera vez que Estados Unidos pone trabas a la inmigración, claro. Siempre han evaluado si alguien podría convertirse en una “carga pública”, gastando dinero del gobierno. Pero esto de meter la obesidad y las necesidades familiares como criterios… bueno, está otro rollo. Parece que Trump está buscando cualquier excusa para frenar la migración, cumpliendo así una promesa de campaña, vamos.
Tommy Pigott, el vocero del Departamento de Estado, salió a defender la medida diciendo que, claro, el gobierno siempre prioriza al pueblo americano y quiere asegurar que el sistema de inmigración no les cueste una fortuna. ¿Pero a quién le importa la opinión de los demás cuando tienes el ego inflado de Trump, chunche? Además, resulta que Rubio también anda cancelando visas a gente que critica a Israel. ¡Menuda vara!
Lo que nos hace pensar, ¿qué significa esto para nosotros, los ticos? Muchos de nuestros compatriotas sueñan con irse a Estados Unidos en busca de mejores oportunidades, y esto les pone un obstáculo más. ¿Habrá que empezar a hacer ejercicio compulsivamente y a cuidar a nuestros abuelos como si fueran oro para poder optar a una visa? Ojalá esto no afecte demasiado a nuestras familias y amigos que desean una vida mejor allá afuera. Estamos viendo cómo se complica la cosa, brete.
Al final, lo que me preocupa es la injusticia de todo esto. Juzgar a alguien por su peso o por cuidar de su propia familia... ¿dónde quedó la humanidad? Me pregunto, ¿creen ustedes que estas medidas son justas y necesarias, o simplemente son otra muestra de xenofobia y discriminación disfrazada de patriotismo? Déjenme saber su opinión en los comentarios, quiero leer qué piensan mis compas ticos sobre este despache.
La cosa empezó porque el secretario de Estado, Marco Rubio (sí, ese mismo), mandó una circular a todas las embajadas pidiendo que valoren estas cosas al momento de otorgar visas de larga duración. Según ellos, la obesidad podría significar “atención médica costosa y prolongada”, y tener a alguien a cargo con discapacidades, pues eso implica que podrías no poder trabajar. ¡Tremendo pretexto para discriminar, brete!
Y ojo, que esto no aplica pa’ los turistas rápidos, sino pa' aquellos que quieren echar raíces allá. Ya saben, pa' venir a vivir, trabajar y formar familia. Imagínate tener que demostrar que estás en forma y que tu mamá no necesita constante cuidado para entrar al país. ¡Un verdadero papelón!
Según KFF Health News, fue quien dio la primicia y confirmaron con una fuente interna que sí, la circular existe y es tan rara como parece. Para ponerle contexto, Estados Unidos ya está bastante cargado con gente con problemas de obesidad –casi el 40% de la población, dicen–, y la mayoría de estos casos se concentran en los estados donde Trump tiene más apoyo. ¡Qué casualidad, diay!
Ahora bien, no es la primera vez que Estados Unidos pone trabas a la inmigración, claro. Siempre han evaluado si alguien podría convertirse en una “carga pública”, gastando dinero del gobierno. Pero esto de meter la obesidad y las necesidades familiares como criterios… bueno, está otro rollo. Parece que Trump está buscando cualquier excusa para frenar la migración, cumpliendo así una promesa de campaña, vamos.
Tommy Pigott, el vocero del Departamento de Estado, salió a defender la medida diciendo que, claro, el gobierno siempre prioriza al pueblo americano y quiere asegurar que el sistema de inmigración no les cueste una fortuna. ¿Pero a quién le importa la opinión de los demás cuando tienes el ego inflado de Trump, chunche? Además, resulta que Rubio también anda cancelando visas a gente que critica a Israel. ¡Menuda vara!
Lo que nos hace pensar, ¿qué significa esto para nosotros, los ticos? Muchos de nuestros compatriotas sueñan con irse a Estados Unidos en busca de mejores oportunidades, y esto les pone un obstáculo más. ¿Habrá que empezar a hacer ejercicio compulsivamente y a cuidar a nuestros abuelos como si fueran oro para poder optar a una visa? Ojalá esto no afecte demasiado a nuestras familias y amigos que desean una vida mejor allá afuera. Estamos viendo cómo se complica la cosa, brete.
Al final, lo que me preocupa es la injusticia de todo esto. Juzgar a alguien por su peso o por cuidar de su propia familia... ¿dónde quedó la humanidad? Me pregunto, ¿creen ustedes que estas medidas son justas y necesarias, o simplemente son otra muestra de xenofobia y discriminación disfrazada de patriotismo? Déjenme saber su opinión en los comentarios, quiero leer qué piensan mis compas ticos sobre este despache.
