Nápoles, Italia. AP. El papa Benedicto XVI dijo ayer a sacerdotes católicos, rabinos, ayatolas, patriarcas y zoroástricos de todo el mundo que la religión no puede jamás ser usada para justificar violencia.
Benedicto XVI viajó a Nápoles, cuna de la notoria organización criminal la Camorra, y se reunió con líderes religiosos congregados aquí para una conferencia de tres días sobre el papel de la religión y la cultura en la creación de un mundo sin violencia.
El Papa dijo a los líderes que todos debían trabajar por la paz y la reconciliación entre los pueblos.
“En un mundo herido por conflictos, donde la violencia es justificada en nombre de Dios, es importante repetir que la religión no puede convertirse en un vehículo de odio, nunca debe ser usada en nombre de Dios para justificar la violencia. Todo lo contrario, las religiones pueden y deben ofrecer recursos preciosos para construir una humanidad pacífica, porque hablan de paz en el corazón del hombre”, dijo.
Previamente, en una misa al aire libre en la principal plaza de Nápoles, el Papa hizo un llamado similar a la ciudad, pidiendo programas en escuelas y los lugares de trabajo para cambiar “una difusa mentalidad de violencia” que impregna la vida diaria.
Mencionó la Camorra al lamentar la forma en que la violencia atrae a muchos jóvenes a un submundo de ilegalidad.
Benedicto XVI viajó a Nápoles, cuna de la notoria organización criminal la Camorra, y se reunió con líderes religiosos congregados aquí para una conferencia de tres días sobre el papel de la religión y la cultura en la creación de un mundo sin violencia.
El Papa dijo a los líderes que todos debían trabajar por la paz y la reconciliación entre los pueblos.
“En un mundo herido por conflictos, donde la violencia es justificada en nombre de Dios, es importante repetir que la religión no puede convertirse en un vehículo de odio, nunca debe ser usada en nombre de Dios para justificar la violencia. Todo lo contrario, las religiones pueden y deben ofrecer recursos preciosos para construir una humanidad pacífica, porque hablan de paz en el corazón del hombre”, dijo.
Previamente, en una misa al aire libre en la principal plaza de Nápoles, el Papa hizo un llamado similar a la ciudad, pidiendo programas en escuelas y los lugares de trabajo para cambiar “una difusa mentalidad de violencia” que impregna la vida diaria.
Mencionó la Camorra al lamentar la forma en que la violencia atrae a muchos jóvenes a un submundo de ilegalidad.
