¡Ay, Dios mío, qué vaina! La diputada Rocío Alfaro soltó toda la bronca contra el Presidente Chaves, acusándolo de ser un gallito de los más cobardes por lo de la investigación del PANI. Todo porque la hijita de Álvaro Ramos, en medio de un mitin político, lo llamó 'dictador'. ¡Imagínate la escena!
Según cuentan los pájaros, todo empezó cuando Kennly Garza, la jefa del PANI, le avisó a Chaves sobre la denuncia. Él, en una conferencia de prensa, pareció un poco alterado, y eso le costó caro a Alfaro. La diputada no dudó en atacarlo con todo, catalogándolo de “presidente de cristal”, “bravucón” y, para rematar, “cobarde”. ¡Se lo escupió con ganas, eh!
“Usar la plata y las instituciones de este país para intimidar a una niña, con la amenaza de separar a sus padres… Esa es la muestra de lo cobarde que es el señor presidente”, exclamó Alfaro en el Plenario Legislativo. Parecía que le había agarrado ‘el aguacate’ de verdad. Uno entiende que defender principios es importante, pero bueno, a veces la lengua se nos va, ¿no?
Y siguió con la lluvia de críticas: “Si le dije cobarde por levantarme y no responder a dos diputadas, esto es peor. Lo retrata de cuerpo entero.” Claramente, la tensión entre el Poder Ejecutivo y algunos legisladores está a flor de piel, y este episodio solo sirvió para echarle más leña al fuego. Además, recordó cuando le gritaban, pues ahí sí, salió a rugir como un león, pero ahora se hace el santito.
Pero ojo, que el PANI ya salió a aclarar que la investigación está en fase preliminar. Parece que quieren dejar claro que están haciendo lo suyo, aunque muchos sospechan que esto es solo para calmar las aguas y evitar un escándalo mayor. A ver cómo sigue esta novela... ¡Porque todavía no hemos visto el final!
La verdad, es que este caso levanta muchas preguntas. ¿Es justo que el Gobierno intervenga en este tipo de situaciones? ¿Debería haber protegido a la niña de ataques mediáticos, o el PANI tenía la obligación de investigar cualquier denuncia, por mínima que sea? Parece que estamos frente a un dilema moral bastante complicado, y no hay respuestas fáciles.
Muchos analistas políticos opinan que Alfaro aprovechó la oportunidad para atacar al Presidente Chaves, buscando réditos políticos. Otros creen que simplemente estaba defendiendo los derechos de la niña y denunciando una posible violación del debido proceso. Pero lo cierto es que este incidente ha generado mucha controversia y polarizado aún más a la opinión pública. ¡Qué brete el que tenemos encima!
En fin, parece que la polémica estará servida por un buen rato. Ahora les pregunto a ustedes, compas del Foro: ¿creen que el Presidente Chaves actuó correctamente al involucrarse en este asunto, o debería haberse mantenido al margen? ¿Es justo tacharlo de cobarde, o Alfaro simplemente se excedió en sus críticas?
Según cuentan los pájaros, todo empezó cuando Kennly Garza, la jefa del PANI, le avisó a Chaves sobre la denuncia. Él, en una conferencia de prensa, pareció un poco alterado, y eso le costó caro a Alfaro. La diputada no dudó en atacarlo con todo, catalogándolo de “presidente de cristal”, “bravucón” y, para rematar, “cobarde”. ¡Se lo escupió con ganas, eh!
“Usar la plata y las instituciones de este país para intimidar a una niña, con la amenaza de separar a sus padres… Esa es la muestra de lo cobarde que es el señor presidente”, exclamó Alfaro en el Plenario Legislativo. Parecía que le había agarrado ‘el aguacate’ de verdad. Uno entiende que defender principios es importante, pero bueno, a veces la lengua se nos va, ¿no?
Y siguió con la lluvia de críticas: “Si le dije cobarde por levantarme y no responder a dos diputadas, esto es peor. Lo retrata de cuerpo entero.” Claramente, la tensión entre el Poder Ejecutivo y algunos legisladores está a flor de piel, y este episodio solo sirvió para echarle más leña al fuego. Además, recordó cuando le gritaban, pues ahí sí, salió a rugir como un león, pero ahora se hace el santito.
Pero ojo, que el PANI ya salió a aclarar que la investigación está en fase preliminar. Parece que quieren dejar claro que están haciendo lo suyo, aunque muchos sospechan que esto es solo para calmar las aguas y evitar un escándalo mayor. A ver cómo sigue esta novela... ¡Porque todavía no hemos visto el final!
La verdad, es que este caso levanta muchas preguntas. ¿Es justo que el Gobierno intervenga en este tipo de situaciones? ¿Debería haber protegido a la niña de ataques mediáticos, o el PANI tenía la obligación de investigar cualquier denuncia, por mínima que sea? Parece que estamos frente a un dilema moral bastante complicado, y no hay respuestas fáciles.
Muchos analistas políticos opinan que Alfaro aprovechó la oportunidad para atacar al Presidente Chaves, buscando réditos políticos. Otros creen que simplemente estaba defendiendo los derechos de la niña y denunciando una posible violación del debido proceso. Pero lo cierto es que este incidente ha generado mucha controversia y polarizado aún más a la opinión pública. ¡Qué brete el que tenemos encima!
En fin, parece que la polémica estará servida por un buen rato. Ahora les pregunto a ustedes, compas del Foro: ¿creen que el Presidente Chaves actuó correctamente al involucrarse en este asunto, o debería haberse mantenido al margen? ¿Es justo tacharlo de cobarde, o Alfaro simplemente se excedió en sus críticas?
