¡Ay, Dios mío! El caso del director del OIJ, Randall Zúñiga, sigue dando de qué hablar y ahora la cosa se puso aún más turbia. Resulta que las denunciantes, esas mujeres que acusaron a Zúñiga por cosas muy graves, tenían un chat secreto en WhatsApp con el famoso Douglas Sánchez, el director de Canal Opa. Y no solo eso, sino que según dicen, fue precisamente él quien las puso en contacto con la presidenta del Inamu, Yerlin Zúñiga, la misma que ahora está siendo señalada de ofrecer ayuda social a cambio de denuncias falsas... ¡Qué bronca!
La Fiscalía está investigando a fondo este nuevo giro inesperado. Al parecer, Sánchez y uno de sus asistentes tuvieron un encontronazo bastante peculiar con el mismísimo Presidente, Rodrigo Chaves, y la diputada Pilar Cisneros, allá por el 31 de octubre. Un almuerzo sospechoso que, obviamente, levanta muchas cejas. El fiscal Carlo Díaz confirmó que están revisando videos para ver si realmente hubo algo raro en ese encuentro y qué tan importante es toda esta vaina para la investigación.
Y como si fuera poco, Zúñiga enfrenta cuatro denuncias por violación, pero también está siendo criticado porque, al parecer, soltaba información confidencial de su trabajo a varias mujeres con las que mantenía relaciones. ¡Imagínate la magnitud del despiste! Dicen que hasta les avisaba cuándo iban a meterle las manos al exministro de Transporte, Mauricio Batalla, y a la expresidenta de la CCSS, Marta Esquivel... ¡Qué sal! Esto huele a podrido hasta en la cocina.
Parece que Zúñiga tenía un historial sentimental bastante movidito, con relaciones simultáneas con varias mujeres, y cuando estas se dieron cuenta de la situación, crearon al menos dos grupos de chat donde compartían información. En uno de esos chats figura el nombre de Douglas Sánchez, el presentador y director de Central Noticias, un medio cercano al Gobierno. Y ahí es donde la trama se complica aún más porque Sánchez, según las denunciantes, era quien les pedía que le pasaran información sobre Zúñiga, previa a presentar las denuncias formales.
“Hoy tengo chats con señoras y el otro chat lo tenemos nosotras cuatro más un señor de nombre Douglas Sánchez, no sé el segundo apellido,” reza parte del documento que está manejando la Fiscalía. “Él siempre nos ha ayudado, nos dijo que nos pasara información, pero que fuera verídica, pasamos fotos y todas las cosas y él nos contactó con Jendry (Yerlín) Zúñiga del INAMU, ella nos ha ayudado mucho.” ¡Un chiringuito de información, vamos! Parece una novela cafetera, pero con implicaciones políticas y legales muy serias.
Y ni hablar de Carlos Valenciano, el dueño de Central Noticias y actual tesorero de campaña de Laura Fernández, la candidata presidencial oficialista. Cuando Valenciano se unió a la campaña de Fernández, aseguró haber cedido sus acciones a un fideicomiso en Panamá, cuyos beneficiarios serían su esposa e hijo. ¿Movidas extrañas, chunches? Siempre hay algo detrás, diay...
Pero la bomba estalló cuando salió a luz la denuncia presentada en Turrialba por una mujer que asegura que funcionarias del Inamu le ofrecieron ayuda del IMAS y hasta pagarle los estudios si firmaba una denuncia falsa contra Zúñiga. Esta señora afirma que Claudia Blanco, aparentemente de la oficina legal del Inamu, y Yerlin Zúñiga, la presidenta del instituto, fueron quienes hicieron la propuesta. Y lo más escandaloso es que, a pesar de rechazar la oferta, la denuncia que nunca firmó apareció publicada en un reportaje de Douglas Sánchez en Canal Opa... ¡Qué torta! ¿Cómo llegó esa vaina al aire?
Con todo este embrollo, la gente se pregunta: ¿Hasta dónde llega la influencia política en este caso? ¿Se está manipulando la opinión pública a través de la información filtrada? ¿Es posible que el Gobierno esté involucrado en un intento de encubrimiento? Y hablando de versiones contradictorias, el Presidente Chaves ha cambiado su discurso sobre lo que sabía de las denuncias contra Zúñiga, primero afirmando conocer cinco denuncias y luego diciendo que no conocía nada. ¡Vamos, Presidente, respete la inteligencia de la gente! ¿Cree usted que la población sabe quién está diciendo la verdad en este asunto lleno de giros inesperados y por qué tanta prisa por sacar conclusiones?
La Fiscalía está investigando a fondo este nuevo giro inesperado. Al parecer, Sánchez y uno de sus asistentes tuvieron un encontronazo bastante peculiar con el mismísimo Presidente, Rodrigo Chaves, y la diputada Pilar Cisneros, allá por el 31 de octubre. Un almuerzo sospechoso que, obviamente, levanta muchas cejas. El fiscal Carlo Díaz confirmó que están revisando videos para ver si realmente hubo algo raro en ese encuentro y qué tan importante es toda esta vaina para la investigación.
Y como si fuera poco, Zúñiga enfrenta cuatro denuncias por violación, pero también está siendo criticado porque, al parecer, soltaba información confidencial de su trabajo a varias mujeres con las que mantenía relaciones. ¡Imagínate la magnitud del despiste! Dicen que hasta les avisaba cuándo iban a meterle las manos al exministro de Transporte, Mauricio Batalla, y a la expresidenta de la CCSS, Marta Esquivel... ¡Qué sal! Esto huele a podrido hasta en la cocina.
Parece que Zúñiga tenía un historial sentimental bastante movidito, con relaciones simultáneas con varias mujeres, y cuando estas se dieron cuenta de la situación, crearon al menos dos grupos de chat donde compartían información. En uno de esos chats figura el nombre de Douglas Sánchez, el presentador y director de Central Noticias, un medio cercano al Gobierno. Y ahí es donde la trama se complica aún más porque Sánchez, según las denunciantes, era quien les pedía que le pasaran información sobre Zúñiga, previa a presentar las denuncias formales.
“Hoy tengo chats con señoras y el otro chat lo tenemos nosotras cuatro más un señor de nombre Douglas Sánchez, no sé el segundo apellido,” reza parte del documento que está manejando la Fiscalía. “Él siempre nos ha ayudado, nos dijo que nos pasara información, pero que fuera verídica, pasamos fotos y todas las cosas y él nos contactó con Jendry (Yerlín) Zúñiga del INAMU, ella nos ha ayudado mucho.” ¡Un chiringuito de información, vamos! Parece una novela cafetera, pero con implicaciones políticas y legales muy serias.
Y ni hablar de Carlos Valenciano, el dueño de Central Noticias y actual tesorero de campaña de Laura Fernández, la candidata presidencial oficialista. Cuando Valenciano se unió a la campaña de Fernández, aseguró haber cedido sus acciones a un fideicomiso en Panamá, cuyos beneficiarios serían su esposa e hijo. ¿Movidas extrañas, chunches? Siempre hay algo detrás, diay...
Pero la bomba estalló cuando salió a luz la denuncia presentada en Turrialba por una mujer que asegura que funcionarias del Inamu le ofrecieron ayuda del IMAS y hasta pagarle los estudios si firmaba una denuncia falsa contra Zúñiga. Esta señora afirma que Claudia Blanco, aparentemente de la oficina legal del Inamu, y Yerlin Zúñiga, la presidenta del instituto, fueron quienes hicieron la propuesta. Y lo más escandaloso es que, a pesar de rechazar la oferta, la denuncia que nunca firmó apareció publicada en un reportaje de Douglas Sánchez en Canal Opa... ¡Qué torta! ¿Cómo llegó esa vaina al aire?
Con todo este embrollo, la gente se pregunta: ¿Hasta dónde llega la influencia política en este caso? ¿Se está manipulando la opinión pública a través de la información filtrada? ¿Es posible que el Gobierno esté involucrado en un intento de encubrimiento? Y hablando de versiones contradictorias, el Presidente Chaves ha cambiado su discurso sobre lo que sabía de las denuncias contra Zúñiga, primero afirmando conocer cinco denuncias y luego diciendo que no conocía nada. ¡Vamos, Presidente, respete la inteligencia de la gente! ¿Cree usted que la población sabe quién está diciendo la verdad en este asunto lleno de giros inesperados y por qué tanta prisa por sacar conclusiones?
