¡Ay, Dios mío, qué movida la que acaba de pasar en Hollywood! Resulta que Netflix, ese gigante del streaming que todos usamos para viciar series hasta quedarnos dormidos, se tragó a Warner Bros Discovery por unos jugosos 72 mil millones de dólares. ¡Setenta y dos mil millones! Imagínate cuántos churros se pueden comprar con eso.
Y no es cualquier compra, va. Estamos hablando de la casa de Harry Potter, Juego de Tronos, y hasta de HBO Max, ese canal que te hace sentir intelectual cuando estás viendo Documentales sobre ballenas. Esto significa que Netflix ahora tiene un arsenal de personajes y franquicias que antes estaban en otras manos, preparándose para darle pelea a Disney y Amazon Prime Video, porque parece que la guerra del streaming está que arde.
Según cuentan, Netflix se zafó de la competencia, dejando atrás a Comcast y Paramount Skydance, quienes también estaban buscando hacerse con Warner Bros. Ted Sarandos, uno de los jefes de Netflix, anda diciendo que tienen todo atado para que les den el visto bueno de las autoridades, porque claro, estas cosas no son tan sencillas como agarrar el control remoto y cambiar de canal. Hay que ver si no hay broncas con las leyes de monopolio y todo eso.
Lo curioso es que Sarandos prometió que seguiremos viendo esas pelotas de Warner Bros en las salas de cine. Parece que no quieren espantar a la gente que todavía prefiere la palomita grande y la pantalla gigante. Pero sí anda dando vueltas la idea de qué harán con HBO. Parece que van a respetar la marca, pero aún no saben bien cómo integrarla en su plataforma. Se rumora que podrían hacer combos, o alguna promoción especial para los suscriptores, ¿quién sabe?
Ahora, la lana que Netflix piensa ahorrar – ¡entre dos y tres mil millones de dólares! – lo hará recortando gastos, eliminando repetidos trabajos en oficinas y equipos técnicos. Algunos dicen que esto significará despidos en ambas compañías, ¡qué pena!, pero así es el brete en estos tiempos de crisis económica global. Aunque de seguro habrá muchos que se rifen para conseguir un buen puesto en el nuevo imperio del entretenimiento.
Pero ojo, que esto no es tan sencillo como parece. Paolo Pescatore, un gurú tecnológico, dice que esta jugada es ambiciosa para Netflix, y que podrían tener problemas para meter todas las piezas en el mismo rompecabezas. Fusionar culturas empresariales diferentes es un proceso complicado, y siempre hay roces. Además, Warner Bros tiene una historia larguísima en la industria, mientras que Netflix es relativamente joven, aunque muy rápido creciendo.
Y para nosotros, los usuarios, ¿qué significa todo esto? Pues posiblemente más contenido, pero también quizás un aumento en el precio de la suscripción. Danni Hewson, una analista financiera, cree que Netflix aprovechará esta oportunidad para subir los precios, argumentando que ahora ofrecen un catálogo mucho más completo. ¡Uy, vaya!, esperemos que no nos saquen demasiado la cartera… Porque ya estamos hartos de pagar abones por todo.
En fin, el futuro del entretenimiento está cambiando a pasos agigantados, y esta adquisición es un golpe tremendo. Ahora, mi pana, dime tú... ¿Crees que esta unión de Netflix y Warner Bros realmente traerá mejores opciones para los fanáticos del cine y las series, o simplemente será una estrategia para sacar más billetes de nuestros bolsillos?
Y no es cualquier compra, va. Estamos hablando de la casa de Harry Potter, Juego de Tronos, y hasta de HBO Max, ese canal que te hace sentir intelectual cuando estás viendo Documentales sobre ballenas. Esto significa que Netflix ahora tiene un arsenal de personajes y franquicias que antes estaban en otras manos, preparándose para darle pelea a Disney y Amazon Prime Video, porque parece que la guerra del streaming está que arde.
Según cuentan, Netflix se zafó de la competencia, dejando atrás a Comcast y Paramount Skydance, quienes también estaban buscando hacerse con Warner Bros. Ted Sarandos, uno de los jefes de Netflix, anda diciendo que tienen todo atado para que les den el visto bueno de las autoridades, porque claro, estas cosas no son tan sencillas como agarrar el control remoto y cambiar de canal. Hay que ver si no hay broncas con las leyes de monopolio y todo eso.
Lo curioso es que Sarandos prometió que seguiremos viendo esas pelotas de Warner Bros en las salas de cine. Parece que no quieren espantar a la gente que todavía prefiere la palomita grande y la pantalla gigante. Pero sí anda dando vueltas la idea de qué harán con HBO. Parece que van a respetar la marca, pero aún no saben bien cómo integrarla en su plataforma. Se rumora que podrían hacer combos, o alguna promoción especial para los suscriptores, ¿quién sabe?
Ahora, la lana que Netflix piensa ahorrar – ¡entre dos y tres mil millones de dólares! – lo hará recortando gastos, eliminando repetidos trabajos en oficinas y equipos técnicos. Algunos dicen que esto significará despidos en ambas compañías, ¡qué pena!, pero así es el brete en estos tiempos de crisis económica global. Aunque de seguro habrá muchos que se rifen para conseguir un buen puesto en el nuevo imperio del entretenimiento.
Pero ojo, que esto no es tan sencillo como parece. Paolo Pescatore, un gurú tecnológico, dice que esta jugada es ambiciosa para Netflix, y que podrían tener problemas para meter todas las piezas en el mismo rompecabezas. Fusionar culturas empresariales diferentes es un proceso complicado, y siempre hay roces. Además, Warner Bros tiene una historia larguísima en la industria, mientras que Netflix es relativamente joven, aunque muy rápido creciendo.
Y para nosotros, los usuarios, ¿qué significa todo esto? Pues posiblemente más contenido, pero también quizás un aumento en el precio de la suscripción. Danni Hewson, una analista financiera, cree que Netflix aprovechará esta oportunidad para subir los precios, argumentando que ahora ofrecen un catálogo mucho más completo. ¡Uy, vaya!, esperemos que no nos saquen demasiado la cartera… Porque ya estamos hartos de pagar abones por todo.
En fin, el futuro del entretenimiento está cambiando a pasos agigantados, y esta adquisición es un golpe tremendo. Ahora, mi pana, dime tú... ¿Crees que esta unión de Netflix y Warner Bros realmente traerá mejores opciones para los fanáticos del cine y las series, o simplemente será una estrategia para sacar más billetes de nuestros bolsillos?