¡Ay, mi gente! El Tribunal Supremo de Elecciones (TSE) ya le puso turbo a los preparativos para las elecciones nacionales del 2026. Resulta que mandaron a 120 asesores electorales a recorrer los 84 cantones del país. Un brete considerable, díganle, porque hay mucho papeleo y gente que juramentar.
Este primer recorrido, que empezó hace unos días y se estira hasta mediados de diciembre, es crucial. Los asesores tienen que ratificar dónde van a estar los centros de votación, asegurándose de que todo esté funcionando como relojito. También tienen la responsabilidad de juramentar a esos señores y señoras que van a trabajar en las juntas receptoras de votos (JRV), tanto a nivel cantonal como auxiliar. ¡Un trabajo de chinos, vamos!
Pero espérense que esto no acaba ahí, pues desde el 5 de enero, los asesores volverán a activarse para entregar toda la documentación electoral a las JRV. Hay que tenerlo listo antes del 24 de enero, según el calendario oficial del TSE. Además, tendrán que completar la juramentación de los agentes electores pendientes, y si alguien se apoya, bueno, habrá sustituciones que hacer. ¡Imagínate el estrés!
Lo que más preocupa, hablando claro, es cómo van a coordinar todo este operativo con la Fuerza Pública, las juntas cantonales, el Cuerpo Nacional de Delegados y todas esas personas que estarán a cargo de cada centro de votación. Porque al final, el objetivo es que todo salga tranquilo, eficiente y seguro. No queremos sorpresas desagradables el día de las elecciones.
Y hablando de el TSE, recordemos que estos 120 asesores ya hicieron su juramento formal la semana pasada, en un acto que tuvo lugar en el auditorio Francisco Sáenz Meza. Ahí estaban los magistrados del TSE supervisando que todos cumplieran con su deber. Se nota que quieren ponerle toda la carne al asador para estas elecciones, que serán importantes porque escogeremos al nuevo Presidente, Vicepresidentes y a nuestros representantes en la Asamblea Legislativa.
Ahora bien, resulta que ya instalaron las 84 juntas cantonales para las elecciones del 2026. Estas juntas son superimportantes porque son quienes toman decisiones clave sobre el desarrollo de las elecciones en cada cantón. Están integradas por ciudadanos destacados, elegidos por el Concejo Cantonal, y su papel es fundamental para garantizar que el proceso sea justo y transparente. Uno se pregunta, ¿tendrán realmente la capacidad de manejar la presión y tomar las mejores decisiones?
Es evidente que el TSE está moviendo cielo y tierra para que todo salga perfecto el 1 de febrero de 2026. Pero, siendo sinceros, ¿será suficiente con enviar asesores a cada cantón y juramentar a tanta gente? ¿No sería más importante fortalecer la educación cívica entre los ciudadanos, para que todos entendamos la importancia de votar informado y responsable? ¡Que no nos vengan luego con excusas de que no sabían qué estaban haciendo!
En fin, estamos a casi dos años de las elecciones, y todavía hay mucho por hacer. Con tantas variables en juego, ¿creen ustedes que el TSE está preparado para enfrentar cualquier eventualidad y garantizar unas elecciones limpias y democráticas? Déjenme saber su opinión en los comentarios, ¡quiero leerlos!
Este primer recorrido, que empezó hace unos días y se estira hasta mediados de diciembre, es crucial. Los asesores tienen que ratificar dónde van a estar los centros de votación, asegurándose de que todo esté funcionando como relojito. También tienen la responsabilidad de juramentar a esos señores y señoras que van a trabajar en las juntas receptoras de votos (JRV), tanto a nivel cantonal como auxiliar. ¡Un trabajo de chinos, vamos!
Pero espérense que esto no acaba ahí, pues desde el 5 de enero, los asesores volverán a activarse para entregar toda la documentación electoral a las JRV. Hay que tenerlo listo antes del 24 de enero, según el calendario oficial del TSE. Además, tendrán que completar la juramentación de los agentes electores pendientes, y si alguien se apoya, bueno, habrá sustituciones que hacer. ¡Imagínate el estrés!
Lo que más preocupa, hablando claro, es cómo van a coordinar todo este operativo con la Fuerza Pública, las juntas cantonales, el Cuerpo Nacional de Delegados y todas esas personas que estarán a cargo de cada centro de votación. Porque al final, el objetivo es que todo salga tranquilo, eficiente y seguro. No queremos sorpresas desagradables el día de las elecciones.
Y hablando de el TSE, recordemos que estos 120 asesores ya hicieron su juramento formal la semana pasada, en un acto que tuvo lugar en el auditorio Francisco Sáenz Meza. Ahí estaban los magistrados del TSE supervisando que todos cumplieran con su deber. Se nota que quieren ponerle toda la carne al asador para estas elecciones, que serán importantes porque escogeremos al nuevo Presidente, Vicepresidentes y a nuestros representantes en la Asamblea Legislativa.
Ahora bien, resulta que ya instalaron las 84 juntas cantonales para las elecciones del 2026. Estas juntas son superimportantes porque son quienes toman decisiones clave sobre el desarrollo de las elecciones en cada cantón. Están integradas por ciudadanos destacados, elegidos por el Concejo Cantonal, y su papel es fundamental para garantizar que el proceso sea justo y transparente. Uno se pregunta, ¿tendrán realmente la capacidad de manejar la presión y tomar las mejores decisiones?
Es evidente que el TSE está moviendo cielo y tierra para que todo salga perfecto el 1 de febrero de 2026. Pero, siendo sinceros, ¿será suficiente con enviar asesores a cada cantón y juramentar a tanta gente? ¿No sería más importante fortalecer la educación cívica entre los ciudadanos, para que todos entendamos la importancia de votar informado y responsable? ¡Que no nos vengan luego con excusas de que no sabían qué estaban haciendo!
En fin, estamos a casi dos años de las elecciones, y todavía hay mucho por hacer. Con tantas variables en juego, ¿creen ustedes que el TSE está preparado para enfrentar cualquier eventualidad y garantizar unas elecciones limpias y democráticas? Déjenme saber su opinión en los comentarios, ¡quiero leerlos!