¡Ay, pata! Quién lo diría, tenemos a un jovencito que está haciendo tremendo ruido allá afuera. Carlos Andrés Valverde, con apenas 12 añitos, anda representando a Costa Rica en competencias de kartismo de primer nivel en España. Este mae ya se rifó desde los siete años, y ahora va con toda en la T4 Nations Cup 2025, demostrando que en Pavas también salen corredores a toda máquina.
La verdad es que la historia de Carlos Andrés es pura inspiración. Gracias a una beca, pudo meterse al kartismo nacional, donde tuvo que sudarle la gota gorda para ganarse un lugar entre montones de participantes. Imagínate la bronca, pero este chico demostró tener el temple y la habilidad para salir adelante. Ya se ganó el derecho a representar al país, y eso no es cualquier vaina, diay.
Y ahí nomás, en plena competencia en España, Carlos Andrés dejó claro que no llegó pa’ jugar. Con humildad y ganas de triunfar, dijo: “Espero que nos vaya bien a todos, que logremos traer la Copa de Naciones… Quiero aprender mucho, me gustaría ser campeón y conocer otros pilotos.” ¡Qué tesoro de niño! Además, no se olvidó de agradecerle a Dios y a su familia, porque sabemos que el respaldo familiar es fundamental para llegar lejos, brete.
Pero esto no es nuevo, muchachos. Carlos Andrés lleva cinco años dando candela en las pistas. El año pasado, se coronó campeón del Campeonato de Invierno en la categoría Stars of Tomorrow, ¡una barbaridad! Y la cereza del pastel: la Asociación de Corredores de Kartismo de Costa Rica (ACEK) lo nombró Piloto del Año. Así que ya saben, este chico no es ningún fulero, sino un representante dignísimo de nuestro deporte a nivel internacional.
Ahora, la T4 Nations Cup 2025 está reventando en Valencia, España, con 246 pilotos de 37 países. ¡Costa Rica mandó un buen contingentazo! Ocho pilotos representando nuestros colores, incluyendo a la Francesa Morice, la primera mujer en participar en este torneo. Eugenio Valldeperas, el presidente de ACEK, está orgullosisimo de ver a nuestros corredores midiéndose contra los mejores del mundo. Dijo que es un privilegio y una oportunidad invaluable para demostrar el talento costarricense en el automovilismo global.
Lo bueno de esta competencia es que todos los pilotos usan el mismo chasis y motor, así que no hay margen para trucos ni mejoras ilegales. Todo depende de la pericia del piloto, de su destreza y su capacidad de reacción. Ahí es donde entra en juego el talento de Carlos Andrés y de todos los que representan a Costa Rica. Que le den duro, maes, y demuestren que podemos competir a nivel mundial, aunque a veces nos echen sal, ¡hay que seguir remando!
Esta participación es un motivo de celebración para todos los costarricenses. Demuestra que, pese a las dificultades y a los retos económicos, todavía hay jóvenes talentosos que sueñan en grande y se esfuerzan por alcanzar sus metas. Y eso es algo que merece todo nuestro apoyo y reconocimiento. ¡Que siga creciendo el deporte nacional, y que sigamos sacando figuras que nos llenen de orgullo!
Sin embargo, con tanta emoción y alegría, me queda una inquietud: ¿Cómo podemos asegurar que más niños y niñas talentosos tengan acceso a oportunidades como la beca que recibió Carlos Andrés? ¿Será posible crear programas de desarrollo deportivo más inclusivos y accesibles para todos los jóvenes costarricenses, independientemente de su origen socioeconómico? ¡Déjenme sus opiniones abajo en el foro, compas!
La verdad es que la historia de Carlos Andrés es pura inspiración. Gracias a una beca, pudo meterse al kartismo nacional, donde tuvo que sudarle la gota gorda para ganarse un lugar entre montones de participantes. Imagínate la bronca, pero este chico demostró tener el temple y la habilidad para salir adelante. Ya se ganó el derecho a representar al país, y eso no es cualquier vaina, diay.
Y ahí nomás, en plena competencia en España, Carlos Andrés dejó claro que no llegó pa’ jugar. Con humildad y ganas de triunfar, dijo: “Espero que nos vaya bien a todos, que logremos traer la Copa de Naciones… Quiero aprender mucho, me gustaría ser campeón y conocer otros pilotos.” ¡Qué tesoro de niño! Además, no se olvidó de agradecerle a Dios y a su familia, porque sabemos que el respaldo familiar es fundamental para llegar lejos, brete.
Pero esto no es nuevo, muchachos. Carlos Andrés lleva cinco años dando candela en las pistas. El año pasado, se coronó campeón del Campeonato de Invierno en la categoría Stars of Tomorrow, ¡una barbaridad! Y la cereza del pastel: la Asociación de Corredores de Kartismo de Costa Rica (ACEK) lo nombró Piloto del Año. Así que ya saben, este chico no es ningún fulero, sino un representante dignísimo de nuestro deporte a nivel internacional.
Ahora, la T4 Nations Cup 2025 está reventando en Valencia, España, con 246 pilotos de 37 países. ¡Costa Rica mandó un buen contingentazo! Ocho pilotos representando nuestros colores, incluyendo a la Francesa Morice, la primera mujer en participar en este torneo. Eugenio Valldeperas, el presidente de ACEK, está orgullosisimo de ver a nuestros corredores midiéndose contra los mejores del mundo. Dijo que es un privilegio y una oportunidad invaluable para demostrar el talento costarricense en el automovilismo global.
Lo bueno de esta competencia es que todos los pilotos usan el mismo chasis y motor, así que no hay margen para trucos ni mejoras ilegales. Todo depende de la pericia del piloto, de su destreza y su capacidad de reacción. Ahí es donde entra en juego el talento de Carlos Andrés y de todos los que representan a Costa Rica. Que le den duro, maes, y demuestren que podemos competir a nivel mundial, aunque a veces nos echen sal, ¡hay que seguir remando!
Esta participación es un motivo de celebración para todos los costarricenses. Demuestra que, pese a las dificultades y a los retos económicos, todavía hay jóvenes talentosos que sueñan en grande y se esfuerzan por alcanzar sus metas. Y eso es algo que merece todo nuestro apoyo y reconocimiento. ¡Que siga creciendo el deporte nacional, y que sigamos sacando figuras que nos llenen de orgullo!
Sin embargo, con tanta emoción y alegría, me queda una inquietud: ¿Cómo podemos asegurar que más niños y niñas talentosos tengan acceso a oportunidades como la beca que recibió Carlos Andrés? ¿Será posible crear programas de desarrollo deportivo más inclusivos y accesibles para todos los jóvenes costarricenses, independientemente de su origen socioeconómico? ¡Déjenme sus opiniones abajo en el foro, compas!
