Está un borracho ya bien tapis, al que le dan ganas de cagar. Y le pregunta al cantinero dónde queda el servicio sanitario. "Por ese pasillo, a la derecha."
Y se va el tapis, pero tan jumas, que se metió en el cuarto de la izquierda. Y en medio de la mica se queda viendo:
"Siás tonto, güevón... ¡Un sanitario de oro! Cuando le cuente a los compas no me lo van a creer..."
Y al día siguiente, se acuerda de la vara y le cuenta a los maes: "Maes, anoche estuve tomando en un bar que tiene un sanitario de oro..."
"Siás tan jetón playo, ¿cómo que un sanitario de oro? Teus estaba hasta la picha ya y se lo imaginó..."
"Qué me imaginé nada, era de oro, el servicio... Maes, lo agüevado es que ya no me acuerdo cuál bar era, vamos preguntando de uno en uno y verán..."
Y se van los maes de bar en bar preguntando, y como al quinto bar llegan:
- Señor, perdón, ¿aquí es donde tiene un sanitario de oro?
- ¡Mae, Roberto, aquí llegó el hijueputa que anoche se cagó en el trombón...!
Y se va el tapis, pero tan jumas, que se metió en el cuarto de la izquierda. Y en medio de la mica se queda viendo:
"Siás tonto, güevón... ¡Un sanitario de oro! Cuando le cuente a los compas no me lo van a creer..."
Y al día siguiente, se acuerda de la vara y le cuenta a los maes: "Maes, anoche estuve tomando en un bar que tiene un sanitario de oro..."
"Siás tan jetón playo, ¿cómo que un sanitario de oro? Teus estaba hasta la picha ya y se lo imaginó..."
"Qué me imaginé nada, era de oro, el servicio... Maes, lo agüevado es que ya no me acuerdo cuál bar era, vamos preguntando de uno en uno y verán..."
Y se van los maes de bar en bar preguntando, y como al quinto bar llegan:
- Señor, perdón, ¿aquí es donde tiene un sanitario de oro?
- ¡Mae, Roberto, aquí llegó el hijueputa que anoche se cagó en el trombón...!