Maes, si ustedes creían que la vara con Celso Gamboa terminaba con la extradición y una posible foto en overol anaranjado, están muy equivocados. La cosa se puso color de hormiga, y feo. Resulta que al Departamento de Justicia de Estados Unidos no le basta con meterlo preso; quieren pasarle una factura que lo va a dejar temblando y, de paso, quitarle hasta el último chunche que supuestamente compró con plata sucia. Esto ya no es solo un caso penal, es una operación de limpieza financiera a gran escala. ¡El despiche que se armó este mae es de proporciones épicas!
Diay, la jugada legal que están aplicando se llama "extinción de dominio". Para explicarlo en tico: si usted no puede demostrar con facturas y papeles que su mansión, sus carros de lujo y sus cuentas bancarias salieron de plata limpia, el Estado se los quita. Y punto. No hay quite. No es un castigo, dicen ellos, sino una forma de asegurarse de que el crimen no pague. El fiscal gringo a cargo, un tal M. Wesley Wynne, lo dejó más que claro en los documentos de la extradición. Es básicamente un aviso de "vaya despidiéndose de todo", porque van a peinar cada propiedad, cada vehículo y cada dólar que tenga su nombre y que huela, aunque sea un poquito, a los millones que la DEA dice que se ganaba con cada envío de coca.
Y es que la plata que presuntamente movía Gamboa no era para comprar confites, ¿verdad? Según las investigaciones, el hombre se podía echar a la bolsa entre $200,000 y $600,000 ¡por cada cargamento! Hagan ustedes los números. Por eso el Departamento del Tesoro no se anduvo con rodeos y lo metió de cabeza en la famosa lista OFAC, junto con sus negocios. ¿Qué significa eso? Congelado. Su bufete, "Celso Gamboa y Asociados", y hasta el equipo de segunda división, Limón Black Star, quedaron en el limbo. Es como si le hubieran puesto un candado gigante a todas sus finanzas. Pero ahora los gringos no solo quieren el candado, quieren la llave, la puerta y todo lo que hay adentro de la casa.
Pero aquí es donde la torta se pone fea de verdad. Como si perder todo el patrimonio no fuera suficiente castigo, la justicia estadounidense le tiene preparada una multa de hasta $10 millones de dólares. ¡Diez millones! Al tipo de cambio de hoy, eso es más de ₡5,000 millones de colones. Una absoluta salvajada. ¿Y de dónde sacan que tenía para tanto? Pues, un testigo le "cantó" al FBI que vio a Gamboa mover la bicoca de $16 millones en una sola transacción con un narco nicaragüense. ¡$16 millones, maes! Con esos números, la multa de $10 millones hasta parece un vuelto. Claramente, el brete de supuesto coordinador regional del Cártel del Golfo pagaba bien, pero la liquidación que le van a dar va a estar bien, pero bien salada.
Al final, todo este caso es un recordatorio salvaje de que por más alto que se llegue, la caída puede ser durísima. De ser uno de los magistrados más poderosos del país, en la Sala Tercera, a estar en la mira de la DEA, el FBI y todo el abecedario de agencias gringas. La justicia de EE. UU. no se anda con juegos: no solo te encierran, te borran del mapa financiero. Te quitan el verdadero poder, que al final del día es la plata. Ahora les pregunto a ustedes, foreros: ¿Creen que esta medida de quitarle hasta el último cinco a los capos realmente sirve para desmantelar las redes narco, o es solo un show para las cámaras mientras otro mae simplemente ocupa el lugar que dejó Celso?
Diay, la jugada legal que están aplicando se llama "extinción de dominio". Para explicarlo en tico: si usted no puede demostrar con facturas y papeles que su mansión, sus carros de lujo y sus cuentas bancarias salieron de plata limpia, el Estado se los quita. Y punto. No hay quite. No es un castigo, dicen ellos, sino una forma de asegurarse de que el crimen no pague. El fiscal gringo a cargo, un tal M. Wesley Wynne, lo dejó más que claro en los documentos de la extradición. Es básicamente un aviso de "vaya despidiéndose de todo", porque van a peinar cada propiedad, cada vehículo y cada dólar que tenga su nombre y que huela, aunque sea un poquito, a los millones que la DEA dice que se ganaba con cada envío de coca.
Y es que la plata que presuntamente movía Gamboa no era para comprar confites, ¿verdad? Según las investigaciones, el hombre se podía echar a la bolsa entre $200,000 y $600,000 ¡por cada cargamento! Hagan ustedes los números. Por eso el Departamento del Tesoro no se anduvo con rodeos y lo metió de cabeza en la famosa lista OFAC, junto con sus negocios. ¿Qué significa eso? Congelado. Su bufete, "Celso Gamboa y Asociados", y hasta el equipo de segunda división, Limón Black Star, quedaron en el limbo. Es como si le hubieran puesto un candado gigante a todas sus finanzas. Pero ahora los gringos no solo quieren el candado, quieren la llave, la puerta y todo lo que hay adentro de la casa.
Pero aquí es donde la torta se pone fea de verdad. Como si perder todo el patrimonio no fuera suficiente castigo, la justicia estadounidense le tiene preparada una multa de hasta $10 millones de dólares. ¡Diez millones! Al tipo de cambio de hoy, eso es más de ₡5,000 millones de colones. Una absoluta salvajada. ¿Y de dónde sacan que tenía para tanto? Pues, un testigo le "cantó" al FBI que vio a Gamboa mover la bicoca de $16 millones en una sola transacción con un narco nicaragüense. ¡$16 millones, maes! Con esos números, la multa de $10 millones hasta parece un vuelto. Claramente, el brete de supuesto coordinador regional del Cártel del Golfo pagaba bien, pero la liquidación que le van a dar va a estar bien, pero bien salada.
Al final, todo este caso es un recordatorio salvaje de que por más alto que se llegue, la caída puede ser durísima. De ser uno de los magistrados más poderosos del país, en la Sala Tercera, a estar en la mira de la DEA, el FBI y todo el abecedario de agencias gringas. La justicia de EE. UU. no se anda con juegos: no solo te encierran, te borran del mapa financiero. Te quitan el verdadero poder, que al final del día es la plata. Ahora les pregunto a ustedes, foreros: ¿Creen que esta medida de quitarle hasta el último cinco a los capos realmente sirve para desmantelar las redes narco, o es solo un show para las cámaras mientras otro mae simplemente ocupa el lugar que dejó Celso?