¡Ay, Dios mío! Parece que el Partido Liberación Nacional (PLN) se le anda yendo la olla con la organización interna en Puerto Jiménez. El Tribunal Supremo de Elecciones (TSE), pa’ ponerle pausa, les mandó una notificación bien clara: tienen que terminar de armar la estructura del cantón, ¡ya! No vaya a ser que se anden echando frijoles donde no deben.
Según el documento oficial del TSE, firmadito por Marta Castillo, jefa del departamento de registro de partidos políticos, parece que aún falta un poquito para que la casa esté completa. Lo que más preocupa es que no han nombrado al fiscal de la Comisión Ejecutiva Cantonal. Ya les habían puesto el ojo encima desde julio pasado, advirtiéndoles que arreglaran el brete, pero parece que ahí no hubo caso.
Lo que más marea es que ya van 118 días desde que el PLN recibió el ultimátum, y no se escucha ni un pío. Ni siquiera el candidato presidencial, Álvaro Ramos, ni los big bosses del partido se han pronunciado. Algunos delegados, hartos de la situación, lanzaron un comunicado de prensa para expresar su frustración y exigir respuestas. ¡Imagínate la bronca!
Resulta que desde agosto pasado, varios delegados ya le escribieron una carta formal a Ramos, poniéndole en evidencia la falta de comunicación y el incumplimiento. Pero, sorpresa, ¡no recibieron respuesta! Entonces, como buenos campesinos aguerridos, fueron corriendo al TSE a buscar ayuda. Y el TSE, como buen juez, les dio la razón y les recordó que la renovación de las estructuras tenía que estar lista a finales de julio.
Pero el TSE, que a veces también tiene corazón, les da una oportunidad más. Les dice que sí pueden seguir presentando candidaturas y, cuando quieran, pueden pedir que revisen si la estructura está completita. Eso sí, tienen hasta julio de 2029 para arreglarlo, ¡pero que no se duerman en los laureles! Porque si no, se podrían quedar sin la deuda política y perder los adelantos, ¡y eso es pan comido para los adversarios!
Y hablando de plata, esto afecta tanto las elecciones de 2026 como las municipales de 2028. Imagínate tener que lidiar con todos esos trámites y restricciones mientras intentas conseguir votos. ¡Una verdadera torta! Además, aunque puedan presentar informes de gastos, el dinero no llega hasta que no hayan terminado de organizar las cosas por completo.
Según los vecinos de Puerto Jiménez, toda esta movida es culpa de la dirigencia nacional y de la campaña de Ramos. Dicen que ellos han estado actuando con transparencia y avisándole sobre el problema desde hace meses, pero nadie les prestó atención. Ahora toca recoger los pedazos y ver cómo salir adelante. Miguel Guillén, el secretario general del PLN, admite que todavía faltan algunos nombramientos, pero dice que están avanzando gracias al esfuerzo de la dirigencia y los delegados de cada cantón. ¡A ver si se ponen las pilas de verdad!
En fin, qué rollo. La situación en Puerto Jiménez nos deja pensando: ¿Será que la burocracia y la politiquería le están ganando la partida al desarrollo de nuestras comunidades? ¿O será que simplemente alguien se le durmió el pulso y ahora tenemos que pagar las consecuencias? ¿Ustedes qué opinan, compas? Dejen sus comentarios abajo, ¡me interesa saber su punto de vista!
Según el documento oficial del TSE, firmadito por Marta Castillo, jefa del departamento de registro de partidos políticos, parece que aún falta un poquito para que la casa esté completa. Lo que más preocupa es que no han nombrado al fiscal de la Comisión Ejecutiva Cantonal. Ya les habían puesto el ojo encima desde julio pasado, advirtiéndoles que arreglaran el brete, pero parece que ahí no hubo caso.
Lo que más marea es que ya van 118 días desde que el PLN recibió el ultimátum, y no se escucha ni un pío. Ni siquiera el candidato presidencial, Álvaro Ramos, ni los big bosses del partido se han pronunciado. Algunos delegados, hartos de la situación, lanzaron un comunicado de prensa para expresar su frustración y exigir respuestas. ¡Imagínate la bronca!
Resulta que desde agosto pasado, varios delegados ya le escribieron una carta formal a Ramos, poniéndole en evidencia la falta de comunicación y el incumplimiento. Pero, sorpresa, ¡no recibieron respuesta! Entonces, como buenos campesinos aguerridos, fueron corriendo al TSE a buscar ayuda. Y el TSE, como buen juez, les dio la razón y les recordó que la renovación de las estructuras tenía que estar lista a finales de julio.
Pero el TSE, que a veces también tiene corazón, les da una oportunidad más. Les dice que sí pueden seguir presentando candidaturas y, cuando quieran, pueden pedir que revisen si la estructura está completita. Eso sí, tienen hasta julio de 2029 para arreglarlo, ¡pero que no se duerman en los laureles! Porque si no, se podrían quedar sin la deuda política y perder los adelantos, ¡y eso es pan comido para los adversarios!
Y hablando de plata, esto afecta tanto las elecciones de 2026 como las municipales de 2028. Imagínate tener que lidiar con todos esos trámites y restricciones mientras intentas conseguir votos. ¡Una verdadera torta! Además, aunque puedan presentar informes de gastos, el dinero no llega hasta que no hayan terminado de organizar las cosas por completo.
Según los vecinos de Puerto Jiménez, toda esta movida es culpa de la dirigencia nacional y de la campaña de Ramos. Dicen que ellos han estado actuando con transparencia y avisándole sobre el problema desde hace meses, pero nadie les prestó atención. Ahora toca recoger los pedazos y ver cómo salir adelante. Miguel Guillén, el secretario general del PLN, admite que todavía faltan algunos nombramientos, pero dice que están avanzando gracias al esfuerzo de la dirigencia y los delegados de cada cantón. ¡A ver si se ponen las pilas de verdad!
En fin, qué rollo. La situación en Puerto Jiménez nos deja pensando: ¿Será que la burocracia y la politiquería le están ganando la partida al desarrollo de nuestras comunidades? ¿O será que simplemente alguien se le durmió el pulso y ahora tenemos que pagar las consecuencias? ¿Ustedes qué opinan, compas? Dejen sus comentarios abajo, ¡me interesa saber su punto de vista!