¡Duro, duro! Resulta que la campaña política apenas arrancó y ya el Tribunal Supremo de Elecciones (TSE) le bajó el acelerador a nuestro querido presidente Rodrigo Chaves. Parece que ahora tendrá que irse agachando un poquito, porque las conferencias de prensa de los miércoles, esas que tanto nos gustaban para saber qué brete andaba llevando, se acabaron… ¡Por ley!
Todo esto viene por culpa del artículo 142 del Código Electoral, que básicamente le dice al Poder Ejecutivo, a las alcalidías y a todos los mandamases públicos que durante estos meses de campaña, que serán como cuatro o seis, dependiendo de si vamos a tener segunda vuelta o no, no pueden estar jactándose de sus logros ni ponerle cara a la tele hablando de obras públicas. ¡Nada de eso, güevito! Porque sino, estarían haciendo beligerancia política, y eso sí que es un problemón.
Y como bien dicen desde el TSE, no es solamente no aparecer en la tele dando discursos bonitos. Esto implica que ni siquiera pueden mandar comunicados por las redes sociales, ni publicar cosas en sus páginas web que muestren cómo están barriendo la casa. ¡Ni una! Ni siquiera un “miren qué carretera linda construimos” sirve. Imagínate la bronca, ¡hasta las municipalidades tienen que callar la boca!
Eugenia Zamora, la presidenta del TSE, recibió el relevo de la Fuerza Pública de manos del mismísimo Chaves, cortésmente. Eso demuestra que, a pesar de todo, existe coordinación entre ambos poderes del Estado, aunque ahora estén jugando reglas diferentes. Pero vaya, la jugada del TSE es clara: buscan blindar la democracia, evitar que el poder ejecutivo use el aparato estatal para favorecer a ningún candidato, ni siquiera al propio Presidente.
Lo curioso de todo esto es que el TSE se respalda en decisiones de la Corte Interamericana de Derechos Humanos. Parece que han visto casos similares en otros países, como Venezuela y Nicaragua, donde se usaron recursos públicos para hacer campaña, y no les gustó nada. Así que ahora, aunque no gasten ni un chícharo extra, cualquier publicación que pueda interpretarse como promoción gubernamental está prohibida. ¡Qué cuidado!
Ahora, algunos se preguntan: ¿esto es justo? ¿Es acaso un intento de silenciar al Presidente? Otros dirán que es lo correcto, que la equidad en la elección es primordial. Pero claro, ver a Chaves, ese mae que siempre anda ahí soltando verdades como anillo de Saturno, obligado a andar con pies de plomo... ¡eso sí que es un espectáculo!
Y es que no podemos negar que Chaves ha sabido usar las redes sociales y las conferencias de prensa para conectar directamente con la gente, sin necesidad de intermediarios. Ha sido una estrategia efectiva, pero ahora, se topa con un muro legal. Veremos si logra encontrar otras formas de seguir comunicándose con su base de apoyo, o si este silencio forzado le costará caro en las urnas. En fin, ¡tarea difícil!
Con todo esto, queda claro que la campaña electoral va a estar llena de sorpresas y restricciones. Ahora, me pregunto: ¿cree usted que esta medida del TSE es excesiva, necesaria, o simplemente un golpe bajo para el Presidente? ¡Déjeme sus opiniones en los comentarios, quiero saber qué piensa mi pura gente!
Todo esto viene por culpa del artículo 142 del Código Electoral, que básicamente le dice al Poder Ejecutivo, a las alcalidías y a todos los mandamases públicos que durante estos meses de campaña, que serán como cuatro o seis, dependiendo de si vamos a tener segunda vuelta o no, no pueden estar jactándose de sus logros ni ponerle cara a la tele hablando de obras públicas. ¡Nada de eso, güevito! Porque sino, estarían haciendo beligerancia política, y eso sí que es un problemón.
Y como bien dicen desde el TSE, no es solamente no aparecer en la tele dando discursos bonitos. Esto implica que ni siquiera pueden mandar comunicados por las redes sociales, ni publicar cosas en sus páginas web que muestren cómo están barriendo la casa. ¡Ni una! Ni siquiera un “miren qué carretera linda construimos” sirve. Imagínate la bronca, ¡hasta las municipalidades tienen que callar la boca!
Eugenia Zamora, la presidenta del TSE, recibió el relevo de la Fuerza Pública de manos del mismísimo Chaves, cortésmente. Eso demuestra que, a pesar de todo, existe coordinación entre ambos poderes del Estado, aunque ahora estén jugando reglas diferentes. Pero vaya, la jugada del TSE es clara: buscan blindar la democracia, evitar que el poder ejecutivo use el aparato estatal para favorecer a ningún candidato, ni siquiera al propio Presidente.
Lo curioso de todo esto es que el TSE se respalda en decisiones de la Corte Interamericana de Derechos Humanos. Parece que han visto casos similares en otros países, como Venezuela y Nicaragua, donde se usaron recursos públicos para hacer campaña, y no les gustó nada. Así que ahora, aunque no gasten ni un chícharo extra, cualquier publicación que pueda interpretarse como promoción gubernamental está prohibida. ¡Qué cuidado!
Ahora, algunos se preguntan: ¿esto es justo? ¿Es acaso un intento de silenciar al Presidente? Otros dirán que es lo correcto, que la equidad en la elección es primordial. Pero claro, ver a Chaves, ese mae que siempre anda ahí soltando verdades como anillo de Saturno, obligado a andar con pies de plomo... ¡eso sí que es un espectáculo!
Y es que no podemos negar que Chaves ha sabido usar las redes sociales y las conferencias de prensa para conectar directamente con la gente, sin necesidad de intermediarios. Ha sido una estrategia efectiva, pero ahora, se topa con un muro legal. Veremos si logra encontrar otras formas de seguir comunicándose con su base de apoyo, o si este silencio forzado le costará caro en las urnas. En fin, ¡tarea difícil!
Con todo esto, queda claro que la campaña electoral va a estar llena de sorpresas y restricciones. Ahora, me pregunto: ¿cree usted que esta medida del TSE es excesiva, necesaria, o simplemente un golpe bajo para el Presidente? ¡Déjeme sus opiniones en los comentarios, quiero saber qué piensa mi pura gente!
