¡Duro, bien duro! Así nos cayó la noticia de esta semana: el Seguro Obligatorio Automotor (SOA) para el marchamo 2026 va a subir. La Superintendencia General de Seguros (Sugese) le dio luz verde a la propuesta del Instituto Nacional de Seguros (INS), y eso significa que vamos a desembolsar unos colones más para poder circular legalmente con nuestro carro.
Para los que no andamos enterados, el SOA es parte del marchamo, ese tembleque anual que nos toca pagar a todos los dueños de vehículos. Este año, la prima media ponderada subió de ¢39.782 en 2025 a ¢43.819 para el próximo año. ¡Un buen pellizco!, dígale usted. Esto representa casi un 10%, y aunque no sea una fortuna, se siente en el bolsillo, especialmente con cómo anda la cosa.
Pero, ¿por qué este aumento? Según la Sugese, todo se remonta a un aumento preocupante en los accidentes de tráfico. El INS les tiró la onda con datos duros: más accidentes, más lesionados y, consecuentemente, más plata pa’ cubrir los gastos médicos y compensaciones. Parece que la prudencia en carretera se fue pa’ atrás, y ahora toca pagarlo entre todos.
Tomás Soley, el jefe de la Sugese, no se anduvo con rodeos al explicar la situación. Dijo que las primas “reflejan la realidad de una mayor siniestralidad” en nuestras carreteras. Claro que sí, don Tomás, porque estamos manejando como pilotos de carreras y olvidándonos de las normas básicas. El mae resaltó también la alarmante cifra de motociclistas involucrados en accidentes; más de la mitad de los fallecidos en 2024 eran moteros, lo que debería hacer pensar a más de uno en reforzar sus medidas de seguridad.
Y ojo, que esto del SOA no es todo el marchamo. Hay otras cosas que suman, como el impuesto a la propiedad y otros gravámenes. Entonces, todavía no sabemos cuánto nos va a doler el bolsillo finalmente, pero pinta feo. Lo bueno es que este seguro garantiza hasta ¢6 millones en atención médica en caso de accidente, aunque la Sugese ya está pensando en aumentar esa cobertura para evitar que la CCSS tenga que asumir costos extras. Eso sí, para eso, necesitamos que el gobierno se mueva, porque esto requiere de una ley nueva.
Según la Sugese, los cálculos de la prima consideran varios factores: el número de víctimas, la gravedad de los accidentes, el costo de los servicios médicos y las incapacidades. En 2024, el número de lesionados se disparó a 45.570 – ¡una locura! –, lo que representa 5.131 atenciones más que el año anterior. Además, los gastos en prestaciones aumentaron en ¢5.083 millones. Que nadie se haga ilusiones, estos números son escalofriantes.
Ahora, bien, aunque las indemnizaciones por muerte en carretera son relativamente bajas (solo 136 solicitudes en 136 casos de 505 fallecimientos el año pasado), la Sugese insiste en mejorar la cobertura del SOA. De hecho, dicen que alrededor del 10% de las atenciones médicas superan los ¢6 millones actuales, lo que pone presión sobre la Caja. Pero como decía Soley, “si no se hace algo diferente para detener esta masacre en carreteras, este fenómeno seguirá creciendo”. ¡Ya quisiera ver a alguien haciéndole caso!
Así que ahí lo tienen, compañeros: el marchamo 2026 promete ser más caro que el anterior. Con toda esta data, ¿cree usted que realmente se está haciendo suficiente para prevenir accidentes en las carreteras y proteger a los usuarios de vehículos, o simplemente estamos pagando las consecuencias de nuestra irresponsabilidad al volante? ¡Compártanos su opinión en el foro!
Para los que no andamos enterados, el SOA es parte del marchamo, ese tembleque anual que nos toca pagar a todos los dueños de vehículos. Este año, la prima media ponderada subió de ¢39.782 en 2025 a ¢43.819 para el próximo año. ¡Un buen pellizco!, dígale usted. Esto representa casi un 10%, y aunque no sea una fortuna, se siente en el bolsillo, especialmente con cómo anda la cosa.
Pero, ¿por qué este aumento? Según la Sugese, todo se remonta a un aumento preocupante en los accidentes de tráfico. El INS les tiró la onda con datos duros: más accidentes, más lesionados y, consecuentemente, más plata pa’ cubrir los gastos médicos y compensaciones. Parece que la prudencia en carretera se fue pa’ atrás, y ahora toca pagarlo entre todos.
Tomás Soley, el jefe de la Sugese, no se anduvo con rodeos al explicar la situación. Dijo que las primas “reflejan la realidad de una mayor siniestralidad” en nuestras carreteras. Claro que sí, don Tomás, porque estamos manejando como pilotos de carreras y olvidándonos de las normas básicas. El mae resaltó también la alarmante cifra de motociclistas involucrados en accidentes; más de la mitad de los fallecidos en 2024 eran moteros, lo que debería hacer pensar a más de uno en reforzar sus medidas de seguridad.
Y ojo, que esto del SOA no es todo el marchamo. Hay otras cosas que suman, como el impuesto a la propiedad y otros gravámenes. Entonces, todavía no sabemos cuánto nos va a doler el bolsillo finalmente, pero pinta feo. Lo bueno es que este seguro garantiza hasta ¢6 millones en atención médica en caso de accidente, aunque la Sugese ya está pensando en aumentar esa cobertura para evitar que la CCSS tenga que asumir costos extras. Eso sí, para eso, necesitamos que el gobierno se mueva, porque esto requiere de una ley nueva.
Según la Sugese, los cálculos de la prima consideran varios factores: el número de víctimas, la gravedad de los accidentes, el costo de los servicios médicos y las incapacidades. En 2024, el número de lesionados se disparó a 45.570 – ¡una locura! –, lo que representa 5.131 atenciones más que el año anterior. Además, los gastos en prestaciones aumentaron en ¢5.083 millones. Que nadie se haga ilusiones, estos números son escalofriantes.
Ahora, bien, aunque las indemnizaciones por muerte en carretera son relativamente bajas (solo 136 solicitudes en 136 casos de 505 fallecimientos el año pasado), la Sugese insiste en mejorar la cobertura del SOA. De hecho, dicen que alrededor del 10% de las atenciones médicas superan los ¢6 millones actuales, lo que pone presión sobre la Caja. Pero como decía Soley, “si no se hace algo diferente para detener esta masacre en carreteras, este fenómeno seguirá creciendo”. ¡Ya quisiera ver a alguien haciéndole caso!
Así que ahí lo tienen, compañeros: el marchamo 2026 promete ser más caro que el anterior. Con toda esta data, ¿cree usted que realmente se está haciendo suficiente para prevenir accidentes en las carreteras y proteger a los usuarios de vehículos, o simplemente estamos pagando las consecuencias de nuestra irresponsabilidad al volante? ¡Compártanos su opinión en el foro!
