¡Ay, mae! El ambiente está que arde, pero no precisamente por la alegría de haber ganado el Gordo Navideño. Miles de costarricenses estamos con la cara larga, digámoslo así, después de ver cómo el número 78 (y sus primos 59 y 92) no nos dieron ni un chin. La esperanza se fue volando como papalote en día de viento, pero la Junta de Protección Social (JPS) no nos ha dejado caer rendidos del todo.
Para esos que todavía tienen una chispa de fe, la JPS ya definió las fechas para los sorteos de consolación. No te digo que vas a ganar unos millones, pero un buen chunche siempre viene bien para aliviar el bolsillo, ¿verdad? Después de todo, quién no necesita unos billetes extra después de tanta espera y nerviosismo?
Y hablando de esperar… ¡qué brete se armó con estos sorteos! Cada año es lo mismo, la gente haciendo fila desde temprano, comprando sus boletos con la ilusión de cambiarle la vida. Algunos le echan mano a la estadística, otros a las supersticiones... ¡hasta hay quien consulta al babalao! Lo cierto es que la expectativa es alta y la decepción puede ser dura, pero bueno, así es la rifa, ¿qué le vamos a hacer?
Este año tenemos dos oportunidades más para tentar a la fortuna: el domingo 21 de diciembre con el Extraordinario Consolación 1, número 4881, donde repartirán ¡400 millones de colones!, y luego, el domingo 28 de diciembre con el Extraordinario Consolación 2, número 4882, con 300 millones en juego. Eso sí, recuerda chequear tus números con calma, porque a veces la emoción nos juega una mala pasada y terminamos confundiendo los dígitos.
Muchos se preguntan qué pasó con el Gordo propiamente dicho. Bueno, para refrescarles la memoria, el premio mayor quedó en manos de alguien afortunado en la Zona 6, aunque hasta ahora no se sabe mucho más sobre la identidad del ganador. ¡Imagínate el diarrea que estará sintiendo ese mae! Mientras tanto, nosotros seguimos soñando con darle un giro a nuestras vidas… o al menos comprar unas cuantas gaseosas y chicharrones para celebrar la Navidad.
Pero más allá de la lotería, este tiempo también nos invita a reflexionar sobre otras cosas. Muchos de nosotros trabajamos duro, nos esforzamos día a día, pero a veces parece que la suerte nunca está de nuestro lado. Recordaremos a nuestros seres queridos ausentes y agradeceremos por las bendiciones que sí tenemos en nuestra vida. La Romería, los Fieles Difuntos... este es un momento para conectar con nuestras raíces y valorar lo importante.
Así que ya sabes, si aún tienes la espuela clavada y quieres intentarlo una vez más, anota esas fechas y prepárate para el sorteo. ¡Quién sabe, quizás este año sí te toque el palo! Y si no, pues al menos tendremos una excusa para reunirnos con los amigos, echar unas risas y disfrutar de estas fiestas decembrinas. Que no falten los hojaldres, el rompope y el buen ambiente, ¡eso sí es lo que importa!
Después de tantas emociones, ¿crees que la JPS debería aumentar los premios de los sorteos de consolación para dar más esperanza a quienes no ganaron el Gordo? ¿O prefieres que siga siendo como está, entendiendo que la rifa es una cuestión de azar y pura suerte?
Para esos que todavía tienen una chispa de fe, la JPS ya definió las fechas para los sorteos de consolación. No te digo que vas a ganar unos millones, pero un buen chunche siempre viene bien para aliviar el bolsillo, ¿verdad? Después de todo, quién no necesita unos billetes extra después de tanta espera y nerviosismo?
Y hablando de esperar… ¡qué brete se armó con estos sorteos! Cada año es lo mismo, la gente haciendo fila desde temprano, comprando sus boletos con la ilusión de cambiarle la vida. Algunos le echan mano a la estadística, otros a las supersticiones... ¡hasta hay quien consulta al babalao! Lo cierto es que la expectativa es alta y la decepción puede ser dura, pero bueno, así es la rifa, ¿qué le vamos a hacer?
Este año tenemos dos oportunidades más para tentar a la fortuna: el domingo 21 de diciembre con el Extraordinario Consolación 1, número 4881, donde repartirán ¡400 millones de colones!, y luego, el domingo 28 de diciembre con el Extraordinario Consolación 2, número 4882, con 300 millones en juego. Eso sí, recuerda chequear tus números con calma, porque a veces la emoción nos juega una mala pasada y terminamos confundiendo los dígitos.
Muchos se preguntan qué pasó con el Gordo propiamente dicho. Bueno, para refrescarles la memoria, el premio mayor quedó en manos de alguien afortunado en la Zona 6, aunque hasta ahora no se sabe mucho más sobre la identidad del ganador. ¡Imagínate el diarrea que estará sintiendo ese mae! Mientras tanto, nosotros seguimos soñando con darle un giro a nuestras vidas… o al menos comprar unas cuantas gaseosas y chicharrones para celebrar la Navidad.
Pero más allá de la lotería, este tiempo también nos invita a reflexionar sobre otras cosas. Muchos de nosotros trabajamos duro, nos esforzamos día a día, pero a veces parece que la suerte nunca está de nuestro lado. Recordaremos a nuestros seres queridos ausentes y agradeceremos por las bendiciones que sí tenemos en nuestra vida. La Romería, los Fieles Difuntos... este es un momento para conectar con nuestras raíces y valorar lo importante.
Así que ya sabes, si aún tienes la espuela clavada y quieres intentarlo una vez más, anota esas fechas y prepárate para el sorteo. ¡Quién sabe, quizás este año sí te toque el palo! Y si no, pues al menos tendremos una excusa para reunirnos con los amigos, echar unas risas y disfrutar de estas fiestas decembrinas. Que no falten los hojaldres, el rompope y el buen ambiente, ¡eso sí es lo que importa!
Después de tantas emociones, ¿crees que la JPS debería aumentar los premios de los sorteos de consolación para dar más esperanza a quienes no ganaron el Gordo? ¿O prefieres que siga siendo como está, entendiendo que la rifa es una cuestión de azar y pura suerte?
