estoy de acuerdo que maldecir y putear no es la mejor manera, pero a veces es la técnica para desahogarse, ni más ni menos
y cuando una empresa se pega una pelada con sus clientes, por las razones que sean, al cliente lo que menos se le debe transferir es la lástima o la comprensión. en este caso, la empresa productora es la que falla ante quienes compramos las entradas. no pueden evitar que les llueva desde quejas bien pensadas, hasta improperios. y en ese caso, lo mejor que pueden hacer, es quedarse callados y trabajar en resarcir en lo posible lo que se debe. punto!
y cuando una empresa se pega una pelada con sus clientes, por las razones que sean, al cliente lo que menos se le debe transferir es la lástima o la comprensión. en este caso, la empresa productora es la que falla ante quienes compramos las entradas. no pueden evitar que les llueva desde quejas bien pensadas, hasta improperios. y en ese caso, lo mejor que pueden hacer, es quedarse callados y trabajar en resarcir en lo posible lo que se debe. punto!