¡Ay, Dios mío, qué bronca! El caso de Ligia Faerron sigue dando vuelta y vueltas, pero parece que el OIJ anda agarrándole la mano. Este martes temprano, capturaron a un hombre y a dos mujeres que, según las autoridades, tienen pinta de estar metidos hasta el cuello en su desaparición. ¡Un fajazo así no se veía hace tiempo!
Según nos comentan, el hombre, que gozaba de la confianza de Doña Ligia, se coló tranquilamente en su casa. Imagínate la sorpresa... ¡Se aprovecha de la buena gente! Luego, poof, se esfumó tanto él como Ligia, dejando a todos preocupadísimos. Lo peor es que la pobre Ligia era pura bendición, siempre ayudando a los vecinos del sector.
Y ni hablar de las dos mujeres, a quienes sospechan de querer tapar el sol con la manga, de esconder información importante. Dicen que andaban haciendo cosas raras, como si quisieran limpiarles el camino a los otros dos. Un verdadero escándalo, ¿eh? Que pena, porque esto le quita la tranquilidad a toda la comunidad. Se siente un ambiente pesado, como si estuviera cargado de malas vibras.
Ahora mismo, el OIJ está revisando pal’ que pa’ dos fincas ubicadas en la Zona Norte, precisamente en Florencia y en Ciudad Quesada. Una de ellas, la de Ciudad Quesada, está a pasitos de donde vive Ligia, ¡casi en la esquina! Esto da mucho que pensar, no creen? Parece que estaban actuando muy cerca de donde la señora vivía, eso es bien sospechoso.
Además de los oficiales, también están los perros rastreadores, esos mae que nunca fallan. Están olfateando cada rincón de esas propiedades para ver si encuentran algún indicio, alguna pista que les lleve a saber dónde está Ligia o qué pasó ahí hace unos días. Ojalá encuentren algo pronto, que la familia necesita respuestas y ligia merece justicia.
Este brete ha conmocionado a todo el país, especialmente a la comunidad del norte. Ligia era conocida por su alegría y su espíritu generoso. Siempre dispuesta a ayudar a los demás, organizaba rifas para recaudar fondos para la iglesia, llevaba comida a los ancianos… Una verdadera luz en el barrio, ahora apagada. Es una pérdida enorme para todos nosotros, una vareta dura de asumir.
Las autoridades no han querido dar muchos detalles sobre las investigaciones, pero aseguran que van con todo para esclarecer este caso. Dicen que están analizando celulares, computadoras y cualquier otra evidencia que puedan encontrar en las fincas allanadas. Esperemos que estos esfuerzos den sus frutos y podamos saber qué sucedió realmente con Ligia, aunque cueste aceptarlo.
Con estas capturas y la revisión exhaustiva de las fincas, hay esperanza de que finalmente se pueda llegar al fondo de este misterio. Pero me pregunto, ¿creen ustedes que estas personas capturadas son los únicos involucrados en la desaparición de Ligia, o habrá alguien más moviendo los hilos tras bambalinas?
Según nos comentan, el hombre, que gozaba de la confianza de Doña Ligia, se coló tranquilamente en su casa. Imagínate la sorpresa... ¡Se aprovecha de la buena gente! Luego, poof, se esfumó tanto él como Ligia, dejando a todos preocupadísimos. Lo peor es que la pobre Ligia era pura bendición, siempre ayudando a los vecinos del sector.
Y ni hablar de las dos mujeres, a quienes sospechan de querer tapar el sol con la manga, de esconder información importante. Dicen que andaban haciendo cosas raras, como si quisieran limpiarles el camino a los otros dos. Un verdadero escándalo, ¿eh? Que pena, porque esto le quita la tranquilidad a toda la comunidad. Se siente un ambiente pesado, como si estuviera cargado de malas vibras.
Ahora mismo, el OIJ está revisando pal’ que pa’ dos fincas ubicadas en la Zona Norte, precisamente en Florencia y en Ciudad Quesada. Una de ellas, la de Ciudad Quesada, está a pasitos de donde vive Ligia, ¡casi en la esquina! Esto da mucho que pensar, no creen? Parece que estaban actuando muy cerca de donde la señora vivía, eso es bien sospechoso.
Además de los oficiales, también están los perros rastreadores, esos mae que nunca fallan. Están olfateando cada rincón de esas propiedades para ver si encuentran algún indicio, alguna pista que les lleve a saber dónde está Ligia o qué pasó ahí hace unos días. Ojalá encuentren algo pronto, que la familia necesita respuestas y ligia merece justicia.
Este brete ha conmocionado a todo el país, especialmente a la comunidad del norte. Ligia era conocida por su alegría y su espíritu generoso. Siempre dispuesta a ayudar a los demás, organizaba rifas para recaudar fondos para la iglesia, llevaba comida a los ancianos… Una verdadera luz en el barrio, ahora apagada. Es una pérdida enorme para todos nosotros, una vareta dura de asumir.
Las autoridades no han querido dar muchos detalles sobre las investigaciones, pero aseguran que van con todo para esclarecer este caso. Dicen que están analizando celulares, computadoras y cualquier otra evidencia que puedan encontrar en las fincas allanadas. Esperemos que estos esfuerzos den sus frutos y podamos saber qué sucedió realmente con Ligia, aunque cueste aceptarlo.
Con estas capturas y la revisión exhaustiva de las fincas, hay esperanza de que finalmente se pueda llegar al fondo de este misterio. Pero me pregunto, ¿creen ustedes que estas personas capturadas son los únicos involucrados en la desaparición de Ligia, o habrá alguien más moviendo los hilos tras bambalinas?