Cesar dijo:Pamy dijo:
Mis modos de castigo para mi hija son, que si se pone malcriadita o hace algo indebido... chao... váyase para el cuarto y cuando haya terminado su rabieta viene y hablamos. Cuando tengo que darle una nalgada se la doy en silencio y hasta que haya dejado de chillar hablamos. Lo hago así porque siento que enojada ella y enojada yo no resolvemos nada.
Pero una nalgada (por más suave que sea) no le va a quitar el enojo a su hija... Se lo quitará a usted; y usted podrá creer que a ella también, pero lo que ella está aprendiendo es a esconder el enojo cuando usted le pega.
En cuando al confite, al menos yo no lo daría como premio por no orinarse. Eso sería enseñarle a esperar recompensa por algo que necesita aprender a controlar. Yo le recomendaría que use la técnica del premio para ayudarle a ponerse metas, a enfrentar retos... pero que el premio sea algo esporádico. El alcanzar una meta es el mejor premio, y los niños necesitan ser orientados en este sentido; caso contrario empezaría a remplazar el objetivo principal de las metas por la compensación material.
De hecho, cuando se trata de que los niños aprendan a controlar las ganas de orinar y hacer popó uno tiene que ser la persona más paciente del mundo; recordemos que los niños están tratando de aprender a controlar eso, y si uno los regaña por algo así lo único que está ganando es hacerles el proceso de aprendizaje más difícil y frustrante.
Pura vida.
No se cada uno tiene la forma de educar, si un premio (Confite), funciona, hay que seguir intentándolo, yo en mi caso con mi enano, sufría el problema de que pobrecito durmiendo ahí solo en su cama, entonces lo pasaba a mi cama, y cuando se dio el problema de quitarle los pañales, vino el problema de orinarse en la cama, por dicha preveía las desgracias, y no había tanto problema, en fin, se lo perdoné la segunda vez y hablaba con el, pero a la tercera vez fue las nalgadas, y pregúntenme si volvió a pasar… Y la verdad después de eso cada vez que el se despertaba y no había nada, yo lo felicitaba y el se ponía todo contento…
No se, esta vida tiene muchas injusticias y hay que irles poniendo límites, para que después como dice el anuncio, otros no se las impongan de peor forma, pero hay que tomar en cuenta que uno puede estar educando a un hijo de la mejor forma pero pueden haber otros desgraciados que pueden venir en muchos colores que no nos lo pueden descarriar, por eso el amor, el dialogo y si se tiene que nalguear, hay que usar de todo para que nuestros hijos sean alguien mañana…