¡Ay, Dios mío! Pues mire usted, parece que estamos dando pasitos hacia adelante en este tema de la competitividad, pero con un pie atascado en el barro. El Consejo de Promoción de la Competitividad (CPC) acaba de soltarle el nuevo informe, y ahí dice que avanzamos, sí señor, pero no tanto como debiera’mos pa’ llegar donde queremos estar en la próxima década.
La neta es que el Índice de Competitividad Nacional nos dio 56,2 puntos este año, una pequeña mejora con respecto a los 54,5 del año pasado. Suena bonito, ¿verdad?, pero vamos caminando a paso de tortuga si queremos llegar a esos 61,2 puntos que nos hemos propuesto para el 2030. Este objetivo es ambicioso, mándale saludos, y el CPC tiene una hojita de ruta llena de ideas para impulsar el desarrollo en todos lados, no solamente en San José.
Según el presidente del CPC, Carlos González, ahora tenemos un plan de acción bien definido. Dice que si le metemos gallos, el país se volverá un imán para la inversión y tendremos más oportunidades pa’ to’ el mundo. ¡Ojalá, mi pana, ojalá! Porque la verdad, a veces uno ya se desespera viendo cómo algunas cosas siguen igual de complicadas.
Este plan de acción tiene tres frentes principales: uno pa’ los temas universales –salud, educación, seguridad y agua–; otro pa’ los sectores –carreteras, telecomunicaciones, empleos y luz–; y tercero, pa’ los municipios, pa’ que se pongan las pilas y cuiden el medio ambiente. Es como armar un rompecabezas gigante, ¿caché?
Y ni hablar de las metas que se han puesto. Quieren reducir la tasa de homicidios de 16.6 a 10.1 por cada 100 mil habitantes. ¡Eso sería una bendición! También quieren bajar la mortalidad infantil y asegurar que todos los colegios tengan internet rápido. Y encima, quieren que se vaya menos la luz. Qué carga de metas, pero si se cumplen… ¡sería una chivatonada!
Pero ojo, porque no todo es color de rosa. El informe también nos avisa que seguimos teniendo problemas con la seguridad, la salud y la energía. Puntarenas sigue estancada, Guanacaste va a la baja y Belén, felicidades a ellos, es el único cantón que anda ‘a todo dar’, con más de 70 puntos. Mientras tanto, lugares como La Cruz, Coto Brus y Garabito andan arrastrándose por el fondo. ¡Qué sal!
Andrés Fernández, el economista sénior del CPC, nos recuerda que los avances tecnológicos no sirven de mucho si no mejoran la vida de la gente y las cosas van mejorando en todos los territorios. Nos dice que hay que llevar ese empuje digital a la educación, la salud y la seguridad. Es decir, que no basta con tener internet rápido si luego no podemos usarlo pa’ aprender, enfermarnos o defendernos. ¡Dígame usted!
En fin, parece que todavía le queda mucho camino por recorrer a Costa Rica pa’ alcanzar su máximo potencial. Tenemos que cerrar esas brechas territoriales y asegurarnos de que nadie se quede atrás. ¿Usted cree que realmente vamos a lograr las metas que nos hemos propuesto para el 2030, o esto se seguirá yendo al traste? ¡Déjenos sus opiniones en el foro!
La neta es que el Índice de Competitividad Nacional nos dio 56,2 puntos este año, una pequeña mejora con respecto a los 54,5 del año pasado. Suena bonito, ¿verdad?, pero vamos caminando a paso de tortuga si queremos llegar a esos 61,2 puntos que nos hemos propuesto para el 2030. Este objetivo es ambicioso, mándale saludos, y el CPC tiene una hojita de ruta llena de ideas para impulsar el desarrollo en todos lados, no solamente en San José.
Según el presidente del CPC, Carlos González, ahora tenemos un plan de acción bien definido. Dice que si le metemos gallos, el país se volverá un imán para la inversión y tendremos más oportunidades pa’ to’ el mundo. ¡Ojalá, mi pana, ojalá! Porque la verdad, a veces uno ya se desespera viendo cómo algunas cosas siguen igual de complicadas.
Este plan de acción tiene tres frentes principales: uno pa’ los temas universales –salud, educación, seguridad y agua–; otro pa’ los sectores –carreteras, telecomunicaciones, empleos y luz–; y tercero, pa’ los municipios, pa’ que se pongan las pilas y cuiden el medio ambiente. Es como armar un rompecabezas gigante, ¿caché?
Y ni hablar de las metas que se han puesto. Quieren reducir la tasa de homicidios de 16.6 a 10.1 por cada 100 mil habitantes. ¡Eso sería una bendición! También quieren bajar la mortalidad infantil y asegurar que todos los colegios tengan internet rápido. Y encima, quieren que se vaya menos la luz. Qué carga de metas, pero si se cumplen… ¡sería una chivatonada!
Pero ojo, porque no todo es color de rosa. El informe también nos avisa que seguimos teniendo problemas con la seguridad, la salud y la energía. Puntarenas sigue estancada, Guanacaste va a la baja y Belén, felicidades a ellos, es el único cantón que anda ‘a todo dar’, con más de 70 puntos. Mientras tanto, lugares como La Cruz, Coto Brus y Garabito andan arrastrándose por el fondo. ¡Qué sal!
Andrés Fernández, el economista sénior del CPC, nos recuerda que los avances tecnológicos no sirven de mucho si no mejoran la vida de la gente y las cosas van mejorando en todos los territorios. Nos dice que hay que llevar ese empuje digital a la educación, la salud y la seguridad. Es decir, que no basta con tener internet rápido si luego no podemos usarlo pa’ aprender, enfermarnos o defendernos. ¡Dígame usted!
En fin, parece que todavía le queda mucho camino por recorrer a Costa Rica pa’ alcanzar su máximo potencial. Tenemos que cerrar esas brechas territoriales y asegurarnos de que nadie se quede atrás. ¿Usted cree que realmente vamos a lograr las metas que nos hemos propuesto para el 2030, o esto se seguirá yendo al traste? ¡Déjenos sus opiniones en el foro!