Como cambian los tiempos lo que ayer era una verdad absoluta hoy es una verdad a medias que permite al hombre hacer sus propias deducciones del Genesis-me imagino que fue una medida inteligente por los pensadores catolicos ante tanta cosa absurda en la biblia- ahora se dice que fue hecho en un lenguaje literario poetico y figurado- vaya manera de desacreditar el Genesis y lo mas triste es la version de los ultimos años que ante la impotencia de poder explicar los cambios de la tierra en millones de años ahora dicen que los dias que se dice en la biblia no tienen que ser dias de 24 horas y que el universo fue creado en etapas -Pregunto donde dice eso en la biblia-entonces ahora se debe decir que Dios creo el universo en siete etapas-lease donde dice primer dia -primera etapa -segunda etapa y asi sucesivamente-y en adelante debe leerse " Asi termino Dios la creacion del cielo y la Tierra y de todo cuanto existe-Y en la setima etapa descanso Dios bendijo esa etapa y la aparto para que lo adoraran-ahora estamos en problemas cuanto dura la setima etapa para adorar a Dios--
El caso es que la palabra hebrea que se traduce “día” puede designar espacios de tiempo de diversa duración, no solo de veinticuatro horas. Por ejemplo, al resumir la obra creativa de Dios, Moisés englobó los seis días de la creación en uno solo (Génesis 2:4). Por otra parte, el primer “día” creativo, “Dios empezó a llamar a la luz Día, pero a la oscuridad llamó Noche” (Génesis 1:5). Aquí, el término “día” se aplica a una fracción del período de veinticuatro horas. Queda claro, pues, que la hipótesis de que cada día creativo duró veinticuatro horas es arbitraria y carece de fundamento bíblico.
Entonces, ¿cuánto duraron los días creativos? Aunque la Biblia no lo especifica, la redacción de los capítulos 1 y 2 de Génesis indica que se trató de extensos períodos de tiempo.
Seis períodos creativos
Moisés escribió su relato en hebreo, y lo hizo desde la perspectiva de un observador terrestre. Estos dos factores, aunados al hecho de que el universo ya existía antes de que empezaran los días, o períodos creativos, ayudan a difuminar en gran parte la polémica en torno al relato de la creación. ¿De qué manera?
Un examen atento del relato bíblico deja ver que algunos sucesos que se iniciaron en un “día” concreto se extendieron a uno o más de los siguientes “días”. Así, por ejemplo, antes de que comenzara el primer “día” creativo, ya existía el Sol; pero había algo, posiblemente nubes densas, que impedía que su luz alcanzara la superficie terrestre (Job 38:9). En el transcurso del primer “día” empezó a disiparse dicha barrera, permitiendo el paso de la luz difusa a través de la atmósfera.
El segundo “día”, la atmósfera evidentemente siguió despejándose, creando un espacio entre las densas nubes arriba y el océano abajo. El cuarto “día”, la atmósfera se aclaró tanto que el Sol y la Luna se hicieron visibles “en la expansión de los cielos” (Génesis 1:14-16). En otras palabras, desde la perspectiva de un observador en la Tierra, empezaron a divisarse el Sol y la Luna. Estos acontecimientos se produjeron de forma paulatina.
El relato de Génesis también dice que en el quinto “día”, según iba aclarándose la atmósfera, fueron apareciendo las aves y, al parecer, los insectos voladores y otras criaturas con alas membranosas.
La narración bíblica deja abierta la posibilidad de que algunos de los principales sucesos de cada “día”, o período creativo, ocurrieran de un modo gradual y no instantáneo y de que incluso se prolongaran hasta los siguientes “días”.
Según su género
¿Significa la aparición progresiva de las plantas y los animales que Dios se sirvió de la evolución para producir la enorme diversidad de seres vivos? No. El relato dice claramente que Dios creó todos los “géneros” básicos de plantas y animales (Génesis 1:11, 12, 20-25). ¿Se dotó a estos “géneros” con la capacidad de adaptarse a los cambios del medio? ¿Qué define los límites de un “género”? La Biblia no lo dice. Pero sí nos dice que las criaturas vivas “enjambraron según sus géneros” (Génesis 1:21). Esta afirmación da a entender que las posibilidades de variación dentro de un “género” tienen un límite. Tanto el registro fósil como las investigaciones recientes confirman que las categorías fundamentales de plantas y animales han experimentado pocos cambios a lo largo del tiempo.
Contrario al pensamiento de algunos fundamentalistas, Génesis no enseña que el universo —incluidos la Tierra y todos los seres vivos que la pueblan— fue creado en un breve espacio de tiempo en un pasado no muy lejano. Al contrario, diversos aspectos de la descripción que allí se da sobre la creación del universo y la aparición de la vida en el planeta armonizan con los últimos descubrimientos científicos.
Debido a sus creencias filosóficas, numerosos hombres de ciencia rechazan la afirmación bíblica de que Dios creó todas las cosas. Resulta interesante, sin embargo, que Moisés escribió en el antiguo libro de Génesis que el universo tuvo principio y que la vida apareció por etapas, progresivamente, durante un largo lapso de tiempo. ¿De dónde obtuvo Moisés hace tres mil quinientos años información tan exacta desde el punto de vista científico? Existe una explicación lógica. Aquel que poseía el poder y la sabiduría necesarios para crear los cielos y la Tierra le transmitió estos conocimientos tan avanzados. Ello añade peso a la aseveración que hace la propia Biblia de ser “inspirada de Dios” (2 Timoteo 3:16).