¡Aguante! Ya salió la primera encuesta seria pa' las elecciones del 2026, cortesía del CIEP de la UCR. Y vaya que nos dieron un buen empujoncito pa' empezar a pensar qué estará pasando dentro de cuatro años. Ni lento ni perezoso, el centro académico soltó los números este miércoles, y aparentemente todavía estamos en la etapa de 'todo vale'. No hay un candidato que domine la escena, así que prepárense porque esto promete estar bueno.
Lo primero que hay que cachar es que la mayoría de nosotros todavía está con el dedo en el aire, pensando si siquiera va a ir a votar. Un 55% de los encuestados dice que todavía no sabe a quién darle su apoyo. ¡Una barbaridad! Eso significa que cualquier cosita, cualquier movida en la campaña, puede cambiarle el color al panorama. Porque díganlo ustedes, con tanto problema que tenemos, no es fácil decidir a quién confiarle el país.
Pero bueno, entre aquellos que sí tienen decidido, la jefa parece ser Laura Fernández, la exministra. Con un 25% de intención de voto, le lleva varios puntos a sus competidores más cercanos. Claramente, la señora está trabajando duro y acumulando apoyos. Hay que darle crédito, porque multiplicando apoyos está, y eso no es poca cosa considerando el panorama político que arrastramos. Algunos dicen que tiene el respaldo del oficialismo bien agarradito, y hasta ahí le quepamos.
Después viene Álvaro Ramos de PLN con un 7%, intentando mantener viva la llama tricolor. Luego están Claudia Dobles (PAC) y Ariel Robles (Frente Amplio), los dos empatados en un magrito del 3%. Digamos que esos dos andan buscando dónde quedaron perdidos en el mapa político. ¡Qué pena! Parece que les falta darle un poquito más de brío a sus campañas, porque con esos números no lleguen a ningún lado.
Y hablando de candidatos con poco apoyo... prácticamente todos los demás se encuentran por debajo del margen de error, que recordemos, es de 2.7 puntos. Esto quiere decir que sus votos podrían desaparecer tan rápido como apareció una lapa en medio de la carretera. No sé yo, pero creo que algunos deberían considerar seriamente buscar otro brete, porque en esto de la política cuesta escalar.
Ahora, la gran incógnita es: ¿dónde se esconden esos indecisos? Pues resulta que la mayoría son mujeres jóvenes, entre 18 y 34 años, que viven principalmente en Limón. También hay un buen puñado en Alajuela, Cartago y Guanacaste. Son gente que, aparentemente, está harta de lo mismo, que busca algo nuevo, algo diferente. Voten por un cambio, dicen, pero todavía no saben exactamente qué tipo de cambio quieren.
Es importante recalcar que Laura Fernández, aunque lidera la carrera, todavía está muy lejos del 40% de intención de voto necesario para ganar en primera vuelta. Así que la jugosa segunda vuelta sigue siendo una posibilidad real. Y con tantos indecisos sueltos por ahí, cualquiera podría sorprender. La encuesta se realizó con 1.333 entrevistas telefónicas entre el 6 y el 15 de octubre, así que los números son bastante representativos de lo que está pasando en el país. Además, el margen de error de 2.7 puntos nos da una idea clara de la incertidumbre que reina en la opinión pública.
Con todo esto, queda claro que las próximas elecciones estarán reñidas y llenas de sorpresas. La partida apenas comienza, y todavía hay mucho por jugar. ¿Será que estos indecisos terminarán inclinando la balanza hacia un candidato inesperado o continuará la tendencia actual? ¿Creen que Laura Fernández logrará consolidar su liderazgo o algún otro candidato surgirá como la sorpresa de la contienda?
Lo primero que hay que cachar es que la mayoría de nosotros todavía está con el dedo en el aire, pensando si siquiera va a ir a votar. Un 55% de los encuestados dice que todavía no sabe a quién darle su apoyo. ¡Una barbaridad! Eso significa que cualquier cosita, cualquier movida en la campaña, puede cambiarle el color al panorama. Porque díganlo ustedes, con tanto problema que tenemos, no es fácil decidir a quién confiarle el país.
Pero bueno, entre aquellos que sí tienen decidido, la jefa parece ser Laura Fernández, la exministra. Con un 25% de intención de voto, le lleva varios puntos a sus competidores más cercanos. Claramente, la señora está trabajando duro y acumulando apoyos. Hay que darle crédito, porque multiplicando apoyos está, y eso no es poca cosa considerando el panorama político que arrastramos. Algunos dicen que tiene el respaldo del oficialismo bien agarradito, y hasta ahí le quepamos.
Después viene Álvaro Ramos de PLN con un 7%, intentando mantener viva la llama tricolor. Luego están Claudia Dobles (PAC) y Ariel Robles (Frente Amplio), los dos empatados en un magrito del 3%. Digamos que esos dos andan buscando dónde quedaron perdidos en el mapa político. ¡Qué pena! Parece que les falta darle un poquito más de brío a sus campañas, porque con esos números no lleguen a ningún lado.
Y hablando de candidatos con poco apoyo... prácticamente todos los demás se encuentran por debajo del margen de error, que recordemos, es de 2.7 puntos. Esto quiere decir que sus votos podrían desaparecer tan rápido como apareció una lapa en medio de la carretera. No sé yo, pero creo que algunos deberían considerar seriamente buscar otro brete, porque en esto de la política cuesta escalar.
Ahora, la gran incógnita es: ¿dónde se esconden esos indecisos? Pues resulta que la mayoría son mujeres jóvenes, entre 18 y 34 años, que viven principalmente en Limón. También hay un buen puñado en Alajuela, Cartago y Guanacaste. Son gente que, aparentemente, está harta de lo mismo, que busca algo nuevo, algo diferente. Voten por un cambio, dicen, pero todavía no saben exactamente qué tipo de cambio quieren.
Es importante recalcar que Laura Fernández, aunque lidera la carrera, todavía está muy lejos del 40% de intención de voto necesario para ganar en primera vuelta. Así que la jugosa segunda vuelta sigue siendo una posibilidad real. Y con tantos indecisos sueltos por ahí, cualquiera podría sorprender. La encuesta se realizó con 1.333 entrevistas telefónicas entre el 6 y el 15 de octubre, así que los números son bastante representativos de lo que está pasando en el país. Además, el margen de error de 2.7 puntos nos da una idea clara de la incertidumbre que reina en la opinión pública.
Con todo esto, queda claro que las próximas elecciones estarán reñidas y llenas de sorpresas. La partida apenas comienza, y todavía hay mucho por jugar. ¿Será que estos indecisos terminarán inclinando la balanza hacia un candidato inesperado o continuará la tendencia actual? ¿Creen que Laura Fernández logrará consolidar su liderazgo o algún otro candidato surgirá como la sorpresa de la contienda?