¡Aguanta, pura vida! Aquí les va la nota caliente: el Presidente Chaves, en medio de un rollo tremendo con la oposición, le aseguró al país que sí, que entregará el poder en 2026. Lo dijo así, bien claro, en una conferencia de prensa donde la cosa estuvo tensa desde temprano.
Como saben, últimamente ha habido bastante polémica sobre si el Presidente piensa apecharse al cargo. Con tanta acusación de querer hacerse el rey, la gente empezó a preguntarse qué pasaría si las cosas no le salen bien en las próximas elecciones. Pero él, pa' calmar las aguas, salió con toda y con una promesa que dejó a más de uno boquiabierto.
La pregunta llegó directo al grano: ¿Se iría tranquilamente del palco si pierde? La respuesta fue rápida y contundente: “Entregaré el poder a quien el pueblo de Costa Rica elija.” Y pa’ echarle salsa, agregó un juramento que hizo eco en todo el lugar: “Y se lo juro por mi santa madre que está en el cielo.” ¡Imagínate el ambiente! Parecía sacado de novela.
Pero eso no fue todo, pues luego soltó unas pullas bien fuertes hacia sus detractores, especialmente a Rodrigo Arias y al ex Presidente Oscar Arias. Según él, estos señores andan diciendo que lo quieren tumbar porque no les gusta que diga las cosas claras, sin rodeos ni chancletas. "Yo soy mucho más democrático que esos que defienden sus intereses, miren bien", sentenció, dejando caer que la oposición está más preocupada por sus propios asuntos que por el bienestar del país. ¡Un verdadero churro!
Y hablando de churros, la polémica no se queda ahí. Algunos analistas políticos aseguran que este discurso agresivo es parte de una estrategia para distraer la atención de otros temas que le complican al gobierno. Otros, en cambio, creen que simplemente Chaves no puede evitar meterse en rollos innecesarios. En fin, un debate encendido que seguramente seguirá dando tela de juicio por unos días más.
Recordemos que la tradición costarricense siempre ha sido respetar los resultados electorales y garantizar una transición de poder pacífica. Desde tiempos inmemoriales, hemos demostrado al mundo que podemos cambiar de gobierno sin necesidad de peleas ni controversias. Eso es lo que nos hace orgullosos de ser ticos, ¡una muestra de madurez democrática envidiable!
Sin embargo, esta vez la cosa pinta diferente. La polarización política ha alcanzado niveles alarmantes, y muchos temen que la tensión pueda escalar si las elecciones de 2026 no son limpias y transparentes. El nerviosismo es palpable, y la incertidumbre pesa sobre todos nosotros. Vaya, ¡qué brete nos cayó encima!
Ahora, díganme, compañeros del Foro: ¿creen realmente que el Presidente cumplirá su promesa de entregar el poder en 2026, o esto es solo una cortina de humo para ganar tiempo y mantener el control? ¿Consideran que sus ataques a la oposición son justificables, o solo sirven para avivar aún más la llama de la discordia?
Como saben, últimamente ha habido bastante polémica sobre si el Presidente piensa apecharse al cargo. Con tanta acusación de querer hacerse el rey, la gente empezó a preguntarse qué pasaría si las cosas no le salen bien en las próximas elecciones. Pero él, pa' calmar las aguas, salió con toda y con una promesa que dejó a más de uno boquiabierto.
La pregunta llegó directo al grano: ¿Se iría tranquilamente del palco si pierde? La respuesta fue rápida y contundente: “Entregaré el poder a quien el pueblo de Costa Rica elija.” Y pa’ echarle salsa, agregó un juramento que hizo eco en todo el lugar: “Y se lo juro por mi santa madre que está en el cielo.” ¡Imagínate el ambiente! Parecía sacado de novela.
Pero eso no fue todo, pues luego soltó unas pullas bien fuertes hacia sus detractores, especialmente a Rodrigo Arias y al ex Presidente Oscar Arias. Según él, estos señores andan diciendo que lo quieren tumbar porque no les gusta que diga las cosas claras, sin rodeos ni chancletas. "Yo soy mucho más democrático que esos que defienden sus intereses, miren bien", sentenció, dejando caer que la oposición está más preocupada por sus propios asuntos que por el bienestar del país. ¡Un verdadero churro!
Y hablando de churros, la polémica no se queda ahí. Algunos analistas políticos aseguran que este discurso agresivo es parte de una estrategia para distraer la atención de otros temas que le complican al gobierno. Otros, en cambio, creen que simplemente Chaves no puede evitar meterse en rollos innecesarios. En fin, un debate encendido que seguramente seguirá dando tela de juicio por unos días más.
Recordemos que la tradición costarricense siempre ha sido respetar los resultados electorales y garantizar una transición de poder pacífica. Desde tiempos inmemoriales, hemos demostrado al mundo que podemos cambiar de gobierno sin necesidad de peleas ni controversias. Eso es lo que nos hace orgullosos de ser ticos, ¡una muestra de madurez democrática envidiable!
Sin embargo, esta vez la cosa pinta diferente. La polarización política ha alcanzado niveles alarmantes, y muchos temen que la tensión pueda escalar si las elecciones de 2026 no son limpias y transparentes. El nerviosismo es palpable, y la incertidumbre pesa sobre todos nosotros. Vaya, ¡qué brete nos cayó encima!
Ahora, díganme, compañeros del Foro: ¿creen realmente que el Presidente cumplirá su promesa de entregar el poder en 2026, o esto es solo una cortina de humo para ganar tiempo y mantener el control? ¿Consideran que sus ataques a la oposición son justificables, o solo sirven para avivar aún más la llama de la discordia?
