¡Ay, Dios mío! Aquí vamos otra vez con los mismos problemas viejos, pero ahora con nuevos envoltorios. Resulta que la fracción Juntos, ahí bien juntitos con la alcaldía, anda proponiendo darle estantes a los vendedores ambulantes de San José. Sí, leyó bien, ¡estantes! Como si eso fuera a solucionar la torta que tenemos en nuestras calles.
La idea, según dicen, es modernizar el centro y apoyar a los que necesitan trabajar. Un diagnóstico directo, como ellos le llaman, dice que necesitamos ordenar el espacio público. ¡Claro que sí! Pero ¿ordenarlo a costa de los negocios formales que han luchado tanto por tener sus patentes al día? Eso huele a despiche, diay.
No nos malinterpreten, nadie quiere ver a nuestros vecinos pasando apuros. Muchos de estos vendedores son adultos mayores, mamás solteras, gente con discapacidad… gente que realmente necesita este brete para poder salir adelante. Pero legalizarles la venta, dándoles estantes gratis, parece que le están dando una cachetada a todos los comerciantes que cumplen las reglas. ¡Y esos son muchos, mae!
El proyecto incluye hasta diseños de estantes. ¡Imagínese la escena! Todos los vendedores con la misma baraja de colores y estilos. Le quitan toda la onda, toda la personalidad a cada puesto. Antes había variedad, colorido, diferentes tipos de artesanías... Ahora todo será igualito. ¿Será que quieren convertir San José en un shopping center gigante?
Pero espera, hay más. Parece que los regidores de Más San José, encabezados por Don Juan Diego, ven peligro en esta movida. Temen que esto abra la puerta a más corrupción, a dar cosas a cambalache sin control. Y tienen razón, pues la moción habla de “mobiliario y herramientas” sin especificar cómo se van a controlar. ¡Una oportunidad perfecta para que alguien se haga unos mangazos con el erario público!
Rafael González, el regidor independiente, tampoco se quedó callado. Él dice que lo correcto sería crear empleos decentes para que la gente no tenga que recurrir al comercio informal. Tiene toda la lógica del mundo. En lugar de parchear el problema, atacaríamos la raíz. Ofrecer oportunidades reales, capacitar a la gente… eso sí sería una solución a largo plazo. No regalándole chinches, sino ayudándola a echar pa’lante.
La verdad, este asunto me da que pensar. Por un lado entiendo la necesidad de ayudar a los vendedores informales, pero por otro lado, siento que estamos generando más problemas de los que resolvemos. Parece que siempre buscamos soluciones fáciles que terminan siendo más complicadas todavía. Este cambio de mando 2025 se promete lleno de sorpresas, y esta es una de ellas.
En fin, el Concejo Municipal tendrá que decidir qué hacer con esta moción. ¿Le darán luz verde a los estantes o escucharán las voces de los comerciantes formales y buscarán soluciones más integrales? ¿Ustedes, qué opinan? ¿Creen que darle estantes a los vendedores ambulantes es una medida efectiva o simplemente un paliativo que agrava el problema?
La idea, según dicen, es modernizar el centro y apoyar a los que necesitan trabajar. Un diagnóstico directo, como ellos le llaman, dice que necesitamos ordenar el espacio público. ¡Claro que sí! Pero ¿ordenarlo a costa de los negocios formales que han luchado tanto por tener sus patentes al día? Eso huele a despiche, diay.
No nos malinterpreten, nadie quiere ver a nuestros vecinos pasando apuros. Muchos de estos vendedores son adultos mayores, mamás solteras, gente con discapacidad… gente que realmente necesita este brete para poder salir adelante. Pero legalizarles la venta, dándoles estantes gratis, parece que le están dando una cachetada a todos los comerciantes que cumplen las reglas. ¡Y esos son muchos, mae!
El proyecto incluye hasta diseños de estantes. ¡Imagínese la escena! Todos los vendedores con la misma baraja de colores y estilos. Le quitan toda la onda, toda la personalidad a cada puesto. Antes había variedad, colorido, diferentes tipos de artesanías... Ahora todo será igualito. ¿Será que quieren convertir San José en un shopping center gigante?
Pero espera, hay más. Parece que los regidores de Más San José, encabezados por Don Juan Diego, ven peligro en esta movida. Temen que esto abra la puerta a más corrupción, a dar cosas a cambalache sin control. Y tienen razón, pues la moción habla de “mobiliario y herramientas” sin especificar cómo se van a controlar. ¡Una oportunidad perfecta para que alguien se haga unos mangazos con el erario público!
Rafael González, el regidor independiente, tampoco se quedó callado. Él dice que lo correcto sería crear empleos decentes para que la gente no tenga que recurrir al comercio informal. Tiene toda la lógica del mundo. En lugar de parchear el problema, atacaríamos la raíz. Ofrecer oportunidades reales, capacitar a la gente… eso sí sería una solución a largo plazo. No regalándole chinches, sino ayudándola a echar pa’lante.
La verdad, este asunto me da que pensar. Por un lado entiendo la necesidad de ayudar a los vendedores informales, pero por otro lado, siento que estamos generando más problemas de los que resolvemos. Parece que siempre buscamos soluciones fáciles que terminan siendo más complicadas todavía. Este cambio de mando 2025 se promete lleno de sorpresas, y esta es una de ellas.
En fin, el Concejo Municipal tendrá que decidir qué hacer con esta moción. ¿Le darán luz verde a los estantes o escucharán las voces de los comerciantes formales y buscarán soluciones más integrales? ¿Ustedes, qué opinan? ¿Creen que darle estantes a los vendedores ambulantes es una medida efectiva o simplemente un paliativo que agrava el problema?