Uy, qué caldo de gato se armó, amigos del Foro. Laura Fernández, la aspirante a presidenta, mandó allar al PLN con un par de posteos en redes sociales que han levantado polvareda. Al parecer, aprovechando el Día de la Abolición del Ejército, soltó un mensajito que más bien fue un ataque directo a sus adversarios políticos, sembrando la incertidumbre y generando un debate nacional que nadie esperaba.
Para refrescarle la memoria a los más jóvenes, el 1 de diciembre celebramos la abolición del ejército, un acto histórico encabezado por Don Pepe Figueres, el Verdiblanco, que nos puso en el mapa mundial como el primer país sin fuerzas militares. Un símbolo de paz y desarme, ¿eh? Pero resulta que Fernández usó esa fecha para lanzar una bomba contra el PLN, quien ahora mismo, según las encuestas, es su mayor rival de cara a las próximas elecciones del 2026. ¡Un gallo bueno!
Primero, lanzó un posteo en sus historias de Facebook e Instagram donde decía textualmente: "Vamos a abolir lo que hizo falta: ¡EL PLN!”. Ese mensaje, que duró poco en internet porque se borró rapidísimo, capturó la atención de todos y generó un revuelo tremendo. Luego, su gente de campaña subió otra imagen, esta vez con un mensaje más agresivo: "Ahora toca abolir el ejército de corruptos del PLN." ¿Será que quiere jugar sucio desde ahorita?
Y ojo, que ni ella ni Álvaro Ramos, el candidato del PLN, logran alcanzar ese 40% de apoyo que necesita alguien para ganar en primera vuelta. Esto significa que hay mucha agua bajo el puente y que la carrera está lejos de definirse. Algunos analistas señalan que estos ataques son desesperados, buscando llamar la atención y agitar la opinión pública. Otros creen que es simplemente estrategia política, tratando de pintar al PLN como algo negativo y peligroso.
Lo curioso de todo esto es que el equipo de comunicación de Fernández no ha querido dar la cara por ahora. Le preguntamos por qué publicaron esos mensajes, cuál era la intención detrás de ellos y por qué eliminaron el primero, pero no hemos recibido ninguna respuesta. Parece que prefieren mantener silencio y dejar que el escándalo siga creciendo a su propio ritmo. ¡Qué misterio!
Por supuesto, la reacción del PLN no se hizo esperar. César Rodríguez, jefe de campaña de Ramos, salió al frente con toda la artillería pesada, acusando a Fernández de querer importar el “chavismo” a Costa Rica y destruir los valores fundamentales de nuestra sociedad. Además, recordó viejas rencillas, mencionando los problemas con los medios de comunicación y alertando sobre posibles ataques a la libertad de prensa, a la Caja Costarricense de Seguro Social y al Tribunal Electoral. ¡Esto ya pinta para batalla campal!
Miguel Guillén, secretario general del PLN, también se pronunció, llamando a los costarricenses a defender la decencia, el respeto y la construcción de un futuro común. Dijo que no van a permitir que se siembre la sombra de una dictadura en nuestro país y que, en cambio, elegirán el camino de la nobleza y el diálogo constructivo. Añadió que el insulto y la vulgaridad no deberían tener cabida en la política costarricense. “Que nunca más el insulto, la ofensa o la vulgaridad sean la norma en la voz de un presidente de la República ni de una candidata presidencial”, recalcó.
En fin, este episodio deja claro que la contienda electoral va a estar cargada de emociones y controversias. ¿Será este el comienzo de una campaña llena de ataques personales y descalificaciones mutuas? ¿Estamos viendo el inicio de una polarización política peligrosa en Costa Rica? ¿Ustedes creen que Laura Fernández se arrepiente de haber soltado esas frases o que seguirá insistiendo en este tipo de estrategias agresivas? ¡Compartan sus opiniones y veamos qué piensa el Foro de este embate político!
Para refrescarle la memoria a los más jóvenes, el 1 de diciembre celebramos la abolición del ejército, un acto histórico encabezado por Don Pepe Figueres, el Verdiblanco, que nos puso en el mapa mundial como el primer país sin fuerzas militares. Un símbolo de paz y desarme, ¿eh? Pero resulta que Fernández usó esa fecha para lanzar una bomba contra el PLN, quien ahora mismo, según las encuestas, es su mayor rival de cara a las próximas elecciones del 2026. ¡Un gallo bueno!
Primero, lanzó un posteo en sus historias de Facebook e Instagram donde decía textualmente: "Vamos a abolir lo que hizo falta: ¡EL PLN!”. Ese mensaje, que duró poco en internet porque se borró rapidísimo, capturó la atención de todos y generó un revuelo tremendo. Luego, su gente de campaña subió otra imagen, esta vez con un mensaje más agresivo: "Ahora toca abolir el ejército de corruptos del PLN." ¿Será que quiere jugar sucio desde ahorita?
Y ojo, que ni ella ni Álvaro Ramos, el candidato del PLN, logran alcanzar ese 40% de apoyo que necesita alguien para ganar en primera vuelta. Esto significa que hay mucha agua bajo el puente y que la carrera está lejos de definirse. Algunos analistas señalan que estos ataques son desesperados, buscando llamar la atención y agitar la opinión pública. Otros creen que es simplemente estrategia política, tratando de pintar al PLN como algo negativo y peligroso.
Lo curioso de todo esto es que el equipo de comunicación de Fernández no ha querido dar la cara por ahora. Le preguntamos por qué publicaron esos mensajes, cuál era la intención detrás de ellos y por qué eliminaron el primero, pero no hemos recibido ninguna respuesta. Parece que prefieren mantener silencio y dejar que el escándalo siga creciendo a su propio ritmo. ¡Qué misterio!
Por supuesto, la reacción del PLN no se hizo esperar. César Rodríguez, jefe de campaña de Ramos, salió al frente con toda la artillería pesada, acusando a Fernández de querer importar el “chavismo” a Costa Rica y destruir los valores fundamentales de nuestra sociedad. Además, recordó viejas rencillas, mencionando los problemas con los medios de comunicación y alertando sobre posibles ataques a la libertad de prensa, a la Caja Costarricense de Seguro Social y al Tribunal Electoral. ¡Esto ya pinta para batalla campal!
Miguel Guillén, secretario general del PLN, también se pronunció, llamando a los costarricenses a defender la decencia, el respeto y la construcción de un futuro común. Dijo que no van a permitir que se siembre la sombra de una dictadura en nuestro país y que, en cambio, elegirán el camino de la nobleza y el diálogo constructivo. Añadió que el insulto y la vulgaridad no deberían tener cabida en la política costarricense. “Que nunca más el insulto, la ofensa o la vulgaridad sean la norma en la voz de un presidente de la República ni de una candidata presidencial”, recalcó.
En fin, este episodio deja claro que la contienda electoral va a estar cargada de emociones y controversias. ¿Será este el comienzo de una campaña llena de ataques personales y descalificaciones mutuas? ¿Estamos viendo el inicio de una polarización política peligrosa en Costa Rica? ¿Ustedes creen que Laura Fernández se arrepiente de haber soltado esas frases o que seguirá insistiendo en este tipo de estrategias agresivas? ¡Compartan sus opiniones y veamos qué piensa el Foro de este embate político!
