¡Ay, Dios mío, qué historia nos cayó encima! Resulta que Anita la Cubana, esa influencer que anda moviéndose por to' Latinoamérica, llegó a Costa Rica y quedó bocabajada con nuestras ferias. Uno diría que se encontró con el paraíso de la comida, y vaya que sí lo contó en sus redes.
Como muchos saben, la situación en Cuba no ha sido precisamente fácil económicamente, y eso se nota en la disponibilidad de alimentos. Anita, en un video que ya lleva más reacciones de las que uno puede imaginar –más de 100 mil, pa' que se hagan una idea–, explica cómo el choque cultural fue brutal para ella. Llegar a una feria costarricense y verse rodeada de frutas, verduras, carnes… ¡dijo que era como si estuviera soñando!
"Salí de Cuba hace dos días y la verdad es que el choque con la realidad fue demasiado duro," dice Anita en el video, mientras camina entre puestos rebosantes de productos frescos. “Llegar a un mercado y ver que hay tantas cosas que en tu país ni siquiera las puedes ver. No les puedo explicar lo que se siente venir a un mercado y ver tanta variedad.” Ya uno se emociona escuchándola, ¡imagínate estar ahí!
Lo que realmente impactó a la influencer fue la facilidad con la que los costarricenses podemos acceder a estos alimentos básicos. Y no solo eso, sino también la posibilidad de comprar lo necesario para toda la semana. Eso, para ella, representa una verdadera revolución. Reconoció que "no entendía por qué mi país, Cuba, pasa por tantas cosas, cuando en muchas partes del mundo las personas tienen derecho a comprar lo básico que necesitan para vivir y en Cuba no lo hay.">
Anita también admitió que se sentía “como una niña chiquita”, incapaz de expresar con palabras la magnitud de lo que estaba presenciando. Hablando de cosas específicas, resaltó la presencia de fresas, algo que, según cuenta, no es tan común en Cuba. Ya uno se da cuenta de la diferencia abismal entre ambas realidades. ¡Qué carga, pensar en la gente que lucha por conseguir un plato de comida digna!
Y claro, la ola de comentarios no se hizo esperar. Usuarios de diferentes países expresaron su admiración por la experiencia de Anita y aprovecharon para preguntar sobre la vida en Costa Rica. Hubo hasta quien preguntó si acá tenemos dictadura, ¡qué pura vida! Otros comentaban desde Ecuador, ofreciendo información sobre la abundancia y precios bajos de sus mercados. Uno se llena de orgullo de ver cómo nuestro país es percibido como un oasis de estabilidad y oportunidades.
Más adelante en el video, Anita se muestra disfrutando de un pedazo de caña de azúcar, un detalle sencillo pero significativo de su inmersión en la cultura costarricense. Se nota que esta visita le ha abierto los ojos y le ha brindado una perspectiva diferente sobre la importancia de tener acceso a alimentos básicos. Después de todo, es algo fundamental para vivir una vida plena y saludable. ¡Qué tuanis que haya compartido su experiencia!
Ahora bien, dejando de lado la conmoción inicial de Anita, este caso nos plantea una reflexión importante: ¿cree usted que deberíamos hacer más esfuerzos como país para colaborar con naciones donde el acceso a alimentos es limitado, y de qué manera podríamos hacerlo de forma efectiva y sostenible?
Como muchos saben, la situación en Cuba no ha sido precisamente fácil económicamente, y eso se nota en la disponibilidad de alimentos. Anita, en un video que ya lleva más reacciones de las que uno puede imaginar –más de 100 mil, pa' que se hagan una idea–, explica cómo el choque cultural fue brutal para ella. Llegar a una feria costarricense y verse rodeada de frutas, verduras, carnes… ¡dijo que era como si estuviera soñando!
"Salí de Cuba hace dos días y la verdad es que el choque con la realidad fue demasiado duro," dice Anita en el video, mientras camina entre puestos rebosantes de productos frescos. “Llegar a un mercado y ver que hay tantas cosas que en tu país ni siquiera las puedes ver. No les puedo explicar lo que se siente venir a un mercado y ver tanta variedad.” Ya uno se emociona escuchándola, ¡imagínate estar ahí!
Lo que realmente impactó a la influencer fue la facilidad con la que los costarricenses podemos acceder a estos alimentos básicos. Y no solo eso, sino también la posibilidad de comprar lo necesario para toda la semana. Eso, para ella, representa una verdadera revolución. Reconoció que "no entendía por qué mi país, Cuba, pasa por tantas cosas, cuando en muchas partes del mundo las personas tienen derecho a comprar lo básico que necesitan para vivir y en Cuba no lo hay.">
Anita también admitió que se sentía “como una niña chiquita”, incapaz de expresar con palabras la magnitud de lo que estaba presenciando. Hablando de cosas específicas, resaltó la presencia de fresas, algo que, según cuenta, no es tan común en Cuba. Ya uno se da cuenta de la diferencia abismal entre ambas realidades. ¡Qué carga, pensar en la gente que lucha por conseguir un plato de comida digna!
Y claro, la ola de comentarios no se hizo esperar. Usuarios de diferentes países expresaron su admiración por la experiencia de Anita y aprovecharon para preguntar sobre la vida en Costa Rica. Hubo hasta quien preguntó si acá tenemos dictadura, ¡qué pura vida! Otros comentaban desde Ecuador, ofreciendo información sobre la abundancia y precios bajos de sus mercados. Uno se llena de orgullo de ver cómo nuestro país es percibido como un oasis de estabilidad y oportunidades.
Más adelante en el video, Anita se muestra disfrutando de un pedazo de caña de azúcar, un detalle sencillo pero significativo de su inmersión en la cultura costarricense. Se nota que esta visita le ha abierto los ojos y le ha brindado una perspectiva diferente sobre la importancia de tener acceso a alimentos básicos. Después de todo, es algo fundamental para vivir una vida plena y saludable. ¡Qué tuanis que haya compartido su experiencia!
Ahora bien, dejando de lado la conmoción inicial de Anita, este caso nos plantea una reflexión importante: ¿cree usted que deberíamos hacer más esfuerzos como país para colaborar con naciones donde el acceso a alimentos es limitado, y de qué manera podríamos hacerlo de forma efectiva y sostenible?
