Yo soy una persona muy normal, de hecho, este perfil usa un nombre falso porque hasta ahora solo lo había utilizado en el foro de Ticas Ricas, algo que creo muchos por acá hacen. La vara es que ayer presencié algo que no puedo sacarme de la cabeza…
Yo trabajo para una de las compañías nacionales de mayor capital, precisamente soy la mano derecha de uno de los mayores accionistas, un señor de nacionalidad Alemana que merece todo mi respeto por el tipo de persona que es y la forma en la que trata a sus sub alternos, a pesar de las toneladas de dinero que posee es una teja de persona. Por mi puesto, sé que soy de su entera confianza desde hace ya algunos años y que le administro todo en cuanto a lo laboral se refiera, aún así, sé que hay una persona más con un puesto similar al mío, con algunas diferencias cómo que él no asiste ala oficina y se dedica a llevarle la agenda de asuntos personales, conducirle y acompañarle a actividades sociales. Hace aproximadamente un mes esta persona entró de emergencia al Hospital por un cáncer de Pulmón (solo tiene 34 años de edad pero fumaba demasiado).
Desde que esto ocurrió muchas cosas han cambiado para mi beneficio. Aunque ahora me toca duplicar gran parte del trabajo y mi horario se extiende muchísimo más el aumento de salario bien lo paga, incluso me dieron para uso personal uno de los carros de la compañía, algo que no noté con malicia fue que cada vez que me asignaban un beneficio nuevo mi jefe me llamaba aparte para hacerme un “Cocowash” de que él hacia esto por que confiaba en mí y que en mi puesto, y en especial con estas nuevas funciones yo iba a escuchar y a ver muchas cosas de carácter personal, que si sabía manejarlo podría llegar muy largo, sino pues que buscara trabajo.
En un inicio pensé que era lo de todos los maes… se levanta un culo por aquí otro por allá, al final del día llega a la casa y finge que su esposa es la única… esto nunca pasó durante los primeros 22 días, y eso que estoy seguro que yo lo recogía y lo dejaba a cada lugar que iba. El mae era pulcro al 100% Trabajo-Familia-Trabajo… Ni un trago de cerveza con amigos, ni un enrolado de marilucha… ni un mensaje de una chamaca… nada, el bro estaba limpio… 40 y tantos años, alto, marcado, bien parecido, con una galeta de plata y 4 carros deportivos en la choza… podía hacer lo que quisiera con quien quisiera, pero el mae iba de la casa al yugo y del yugo a la choza… Les juro que llegué a admirarlo por su entereza. .. … Hasta ayer.
A las 10 am, me dijo que no almorzara, que necesitaba hablar conmigo, a eso de la 1 pm fuimos a un chante lujosísimo, súper escondido y extremadamente costoso, como cualquiera de ustedes hubiera hecho pensé que el mae tenía la rosca inversa… claro!! Eso explica por que no tiene ni un solo lance y por qué los detalles costosos y el trato preferencial conmigo… por suerte no fue así, por primera vez lo vi fumar. No era droga, pero sin duda no un cigarro ordinario, era más largo de lo normal, don un ribete dorado alrededor y traído por un camarero sobre una almohada roja pequeña que a su vez estaba encima de una azafata plateada y cubierto por una tapa de vidrio que el camarero levantó para que mi jefe lo tomara, el aroma que salía del cigarro, lejos de molestar, olía a cedro con un toque de dulce. Fue cuando comenzó a decirme que me necesitaba hoy en la noche, que tendría una reunión que pasa una vez cada 6 meses. De uno de sus bolsillos sacó un brazalete negro de metal, su acabado era muy fno pero lo que me dijo cuando me lo dió me sorprendió mucho más:
- No lo ande en todo lado, los que saben qué es esto matarían por uno, es más, mejor se lo entrego hasta la noche, hoy puede ver cosas que jamás pensó, pero necesito que me prometa que nada de esto saldrá de su boca. -
-¿Qué tipo de cosas? –
- Tranquilo, no hay hombre vivo en la tierra que no disfrute lo que usted va a ver hoy, claro, si decide acompañarnos –
Las siguientes 9 horas fueron eternas, cuando subí al Audi TT de mi jefe me percaté que su celular estaba en el holder con una dirección de Waze, seguí la dirección por casi 45 minutos cuando llegamos a un lugar carretera a Guapiles, una entrada vacia y protegida con no menos de 20 guardas armados que nos pidieron mostrar los brazaletes, después de entrar, tal ves un kilometro más adelante había una entrada subterránea que asumí cómo parqueo, mi jefe me hizo señas para que no bajara y frente a nosotros habían uno 100 vehículos. Ferrari, Hummer, Mercedes, Volvo, Lexus…. No imagino cuanto dinero podía haber en todos aquellos autos.
-Media hora tarde y aún no llega la diversión –
- ¿La diversión?
Señaló hacia dos grandes áreas de cemento con luces y letras H pintadas. – Aún no llegan los Helicópteros –
Diez minutos después me di cuenta que estaba en lo correcto, el terreno donde estacionamos era una especie de campo ferial y efectivamente el estacionamiento era subterráneo, por alguna razón en esa ocasión el evento era bajo tierra y el estacionamiento arriba.
Los 20 guardas de la entrada no eran los únicos, abajo había uno en cada esquina o almenos eso asumí con las 2 esquinas que podía ver, además había unos 5 más chequeando de nuevo brazaletes. Ya estando de pie junto a ellos noté lo grande que eran, cada uno medía mínimo 2 metros, estaban armados fuertemente, aunque por su musculatura no pareciera que lo necesitaran, Era como ver 5 Batista de la WWE con escopetas de un calibre pesadísimo.
Repartidos por el salón (estacionamiento) habían puestos de comida y bebida separados por país o etnia, habían puestos de comida asiática, italiana, rusa, mexicana… todo lo que conocía y muchísimo más que no. De pronto pude reconocer algunos cuantos rostros, gente del mayor éxito imaginable, pero no reconocí ni a uno sólo que fuera costarricense, salvo a algunos diputados qué, según me explicaron después, necesitaban para su beneficio propio. En fin, entre las personas que pude reconocer estaban Jorge Vergara, Otto Guevara, Carlos Federspil y un poco de gente que sé que he visto en el periódico y en la tele.
No fue sino hasta uno 20 minutos desúes que un desfile de mujeres bellísimas comenzó a desfilar, todas vestiads igual y con antifaces, eran mujeres de primera calidad, lo más hermoso que he visto en mi vida, mi jefe se me acercó y me dijo:
-Tenga paciencia, en primera fila están los productores mexicanos, de aquí las agarran y se las llevan a tierra azteca, luego van los que son conocidos en el medio, luego nos dejan lo que queda, pero tranquilo que siempre se come bien.
Cuando alcé de nuevo la vista pude distinguir a dos de ellas, no eran ticas, eran las gemelas Dávalos, una a cada lado de un roco que nunca había visto en mi vida. Entocnes mi jefe aclaró:
- Ahh! Cierto, hoy hay españoles también, Pedro Almodovar, playo ese con ese par de culos.
No estoy seguro cuando sucedió, ver a las Dávalos moverse así me hizo perder la noción del tiempo, pero muchas de las chicas ya se habían desnudado por completo, eran unas 150 mujeres, entre ellas Karen y Karlina Brenes, Fernanda Jara, Meli Mora, y docenas de ricas que no conocía.
El humo de las drogas y el guaro se repartían por todos lados, poco a poco las personas entraban y salían de espacios separados con mantas donde me di cuenta más tarde que habían camas con inciensos, luces y montones de condones, algunos ya usados en basureros y otros nuevos listos para usarse. Incluso yo siento nada más un invitado pude tener lo mío, tres chicas a lo largo de la noche aunque debo de admitir que las 3 ya estaban un poco cansadas ya que no fui para nada el primero en acostarse con ellas esa noche, aunque no conozco el nombre de ninguna sé que una de ellas la he visto aquí y en algunas revistas… les contaría más pero debo irme.
Yo trabajo para una de las compañías nacionales de mayor capital, precisamente soy la mano derecha de uno de los mayores accionistas, un señor de nacionalidad Alemana que merece todo mi respeto por el tipo de persona que es y la forma en la que trata a sus sub alternos, a pesar de las toneladas de dinero que posee es una teja de persona. Por mi puesto, sé que soy de su entera confianza desde hace ya algunos años y que le administro todo en cuanto a lo laboral se refiera, aún así, sé que hay una persona más con un puesto similar al mío, con algunas diferencias cómo que él no asiste ala oficina y se dedica a llevarle la agenda de asuntos personales, conducirle y acompañarle a actividades sociales. Hace aproximadamente un mes esta persona entró de emergencia al Hospital por un cáncer de Pulmón (solo tiene 34 años de edad pero fumaba demasiado).
Desde que esto ocurrió muchas cosas han cambiado para mi beneficio. Aunque ahora me toca duplicar gran parte del trabajo y mi horario se extiende muchísimo más el aumento de salario bien lo paga, incluso me dieron para uso personal uno de los carros de la compañía, algo que no noté con malicia fue que cada vez que me asignaban un beneficio nuevo mi jefe me llamaba aparte para hacerme un “Cocowash” de que él hacia esto por que confiaba en mí y que en mi puesto, y en especial con estas nuevas funciones yo iba a escuchar y a ver muchas cosas de carácter personal, que si sabía manejarlo podría llegar muy largo, sino pues que buscara trabajo.
En un inicio pensé que era lo de todos los maes… se levanta un culo por aquí otro por allá, al final del día llega a la casa y finge que su esposa es la única… esto nunca pasó durante los primeros 22 días, y eso que estoy seguro que yo lo recogía y lo dejaba a cada lugar que iba. El mae era pulcro al 100% Trabajo-Familia-Trabajo… Ni un trago de cerveza con amigos, ni un enrolado de marilucha… ni un mensaje de una chamaca… nada, el bro estaba limpio… 40 y tantos años, alto, marcado, bien parecido, con una galeta de plata y 4 carros deportivos en la choza… podía hacer lo que quisiera con quien quisiera, pero el mae iba de la casa al yugo y del yugo a la choza… Les juro que llegué a admirarlo por su entereza. .. … Hasta ayer.
A las 10 am, me dijo que no almorzara, que necesitaba hablar conmigo, a eso de la 1 pm fuimos a un chante lujosísimo, súper escondido y extremadamente costoso, como cualquiera de ustedes hubiera hecho pensé que el mae tenía la rosca inversa… claro!! Eso explica por que no tiene ni un solo lance y por qué los detalles costosos y el trato preferencial conmigo… por suerte no fue así, por primera vez lo vi fumar. No era droga, pero sin duda no un cigarro ordinario, era más largo de lo normal, don un ribete dorado alrededor y traído por un camarero sobre una almohada roja pequeña que a su vez estaba encima de una azafata plateada y cubierto por una tapa de vidrio que el camarero levantó para que mi jefe lo tomara, el aroma que salía del cigarro, lejos de molestar, olía a cedro con un toque de dulce. Fue cuando comenzó a decirme que me necesitaba hoy en la noche, que tendría una reunión que pasa una vez cada 6 meses. De uno de sus bolsillos sacó un brazalete negro de metal, su acabado era muy fno pero lo que me dijo cuando me lo dió me sorprendió mucho más:
- No lo ande en todo lado, los que saben qué es esto matarían por uno, es más, mejor se lo entrego hasta la noche, hoy puede ver cosas que jamás pensó, pero necesito que me prometa que nada de esto saldrá de su boca. -
-¿Qué tipo de cosas? –
- Tranquilo, no hay hombre vivo en la tierra que no disfrute lo que usted va a ver hoy, claro, si decide acompañarnos –
Las siguientes 9 horas fueron eternas, cuando subí al Audi TT de mi jefe me percaté que su celular estaba en el holder con una dirección de Waze, seguí la dirección por casi 45 minutos cuando llegamos a un lugar carretera a Guapiles, una entrada vacia y protegida con no menos de 20 guardas armados que nos pidieron mostrar los brazaletes, después de entrar, tal ves un kilometro más adelante había una entrada subterránea que asumí cómo parqueo, mi jefe me hizo señas para que no bajara y frente a nosotros habían uno 100 vehículos. Ferrari, Hummer, Mercedes, Volvo, Lexus…. No imagino cuanto dinero podía haber en todos aquellos autos.
-Media hora tarde y aún no llega la diversión –
- ¿La diversión?
Señaló hacia dos grandes áreas de cemento con luces y letras H pintadas. – Aún no llegan los Helicópteros –
Diez minutos después me di cuenta que estaba en lo correcto, el terreno donde estacionamos era una especie de campo ferial y efectivamente el estacionamiento era subterráneo, por alguna razón en esa ocasión el evento era bajo tierra y el estacionamiento arriba.
Los 20 guardas de la entrada no eran los únicos, abajo había uno en cada esquina o almenos eso asumí con las 2 esquinas que podía ver, además había unos 5 más chequeando de nuevo brazaletes. Ya estando de pie junto a ellos noté lo grande que eran, cada uno medía mínimo 2 metros, estaban armados fuertemente, aunque por su musculatura no pareciera que lo necesitaran, Era como ver 5 Batista de la WWE con escopetas de un calibre pesadísimo.
Repartidos por el salón (estacionamiento) habían puestos de comida y bebida separados por país o etnia, habían puestos de comida asiática, italiana, rusa, mexicana… todo lo que conocía y muchísimo más que no. De pronto pude reconocer algunos cuantos rostros, gente del mayor éxito imaginable, pero no reconocí ni a uno sólo que fuera costarricense, salvo a algunos diputados qué, según me explicaron después, necesitaban para su beneficio propio. En fin, entre las personas que pude reconocer estaban Jorge Vergara, Otto Guevara, Carlos Federspil y un poco de gente que sé que he visto en el periódico y en la tele.
No fue sino hasta uno 20 minutos desúes que un desfile de mujeres bellísimas comenzó a desfilar, todas vestiads igual y con antifaces, eran mujeres de primera calidad, lo más hermoso que he visto en mi vida, mi jefe se me acercó y me dijo:
-Tenga paciencia, en primera fila están los productores mexicanos, de aquí las agarran y se las llevan a tierra azteca, luego van los que son conocidos en el medio, luego nos dejan lo que queda, pero tranquilo que siempre se come bien.
Cuando alcé de nuevo la vista pude distinguir a dos de ellas, no eran ticas, eran las gemelas Dávalos, una a cada lado de un roco que nunca había visto en mi vida. Entocnes mi jefe aclaró:
- Ahh! Cierto, hoy hay españoles también, Pedro Almodovar, playo ese con ese par de culos.
No estoy seguro cuando sucedió, ver a las Dávalos moverse así me hizo perder la noción del tiempo, pero muchas de las chicas ya se habían desnudado por completo, eran unas 150 mujeres, entre ellas Karen y Karlina Brenes, Fernanda Jara, Meli Mora, y docenas de ricas que no conocía.
El humo de las drogas y el guaro se repartían por todos lados, poco a poco las personas entraban y salían de espacios separados con mantas donde me di cuenta más tarde que habían camas con inciensos, luces y montones de condones, algunos ya usados en basureros y otros nuevos listos para usarse. Incluso yo siento nada más un invitado pude tener lo mío, tres chicas a lo largo de la noche aunque debo de admitir que las 3 ya estaban un poco cansadas ya que no fui para nada el primero en acostarse con ellas esa noche, aunque no conozco el nombre de ninguna sé que una de ellas la he visto aquí y en algunas revistas… les contaría más pero debo irme.
