¡Ay, Dios mío! Aquí seguimos viendo cómo el fútbol nacional nos da sorpresas de esas que te dejan con la boca abierta. Resulta que el Municipal Liberia, que andaba ilusionado con meterse a la final, recibió una patada en el trasero por parte del Comité de Competición de la Unafut. Le negaron los tres puntos que tanto ansiaban del partido contra Saprissa, ¡qué bronca!
Todo comenzó cuando el cuadro liberiano solicitó que se les otorgaran esos puntos extra argumentando una supuesta alineación indebida de Johnny Myrie. Según ellos, el mae estaba sancionado con cinco tarjetas amarillas, ¡pero en Liga Menor! Pensaron que era fácil agarrarle la jugada al sistema y subir sus posibilidades de clasificar, pero se equivocaron de lleno.
Pero acá viene el detalle, y es que parece que alguien no leyó bien el reglamento o simplemente hizo caso omiso a las normas establecidas. El Comité de Competición fue claro: las sanciones de la Liga Menor no tienen validez en la Primera División. ¡Así de simple, qué pura vida!, pero para Liberia significó un golpe durísimo.
En el comunicado oficial, la Unafut dejó caer la bomba explicando que “conforme al principio de jerarquía normativa, debe prevalecer lo dispuesto en el Reglamento Disciplinario sobre las Normas y el Reglamento de Competición”. En otras palabras, el mae Myrie sí jugó, pero su sanción no podía trasladarse, y Liberia se quedó con las manos vacías. ¡Qué sal!”, exclamó un hincha liberiano afuera del estadio.
Ahora, la realidad es clara: Herediano y Pérez Zeledón llegan a la última fecha con todas las cartas en la mesa para definir quién se queda con el boleto a la gran final. La tensión está a flor de piel y los aficionados ya están preparando sus gargantas para animar a sus equipos hasta el cansancio. Se espera un cierre de campeonato emocionante, con goles, sufrimiento y, seguramente, alguna que otra polémica más.
Este fallo arbitral ha levantado ampollas entre los fanáticos liberianos, quienes consideran que se les ha hecho una tremenda injusticia. Algunos incluso hablan de favoritismos y de decisiones cuestionables que perjudican al equipo guanacasteco. Pero más allá de las acusaciones, lo cierto es que Liberia deberá levantar cabeza y enfocarse en el futuro, porque este año se le fue la oportunidad de hacer historia.
La decisión del Comité de Competición ha generado un revuelo considerable en redes sociales y en los medios de comunicación. Muchos analistas deportivos coinciden en que la resolución es correcta desde el punto de vista reglamentario, pero lamentan el impacto negativo que ha tenido en el ánimo del Municipal Liberia. Lo que demuestra que el fútbol, aunque apasionante, también puede ser cruel e implacable. ¡Ay, qué brete!
Y ahora, mi gente, me pregunto: ¿Creen que el Comité de Competición tomó la decisión correcta o debería haber considerado algún factor atenuante para favorecer a Liberia? ¡Déjenme leer sus opiniones en los comentarios, quiero saber qué piensan ustedes!
Todo comenzó cuando el cuadro liberiano solicitó que se les otorgaran esos puntos extra argumentando una supuesta alineación indebida de Johnny Myrie. Según ellos, el mae estaba sancionado con cinco tarjetas amarillas, ¡pero en Liga Menor! Pensaron que era fácil agarrarle la jugada al sistema y subir sus posibilidades de clasificar, pero se equivocaron de lleno.
Pero acá viene el detalle, y es que parece que alguien no leyó bien el reglamento o simplemente hizo caso omiso a las normas establecidas. El Comité de Competición fue claro: las sanciones de la Liga Menor no tienen validez en la Primera División. ¡Así de simple, qué pura vida!, pero para Liberia significó un golpe durísimo.
En el comunicado oficial, la Unafut dejó caer la bomba explicando que “conforme al principio de jerarquía normativa, debe prevalecer lo dispuesto en el Reglamento Disciplinario sobre las Normas y el Reglamento de Competición”. En otras palabras, el mae Myrie sí jugó, pero su sanción no podía trasladarse, y Liberia se quedó con las manos vacías. ¡Qué sal!”, exclamó un hincha liberiano afuera del estadio.
Ahora, la realidad es clara: Herediano y Pérez Zeledón llegan a la última fecha con todas las cartas en la mesa para definir quién se queda con el boleto a la gran final. La tensión está a flor de piel y los aficionados ya están preparando sus gargantas para animar a sus equipos hasta el cansancio. Se espera un cierre de campeonato emocionante, con goles, sufrimiento y, seguramente, alguna que otra polémica más.
Este fallo arbitral ha levantado ampollas entre los fanáticos liberianos, quienes consideran que se les ha hecho una tremenda injusticia. Algunos incluso hablan de favoritismos y de decisiones cuestionables que perjudican al equipo guanacasteco. Pero más allá de las acusaciones, lo cierto es que Liberia deberá levantar cabeza y enfocarse en el futuro, porque este año se le fue la oportunidad de hacer historia.
La decisión del Comité de Competición ha generado un revuelo considerable en redes sociales y en los medios de comunicación. Muchos analistas deportivos coinciden en que la resolución es correcta desde el punto de vista reglamentario, pero lamentan el impacto negativo que ha tenido en el ánimo del Municipal Liberia. Lo que demuestra que el fútbol, aunque apasionante, también puede ser cruel e implacable. ¡Ay, qué brete!
Y ahora, mi gente, me pregunto: ¿Creen que el Comité de Competición tomó la decisión correcta o debería haber considerado algún factor atenuante para favorecer a Liberia? ¡Déjenme leer sus opiniones en los comentarios, quiero saber qué piensan ustedes!
