¡Aguante! Después de tanto rollo, parece que finalmente vamos a ver algunos cambios en los precios de los medicamentos acá en Costa Rica. La Asamblea Legislativa le dio luz verde a la 'Ley para la Apertura y Promoción de la Competencia en el Mercado de Medicamentos', con la promesa de que nuestros bolsillos respiran un poquito.
Pero, ¿cuánto realmente van a bajar esos precios? Ahí es donde la cosa se pone más turbia. La propuesta, impulsada por la diputada María Marta Carballo, no nos da números exactos, y eso a muchos nos dejó con cara de póker. Dice que aún no se puede decir qué tan grande va a ser el ahorro, porque todo depende de una comisión nueva que van a crear.
Y es que precisamente ahí radica el meollo del asunto: la Comisión Nacional de Precios de Medicamentos. Este nuevo órgano, que tendrá representación tanto del gobierno como del sector privado – CCSS, MEIC, Ministerio de Salud, farmacias, droguerías y laboratorios –, será quien defina el precio de referencia para cada medicamento. O sea, ellos tendrán la última palabra sobre cuánto pagamos por cada pastilla o jarabe. Un brete, la verdad.
Carballo explica que esa comisión tomará en cuenta varios factores: costos internacionales, nivel de innovación del producto, si existen alternativas más baratas y, claro, la demanda. Según ella, esto complica mucho poder dar una cifra concreta ahora mismo. Pero, ojo, en países como Colombia, El Salvador y Chile, donde ya usan sistemas similares de precios de referencia, han visto bajones de hasta el 80%. ¡Imagínate qué chiva sería eso acá!
Para ponerle un ejemplo concreto, menciona el caso del omeprazol de 20mg, esas 30 cápsulas que usamos muchos para el reflujo. Acá nos cuestan alrededor de ¢21.200, mientras que en Nicaragua salen unos módicos ¢2.650. En Guatemala, ¢4.240; en El Salvador, ¢5.300; y en Honduras, ¢6.360. Una diferencia abismal, chunches. Esto demuestra que hay espacio para mejorar, sin lugar a dudas.
Además de la comisión, la ley trae otras medidas interesantes. Por ejemplo, se creará un Observatorio de Precios Multinivel, que será una plataforma pública con información detallada de los precios en todas las farmacias del país, incluso por distrito. También se acelerarán los trámites para registrar medicamentos genéricos y se permitirán las importaciones paralelas, lo cual aumentará la competencia y debería presionar a la baja los precios. Hasta se prohibirán los famosos contratos de exclusividad entre farmacias y droguerías, esas varas que limitaban la opción de comprar en otro lado.
Ahora, la pelota está en la cancha del Presidente Chaves. Carballo ha hecho un llamado urgente para que él firme la ley lo más rápido posible. Porque, aunque la idea suena muy bien en papel, la verdadera prueba será ver cómo funciona en la práctica. Ver si la Comisión Nacional de Precios de Medicamentos cumple su función y si los precios realmente bajan como prometen, o si terminaremos viendo otra decepción más.
Todo esto suena prometedor, pero también plantea interrogantes. ¿Será que esta vez sí lograremos tener acceso a medicamentos más accesibles, o seguirá siendo solo otra promesa política? ¿Crees que la creación de la comisión logrará equilibrar los intereses del sector público y privado, o terminará favoreciendo a los mismos actores de siempre? ¡Dale, comparte tu opinión en el foro!
Pero, ¿cuánto realmente van a bajar esos precios? Ahí es donde la cosa se pone más turbia. La propuesta, impulsada por la diputada María Marta Carballo, no nos da números exactos, y eso a muchos nos dejó con cara de póker. Dice que aún no se puede decir qué tan grande va a ser el ahorro, porque todo depende de una comisión nueva que van a crear.
Y es que precisamente ahí radica el meollo del asunto: la Comisión Nacional de Precios de Medicamentos. Este nuevo órgano, que tendrá representación tanto del gobierno como del sector privado – CCSS, MEIC, Ministerio de Salud, farmacias, droguerías y laboratorios –, será quien defina el precio de referencia para cada medicamento. O sea, ellos tendrán la última palabra sobre cuánto pagamos por cada pastilla o jarabe. Un brete, la verdad.
Carballo explica que esa comisión tomará en cuenta varios factores: costos internacionales, nivel de innovación del producto, si existen alternativas más baratas y, claro, la demanda. Según ella, esto complica mucho poder dar una cifra concreta ahora mismo. Pero, ojo, en países como Colombia, El Salvador y Chile, donde ya usan sistemas similares de precios de referencia, han visto bajones de hasta el 80%. ¡Imagínate qué chiva sería eso acá!
Para ponerle un ejemplo concreto, menciona el caso del omeprazol de 20mg, esas 30 cápsulas que usamos muchos para el reflujo. Acá nos cuestan alrededor de ¢21.200, mientras que en Nicaragua salen unos módicos ¢2.650. En Guatemala, ¢4.240; en El Salvador, ¢5.300; y en Honduras, ¢6.360. Una diferencia abismal, chunches. Esto demuestra que hay espacio para mejorar, sin lugar a dudas.
Además de la comisión, la ley trae otras medidas interesantes. Por ejemplo, se creará un Observatorio de Precios Multinivel, que será una plataforma pública con información detallada de los precios en todas las farmacias del país, incluso por distrito. También se acelerarán los trámites para registrar medicamentos genéricos y se permitirán las importaciones paralelas, lo cual aumentará la competencia y debería presionar a la baja los precios. Hasta se prohibirán los famosos contratos de exclusividad entre farmacias y droguerías, esas varas que limitaban la opción de comprar en otro lado.
Ahora, la pelota está en la cancha del Presidente Chaves. Carballo ha hecho un llamado urgente para que él firme la ley lo más rápido posible. Porque, aunque la idea suena muy bien en papel, la verdadera prueba será ver cómo funciona en la práctica. Ver si la Comisión Nacional de Precios de Medicamentos cumple su función y si los precios realmente bajan como prometen, o si terminaremos viendo otra decepción más.
Todo esto suena prometedor, pero también plantea interrogantes. ¿Será que esta vez sí lograremos tener acceso a medicamentos más accesibles, o seguirá siendo solo otra promesa política? ¿Crees que la creación de la comisión logrará equilibrar los intereses del sector público y privado, o terminará favoreciendo a los mismos actores de siempre? ¡Dale, comparte tu opinión en el foro!