¡Ay, Dios mío, qué vaina! Aquí estamos otra vez con el caso de Kristel Aguilar y Nahomy Ramírez. Después de tanto tiempo, de tanta angustia para sus familias y pa’ todos nosotros, el Tribunal de Apelación le dio la razón a los defensores de los acusados y mandó a repetir todo el proceso judicial. ¡Un volteo de pestañas así, quién lo iba a pensar!
Como recordarán, Will Vanegas Sánchez y Leroy Alejandro Venegas Porras recibieron una condena de 70 años de cárcel cada uno por el doble femicidio, una sentencia que muchos considerábamos justa considerando la barbaridad que hicieron con esas muchachas. Kristel y Nahomy, dos jovencitas llenas de sueños, desaparecidas en 2023 después de ir a una fiesta en Limón. Una historia que nos dejó a todos helados y con el alma en vilo.
Según las investigaciones, las atrajeron con promesas falsas a una casa en el centro de Limón, alegando otra celebración. Pero ahí, en lugar de música y alegría, encontraron la muerte a manos de estos dos sujetos. La fiscalía demostró que idearon un plan macabro para acabar con sus vidas, borrando evidencias y ocultando los cuerpos, como si nada. ¡Una banda de criminales sin escrúpulos!
El Tribunal Penal de Limón los declaró culpables basándose en pruebas contundentes, a pesar de la falta de los restos físicos de las víctimas. Se encontraron rastros de sangre en la vivienda allanada por la Fiscalía y el OIJ, suficientes para indicar un sangrado masivo. Además, se pudo acreditar que los asesinos intentaron deshacerse de los cuerpos, llevándolos a diferentes lugares e incinerándolos, haciendo prácticamente imposible encontrarlos. ¡Más sal que caldo!
Pero ahora, la defensa recurrió y logró que el Tribunal de Apelación anulara la sentencia argumentando cuestiones de imparcialidad y objetividad. Dicen que se necesita un nuevo juicio con otro juez, “para evitar cualquier tipo de influencia” como dice el fallo. ¿Será que realmente hay algo raro detrás de esto, o simplemente es la estrategia legal de unos abogados buscando echar pa' atrás el caso?
Lo que sí es seguro es que este giro inesperado ha generado mucha indignación en las familias de Kristel y Nahomy, que ven cómo la justicia parece tardar en llegar, diluyéndose en tecnicismos legales y procesos burocráticos interminables. Han expresado su frustración y decepción ante esta decisión, sintiéndose nuevamente revictimizadas en medio de esta tragedia. ¡Y con toda la razón, huele a novela!
Ahora, los implicados seguirán presos preventivamente hasta abril del próximo año, esperando el inicio de este nuevo capítulo judicial. Se espera que el tribunal de Limón programe pronto el debate, pero queda la incertidumbre de cómo será el desarrollo de las cosas y si esta vez se logrará alcanzar una condena definitiva. ¡Que tengan cuidado esos delincuentes porque aquí no se andan jugando!
Este nuevo juicio plantea muchas preguntas. ¿Será que la defensa podrá encontrar alguna laguna en el proceso para desacreditar las pruebas presentadas por la Fiscalía? ¿Logrará la justicia finalmente darle paz a las familias de Kristel y Nahomy? ¿Ustedes creen que este nuevo juicio tendrá un desenlace diferente? Dejen sus opiniones en los comentarios, ¡me interesa saber qué piensan sobre este asunto tan delicado y doloroso!
Como recordarán, Will Vanegas Sánchez y Leroy Alejandro Venegas Porras recibieron una condena de 70 años de cárcel cada uno por el doble femicidio, una sentencia que muchos considerábamos justa considerando la barbaridad que hicieron con esas muchachas. Kristel y Nahomy, dos jovencitas llenas de sueños, desaparecidas en 2023 después de ir a una fiesta en Limón. Una historia que nos dejó a todos helados y con el alma en vilo.
Según las investigaciones, las atrajeron con promesas falsas a una casa en el centro de Limón, alegando otra celebración. Pero ahí, en lugar de música y alegría, encontraron la muerte a manos de estos dos sujetos. La fiscalía demostró que idearon un plan macabro para acabar con sus vidas, borrando evidencias y ocultando los cuerpos, como si nada. ¡Una banda de criminales sin escrúpulos!
El Tribunal Penal de Limón los declaró culpables basándose en pruebas contundentes, a pesar de la falta de los restos físicos de las víctimas. Se encontraron rastros de sangre en la vivienda allanada por la Fiscalía y el OIJ, suficientes para indicar un sangrado masivo. Además, se pudo acreditar que los asesinos intentaron deshacerse de los cuerpos, llevándolos a diferentes lugares e incinerándolos, haciendo prácticamente imposible encontrarlos. ¡Más sal que caldo!
Pero ahora, la defensa recurrió y logró que el Tribunal de Apelación anulara la sentencia argumentando cuestiones de imparcialidad y objetividad. Dicen que se necesita un nuevo juicio con otro juez, “para evitar cualquier tipo de influencia” como dice el fallo. ¿Será que realmente hay algo raro detrás de esto, o simplemente es la estrategia legal de unos abogados buscando echar pa' atrás el caso?
Lo que sí es seguro es que este giro inesperado ha generado mucha indignación en las familias de Kristel y Nahomy, que ven cómo la justicia parece tardar en llegar, diluyéndose en tecnicismos legales y procesos burocráticos interminables. Han expresado su frustración y decepción ante esta decisión, sintiéndose nuevamente revictimizadas en medio de esta tragedia. ¡Y con toda la razón, huele a novela!
Ahora, los implicados seguirán presos preventivamente hasta abril del próximo año, esperando el inicio de este nuevo capítulo judicial. Se espera que el tribunal de Limón programe pronto el debate, pero queda la incertidumbre de cómo será el desarrollo de las cosas y si esta vez se logrará alcanzar una condena definitiva. ¡Que tengan cuidado esos delincuentes porque aquí no se andan jugando!
Este nuevo juicio plantea muchas preguntas. ¿Será que la defensa podrá encontrar alguna laguna en el proceso para desacreditar las pruebas presentadas por la Fiscalía? ¿Logrará la justicia finalmente darle paz a las familias de Kristel y Nahomy? ¿Ustedes creen que este nuevo juicio tendrá un desenlace diferente? Dejen sus opiniones en los comentarios, ¡me interesa saber qué piensan sobre este asunto tan delicado y doloroso!
