Un hombre va conduciendo su coche cuando al lado de la carretera ve una estación de gasolina con un letrero:
-"Gasolina y sexo gratis".
El hombre se detiene y entra a la estación.
El encargado le dice:
-Para ganar gasolina y sexo gratis, escoja un número del uno al diez.
-Muy bien... ¡Tres!
-No, lo siento, espero que tenga más suerte otro día.
El hombre regresa varias veces esa misma semana, para ver si podía ganar gasolina y sexo gratis. Después de esos siete días no había tenido suerte, y le dice furioso al encargado:
-¡He probado todos estos días, pero aún no he ganado! ¡Estoy seguro de que este juego está arreglado!
-¡Claro que no!, -dice el vendedor. -Nosotros no hacemos trampa. Pregúntele a su esposa: ella ha ganado tres veces esta semana..
