Maes, en serio, a veces uno se mete a leer noticias y todo es un despiche. Que la gasolina, que la presa, que el político de turno se jaló una torta... cansa, ¿verdad? Por eso, cuando uno se topa con una vara tan tuanis como esta, hay que compartirla y hacerle bulla. Resulta que hay una luz de esperanza gigante para un montón de familias en Tiquicia que tienen güilas con condiciones médicas que, seamos honestos, cuestan un ojo de la cara y más para tratar.
La noticia es esta: la Fundación Fresh Start, junto con gente de aquí como el Hospital Metropolitano y PediaClinic, está relanzando un programa para hacer cirugías reconstructivas totalmente gratis a menores de 18 años. Y no son cirugías cualquiera, maes. Estamos hablando de operaciones que le pueden cambiar la vida a un niño o adolescente. Diay, y para ponerle la cereza al pastel, las cirugías se hacen en Estados Unidos, con todo cubierto: el viaje, la operación y hasta el seguimiento postoperatorio. ¡Qué nivel de ayuda!
Ahora, no es una rifa ni nada por el estilo. La vara es seria y está bien pensada. Hay un comité que analiza cada caso con lupa. Buscan chiquitos y jóvenes con deformidades, ya sea de nacimiento o por algún accidente, que de verdad necesiten la operación para mejorar su calidad de vida. Le dan prioridad a los casos donde la cirugía no es solo un tema estético, sino que va a mejorar la movilidad o la función de una parte del cuerpo. Es decir, buscan generar un impacto real y duradero. La gente detrás de esto es un carga, porque se están asegurando de que la ayuda llegue a quien más lo necesita y no tenga cómo cubrirlo por otro lado.
Y ojo la lista de condiciones que pueden tratar, porque el brete que se van a mandar es impresionante. Va desde labio y paladar hendido, microtia (que es cuando la orejita no se forma bien), hasta cicatrices graves por quemaduras o accidentes, estrabismo y polidactilia (cuando nacen con deditos extra). Imagínense el cambio para un güila que ha vivido acomplejado por una cicatriz o que no puede usar bien su manita. El programa está montado a cachete, porque no solo los operan y listo, sino que les dan seguimiento con rehabilitación y terapias si hace falta. Es una solución completa.
Aquí va la parte importante para los que conozcan a alguien que podría aplicar: ¡pónganse las pilas con las fechas! Las familias interesadas tienen que llenar un formulario antes del jueves 4 de setiembre. Con eso, el equipo verifica los datos y los diagnósticos. Después de ese primer filtro, el martes 9 de setiembre van a hacer una valoración médica presencial en PediaClinic. Así que si saben de alguna familia que esté pasando por una situación así, pásenle el santo. Una oportunidad como esta no aparece todos los días y podría significar un antes y un después para un montón de güilas.
Maes, ¿qué opinan de estas alianzas entre fundaciones de afuera y empresas de aquí? ¿Creen que es el camino a seguir para resolver broncas que a veces el sistema público no da abasto para cubrir? ¡Los leo!
La noticia es esta: la Fundación Fresh Start, junto con gente de aquí como el Hospital Metropolitano y PediaClinic, está relanzando un programa para hacer cirugías reconstructivas totalmente gratis a menores de 18 años. Y no son cirugías cualquiera, maes. Estamos hablando de operaciones que le pueden cambiar la vida a un niño o adolescente. Diay, y para ponerle la cereza al pastel, las cirugías se hacen en Estados Unidos, con todo cubierto: el viaje, la operación y hasta el seguimiento postoperatorio. ¡Qué nivel de ayuda!
Ahora, no es una rifa ni nada por el estilo. La vara es seria y está bien pensada. Hay un comité que analiza cada caso con lupa. Buscan chiquitos y jóvenes con deformidades, ya sea de nacimiento o por algún accidente, que de verdad necesiten la operación para mejorar su calidad de vida. Le dan prioridad a los casos donde la cirugía no es solo un tema estético, sino que va a mejorar la movilidad o la función de una parte del cuerpo. Es decir, buscan generar un impacto real y duradero. La gente detrás de esto es un carga, porque se están asegurando de que la ayuda llegue a quien más lo necesita y no tenga cómo cubrirlo por otro lado.
Y ojo la lista de condiciones que pueden tratar, porque el brete que se van a mandar es impresionante. Va desde labio y paladar hendido, microtia (que es cuando la orejita no se forma bien), hasta cicatrices graves por quemaduras o accidentes, estrabismo y polidactilia (cuando nacen con deditos extra). Imagínense el cambio para un güila que ha vivido acomplejado por una cicatriz o que no puede usar bien su manita. El programa está montado a cachete, porque no solo los operan y listo, sino que les dan seguimiento con rehabilitación y terapias si hace falta. Es una solución completa.
Aquí va la parte importante para los que conozcan a alguien que podría aplicar: ¡pónganse las pilas con las fechas! Las familias interesadas tienen que llenar un formulario antes del jueves 4 de setiembre. Con eso, el equipo verifica los datos y los diagnósticos. Después de ese primer filtro, el martes 9 de setiembre van a hacer una valoración médica presencial en PediaClinic. Así que si saben de alguna familia que esté pasando por una situación así, pásenle el santo. Una oportunidad como esta no aparece todos los días y podría significar un antes y un después para un montón de güilas.
Maes, ¿qué opinan de estas alianzas entre fundaciones de afuera y empresas de aquí? ¿Creen que es el camino a seguir para resolver broncas que a veces el sistema público no da abasto para cubrir? ¡Los leo!