¡Ay, Dios mío, qué vaina! Resulta que la Municipalidad de San José, con todo el rollo de la Navidad encima, está pensando en meterle unos diecisiete millones de colones para tener seguridad privada vigilando los adornos navideños en siete parques de la capital. Parece que ya no hay quién respete ni la decoración más sencilla, ¿eh?
La idea es que estos guardias estén ahí día y noche, desde el 5 de diciembre hasta el 8 de enero, cuidando de que ningún vándalo le haga cosquillas a los pinos, luces y demás elementos festivos. Imagínate, más de un mes entero de gente patrullando los parques con la esperanza de pillar a algún mae intentando robarse una esfera gigante o romper una guirnalda. ¡Parece sacado de una película!
Según el papeleo del Sistema Integrado de Compras Públicas (SICOP), el ayuntamiento necesita “contratar 7 oficiales de seguridad privada para brindar Seguridad 24/7 a decoración navideña en 7 parques del cantón”. Y vaya que sí ponen requisitos: uniformes completos, ponchos, chalecos reflectivos... ¡hasta comida diaria tienen que darle a los guardias! Uno se pregunta si van a ponerles aire acondicionado también para que no se les agote el calor.
Los parques elegidos para este despliegue de seguridad son el Parque de la Merced, el Parque Central, la Plaza de las Garantías Sociales, la Plaza de la Democracia, el Parque Morazán, el Parque España, el Parque Nacional y el Parque de la Merced. Una verdadera cobertura, como para sentirse tranquilos. Pero claro, con tanta inseguridad que hay corriendo, no se puede arriesgar, diay.
Lo que más me sorprende es la lista de sanciones que han preparado si algo sale mal. Si presentan guardias distintos a los registrados, usan personal fuera de edad, no portan el uniforme completo o se retiran antes de tiempo… ¡multa! ¡Una multa del 0.38% del contrato por cada falla! Ya ven, no se andan jugando en este brete. Además, quieren asegurar que la empresa tenga al menos quince agentes inscritos en el Ministerio de Seguridad Pública, aunque solo usen a siete en los parques. Eso sí es planificar a conciencia.
Y ojo, que también exigen bases de datos accesibles para la policía municipal, radios de comunicación y un supervisor disponible para resolver cualquier problema “con capacidad de decisión y solución inmediata”. Es decir, que no se pueden andar regodeando con los problemas, sino que tienen que actuar rápido y con eficacia. Me pregunto si saben manejar una radio walkie-talkie o si van a pedir manualito.
Pero, sinceramente, una se queda pensando si todo este dinero no podría destinarse a otras cosas más necesarias, como mejorar la iluminación de las calles, aumentar la frecuencia de los policías patrullando o invertir en programas sociales que realmente marquen la diferencia. Porque, vamos, con toda la plata que van a gastar, podrían comprarles buenos adornos a todos los barrios, en vez de depender de guardias armados para que los cuiden. Seamos honestos, el verdadero regalo estaría en sentirnos seguros caminando por nuestras propias comunidades.
En fin, parece que la Municipalidad ha decidido apostar por la seguridad privada para proteger la Navidad. ¿Será suficiente para evitar el vandalismo o simplemente estamos creando una imagen de miedo y desconfianza? Ahora dime tú, ¿crees que esta inversión vale la pena o deberían buscar otras alternativas para cuidar nuestros parques y disfrutar de estas fiestas decembrinas en paz?
La idea es que estos guardias estén ahí día y noche, desde el 5 de diciembre hasta el 8 de enero, cuidando de que ningún vándalo le haga cosquillas a los pinos, luces y demás elementos festivos. Imagínate, más de un mes entero de gente patrullando los parques con la esperanza de pillar a algún mae intentando robarse una esfera gigante o romper una guirnalda. ¡Parece sacado de una película!
Según el papeleo del Sistema Integrado de Compras Públicas (SICOP), el ayuntamiento necesita “contratar 7 oficiales de seguridad privada para brindar Seguridad 24/7 a decoración navideña en 7 parques del cantón”. Y vaya que sí ponen requisitos: uniformes completos, ponchos, chalecos reflectivos... ¡hasta comida diaria tienen que darle a los guardias! Uno se pregunta si van a ponerles aire acondicionado también para que no se les agote el calor.
Los parques elegidos para este despliegue de seguridad son el Parque de la Merced, el Parque Central, la Plaza de las Garantías Sociales, la Plaza de la Democracia, el Parque Morazán, el Parque España, el Parque Nacional y el Parque de la Merced. Una verdadera cobertura, como para sentirse tranquilos. Pero claro, con tanta inseguridad que hay corriendo, no se puede arriesgar, diay.
Lo que más me sorprende es la lista de sanciones que han preparado si algo sale mal. Si presentan guardias distintos a los registrados, usan personal fuera de edad, no portan el uniforme completo o se retiran antes de tiempo… ¡multa! ¡Una multa del 0.38% del contrato por cada falla! Ya ven, no se andan jugando en este brete. Además, quieren asegurar que la empresa tenga al menos quince agentes inscritos en el Ministerio de Seguridad Pública, aunque solo usen a siete en los parques. Eso sí es planificar a conciencia.
Y ojo, que también exigen bases de datos accesibles para la policía municipal, radios de comunicación y un supervisor disponible para resolver cualquier problema “con capacidad de decisión y solución inmediata”. Es decir, que no se pueden andar regodeando con los problemas, sino que tienen que actuar rápido y con eficacia. Me pregunto si saben manejar una radio walkie-talkie o si van a pedir manualito.
Pero, sinceramente, una se queda pensando si todo este dinero no podría destinarse a otras cosas más necesarias, como mejorar la iluminación de las calles, aumentar la frecuencia de los policías patrullando o invertir en programas sociales que realmente marquen la diferencia. Porque, vamos, con toda la plata que van a gastar, podrían comprarles buenos adornos a todos los barrios, en vez de depender de guardias armados para que los cuiden. Seamos honestos, el verdadero regalo estaría en sentirnos seguros caminando por nuestras propias comunidades.
En fin, parece que la Municipalidad ha decidido apostar por la seguridad privada para proteger la Navidad. ¿Será suficiente para evitar el vandalismo o simplemente estamos creando una imagen de miedo y desconfianza? Ahora dime tú, ¿crees que esta inversión vale la pena o deberían buscar otras alternativas para cuidar nuestros parques y disfrutar de estas fiestas decembrinas en paz?
