¡Ay, Dios mío! La pinta que le dieron estos señores del Grupo INS… resulta que recogieron unas 600 botas de hule pa' los pibles Maleku, esos que viven allá arriba en Guatuso. Uno piensa, ¿quién anda regalando botas de hule? Pero vaya que le hace falta, mi pana. Estos peñitas andaban caminando descalzos y con el frío que hay ahí arriba, ¡qué torta!
Y ojo, esto no es algo nuevo. La campaña se llama “Botatón”, y parece que se puso en marcha el 10 de noviembre, justo antes de que llegaran los Fieles Difuntos, pa’ que todos estuvieran bien equipados y protegidos. Imagínate, andar buscando el brete en medio de la lluvia y encima con los pies llenos de barro… ¡Qué sal!
Así que, desde el INS se pusieron las pilas, movilizaron a sus colaboradores, clientes y hasta voluntarios pa’ que juntaran esas botas. Dicen que el problema es que en la zona a veces andan por ahí unos bichos que te pueden causar verdaderas cargas, y con las botas los peñitas estarán mucho más seguros. Una verdadera preocupación, porque el ambiente allá arriba es bastante complicado, con todo el asunto de los residuos y eso.
La entrega se hizo este jueves 11 de diciembre en el Palenque Margarita, en Guatuso. Ahí hubo de todo: bomberos, gente del INS, y los chiquitos Maleku felices recibiendo sus nuevas botas. Además de las botas, les dieron otros chuches que donaron otras personas y hasta hicieron algunas actividades pa’ que los niños aprendieran cómo cuidarse. ¡Qué tuanis!
Estos Maleku, como saben, tienen un territorio ancestral muy grande, que incluye áreas sagradas como el Volcán Arenal. Ahora viven en tres palenques: Margarita, Tonjibe y El Sol. Aunque su territorio original era más extenso, siguen manteniendo viva su cultura y tradiciones, ¡y ahora también sus pies secos gracias al INS!
Esto forma parte de las acciones sociales que realiza el INS, tratando de echarle una mano a las comunidades que están en situaciones difíciles. Siempre es bueno ver iniciativas así, que buscan mejorar la calidad de vida de nuestros hermanos ticos. Hay mucha gente necesitada y estas campañas demuestran que todavía hay corazones nobles por ahí, dispuestos a ayudar.
Seamos honestos, nadie espera que el INS se convierta en Cáritas, pero sí es bueno que hagan su parte, especialmente si se trata de proteger a los más pequeños. Las botas de hule no son un lujo, son una necesidad pa’ estos niños que andan caminando por terrenos difíciles. Es importante recordar que la salud de estos peñitas depende de muchas cosas, y tener unas buenas botas puede marcar la diferencia.
Bueno, mi pana, ¿tú qué opinas? ¿Crees que el gobierno debería invertir más en programas como este, que ayudan directamente a las comunidades indígenas? ¿O consideras que el INS debería estar enfocado en otras prioridades? Déjanos tus comentarios abajo y a ver qué sale del debate, ¡porque esto está a cachete!
Y ojo, esto no es algo nuevo. La campaña se llama “Botatón”, y parece que se puso en marcha el 10 de noviembre, justo antes de que llegaran los Fieles Difuntos, pa’ que todos estuvieran bien equipados y protegidos. Imagínate, andar buscando el brete en medio de la lluvia y encima con los pies llenos de barro… ¡Qué sal!
Así que, desde el INS se pusieron las pilas, movilizaron a sus colaboradores, clientes y hasta voluntarios pa’ que juntaran esas botas. Dicen que el problema es que en la zona a veces andan por ahí unos bichos que te pueden causar verdaderas cargas, y con las botas los peñitas estarán mucho más seguros. Una verdadera preocupación, porque el ambiente allá arriba es bastante complicado, con todo el asunto de los residuos y eso.
La entrega se hizo este jueves 11 de diciembre en el Palenque Margarita, en Guatuso. Ahí hubo de todo: bomberos, gente del INS, y los chiquitos Maleku felices recibiendo sus nuevas botas. Además de las botas, les dieron otros chuches que donaron otras personas y hasta hicieron algunas actividades pa’ que los niños aprendieran cómo cuidarse. ¡Qué tuanis!
Estos Maleku, como saben, tienen un territorio ancestral muy grande, que incluye áreas sagradas como el Volcán Arenal. Ahora viven en tres palenques: Margarita, Tonjibe y El Sol. Aunque su territorio original era más extenso, siguen manteniendo viva su cultura y tradiciones, ¡y ahora también sus pies secos gracias al INS!
Esto forma parte de las acciones sociales que realiza el INS, tratando de echarle una mano a las comunidades que están en situaciones difíciles. Siempre es bueno ver iniciativas así, que buscan mejorar la calidad de vida de nuestros hermanos ticos. Hay mucha gente necesitada y estas campañas demuestran que todavía hay corazones nobles por ahí, dispuestos a ayudar.
Seamos honestos, nadie espera que el INS se convierta en Cáritas, pero sí es bueno que hagan su parte, especialmente si se trata de proteger a los más pequeños. Las botas de hule no son un lujo, son una necesidad pa’ estos niños que andan caminando por terrenos difíciles. Es importante recordar que la salud de estos peñitas depende de muchas cosas, y tener unas buenas botas puede marcar la diferencia.
Bueno, mi pana, ¿tú qué opinas? ¿Crees que el gobierno debería invertir más en programas como este, que ayudan directamente a las comunidades indígenas? ¿O consideras que el INS debería estar enfocado en otras prioridades? Déjanos tus comentarios abajo y a ver qué sale del debate, ¡porque esto está a cachete!
