¡Ay, Dios mío! Quién lo diría, los gringos metidos en un lío más grande que una torta de chorizo. Resulta que el gobierno de Estados Unidos está cerrado, y no poquito, sino que batió el récord histórico. Parece que los republicanos de Trump y los demócratas no se ponen de acuerdo con el presupuesto, y eso ha dejado medio país patas arriba.
La bronca va así: llevamos unas 36 semanas con esta parálisis presupuestaria, superando la marca anterior de 2019, que ya era bastante. Imagínate, casi millón y medio de burócratas sin pagar, muchos cumpliendo sus labores esenciales como controladores aéreos o policías, pero sin saber cuándo van a ver el dinerito. Esto se ha convertido en una verdadera pincha, diay.
Y ni hablar de los aeropuertos, que ahí sí que la cosa está que quema. El secretario de transporte ya anda soltando alertas de que podrían tener que cerrar espacios aéreos si la situación sigue así. Dice que si los demócratas no ceden pronto, vamos a ver vuelos cancelados a montones y un caos generalizado. ¡Qué nivel de desorganización!
Hasta los programas de ayuda social se han visto afectados. Trump prometió que la comida llegará después de que reabran el gobierno, pero ya hubo movidas raras antes, donde decían que sí iban a dar bonos y luego resultó que no. La justicia tuvo que meterse a poner orden y obligarlos a cumplir con la entrega de ayudas. Claramente, los pobres están sufriendo las consecuencias de este mamarracho político.
Mike Johnson, el presidente de la Cámara de Representantes, estaba diciendo que nadie esperaba que esto llegara tan lejos. Los republicanos querían que los senadores demócratas les apoyaran en una votación rápida, pero estos últimos tienen claro que no van a ceder tan fácil. Quieren parar las reformas sanitarias de Trump y discutirlo todo desde cero, lo cual implica deshacer gran parte de lo que ya se aprobó. ¡Una lucha de titanes, mae!
Entre tanto jaleo, hay algunos tipos tratando de hacer un puente, buscando un punto intermedio para bajarle al calor. Un grupito de diputados centristas propuso algunas ideas para ahorrar en seguros médicos, pero Trump se mantiene duro como la piedra, negándose a negociar y usando el “arma nuclear” del parlamento para pasar por encima de la oposición. ¡El hombre no quiere escuchar razones, ni siquiera cuando la casa se está quemando!
Ahora bien, este “filibusterismo”, como le llaman allá, es un arma de doble filo. Los demócratas lo usaron antes para bloquear cosas que proponían los republicanos, así que si Trump lo elimina, ellos también podrán usarlo en el futuro. Podríamos verlos intentando que Puerto Rico o Washington se conviertan en estados, por ejemplo. ¡Todo es posible en el mundo loco de la política estadounidense!
Bueno, pues ya saben, los gringos están teniendo un problema serio. Y la pregunta que me hago es: ¿Cómo afectará todo esto a nuestra economía? ¿Vamos a sentir las consecuencias aquí en Costa Rica con más inflación o problemas en el turismo? ¡Déjenme sus opiniones en el foro, quiero saber qué piensan ustedes sobre este tremendo desmadre!
La bronca va así: llevamos unas 36 semanas con esta parálisis presupuestaria, superando la marca anterior de 2019, que ya era bastante. Imagínate, casi millón y medio de burócratas sin pagar, muchos cumpliendo sus labores esenciales como controladores aéreos o policías, pero sin saber cuándo van a ver el dinerito. Esto se ha convertido en una verdadera pincha, diay.
Y ni hablar de los aeropuertos, que ahí sí que la cosa está que quema. El secretario de transporte ya anda soltando alertas de que podrían tener que cerrar espacios aéreos si la situación sigue así. Dice que si los demócratas no ceden pronto, vamos a ver vuelos cancelados a montones y un caos generalizado. ¡Qué nivel de desorganización!
Hasta los programas de ayuda social se han visto afectados. Trump prometió que la comida llegará después de que reabran el gobierno, pero ya hubo movidas raras antes, donde decían que sí iban a dar bonos y luego resultó que no. La justicia tuvo que meterse a poner orden y obligarlos a cumplir con la entrega de ayudas. Claramente, los pobres están sufriendo las consecuencias de este mamarracho político.
Mike Johnson, el presidente de la Cámara de Representantes, estaba diciendo que nadie esperaba que esto llegara tan lejos. Los republicanos querían que los senadores demócratas les apoyaran en una votación rápida, pero estos últimos tienen claro que no van a ceder tan fácil. Quieren parar las reformas sanitarias de Trump y discutirlo todo desde cero, lo cual implica deshacer gran parte de lo que ya se aprobó. ¡Una lucha de titanes, mae!
Entre tanto jaleo, hay algunos tipos tratando de hacer un puente, buscando un punto intermedio para bajarle al calor. Un grupito de diputados centristas propuso algunas ideas para ahorrar en seguros médicos, pero Trump se mantiene duro como la piedra, negándose a negociar y usando el “arma nuclear” del parlamento para pasar por encima de la oposición. ¡El hombre no quiere escuchar razones, ni siquiera cuando la casa se está quemando!
Ahora bien, este “filibusterismo”, como le llaman allá, es un arma de doble filo. Los demócratas lo usaron antes para bloquear cosas que proponían los republicanos, así que si Trump lo elimina, ellos también podrán usarlo en el futuro. Podríamos verlos intentando que Puerto Rico o Washington se conviertan en estados, por ejemplo. ¡Todo es posible en el mundo loco de la política estadounidense!
Bueno, pues ya saben, los gringos están teniendo un problema serio. Y la pregunta que me hago es: ¿Cómo afectará todo esto a nuestra economía? ¿Vamos a sentir las consecuencias aquí en Costa Rica con más inflación o problemas en el turismo? ¡Déjenme sus opiniones en el foro, quiero saber qué piensan ustedes sobre este tremendo desmadre!