Gente, a revisar el baño ¡pero ya! Porque esta noticia no es vara, y nos toca a todos de cerca. Resulta que el Ministerio de Salud acaba de soltar una bomba: la empresa Colgate-Palmolive va a retirar voluntariamente del país su pasta de dientes Total Clean Mint Prevención Activa. Sí, leyeron bien. Esa misma que quizás tienen al lado del cepillo. Y no es por un error de etiquetado o una cuestión menor. ¡Qué torta, de verdad! La decisión viene después de que se encendieran las alarmas a nivel internacional, principalmente en México, donde la gente empezó a reportar un despiche de problemas.
Imagínense ustedes, uno se lava los dientes en automático tres veces al día buscando frescura y salud, y resulta que el remedio puede ser peor que la enfermedad. Según el reporte, esta pasta en específico puede causar en algunas personas una lista de cosas que nadie quiere tener cerca de la boca: irritación, encías inflamadas, dolor, sensibilidad, y en los casos más feos, hasta úlceras y aftas. O sea, un coctel de malestares por cortesía de un producto que se supone que debe prevenirlos. ¡Qué sal! La vara se puso tan seria que Salud tuvo una reunión directa con la gente de Colgate y ahí mismo se acordó sacar el producto de todos los anaqueles del país.
Aquí es donde la cosa se pone interesante. Aunque Colgate-Palmolive se jaló una torta monumental con este producto, hay que decir que el retiro es "voluntario". Esto quiere decir que la misma empresa está organizando la logística para recoger los chunches, pero no crean que es por pura buena fe. El Ministerio, a través de la Dirección de Regulación de Productos de Interés Sanitario, les va a estar respirando en la nuca para asegurarse de que cumplan al pie de la letra. Ahora les toca a ellos el brete de peinar el país para que no quede ni un solo tubo a la venta, y a Salud el de fiscalizar que lo hagan bien.
Pero más allá del retiro en sí, esto nos deja pensando. Diay, ¿y ahora? Uno crece viendo los anuncios de estas marcas gigantes, confiando ciegamente en que sus productos pasaron mil y un controles de calidad. Compramos estas varas sin cuestionar, porque asumimos que son seguras. Una noticia así le mueve el piso a cualquiera. ¿Cuántos de nosotros hemos usado esa pasta sin tener idea del riesgo? ¿O cuántos habrán sentido alguna molestia y la achacaron a cualquier otra cosa, menos a la crema dental? Es una llamada de atención para no ser tan confiados y, de paso, para aplaudir que las autoridades (aunque sea replicando una alerta internacional) estén encima del tema.
En resumen: el mensaje es claro y directo. Vayan a sus baños, busquen la pasta Colgate Total Clean Mint Prevención Activa y si la tienen, mejor deséchenla. No es para jugar de alarmistas, pero como dicen, es mejor prevenir que lamentar, y en este caso, lamentar podría significar una visita de emergencia al dentista. El Ministerio de Salud ya hizo su parte al comunicar, ahora nos toca a nosotros como consumidores cuidarnos la espalda (y la boca). La confianza cuesta años en construirse y segundos en destruirse, y este despiste le va a costar caro a Colgate.
Ahora en serio, maes, más allá de correr a botar la pasta, ¿qué opinan de esta vara? ¿Les golpea la confianza en una marca tan gigante como Colgate, o les parece que es un buen gesto que al menos estén respondiendo al problema? ¡Los leo!
Imagínense ustedes, uno se lava los dientes en automático tres veces al día buscando frescura y salud, y resulta que el remedio puede ser peor que la enfermedad. Según el reporte, esta pasta en específico puede causar en algunas personas una lista de cosas que nadie quiere tener cerca de la boca: irritación, encías inflamadas, dolor, sensibilidad, y en los casos más feos, hasta úlceras y aftas. O sea, un coctel de malestares por cortesía de un producto que se supone que debe prevenirlos. ¡Qué sal! La vara se puso tan seria que Salud tuvo una reunión directa con la gente de Colgate y ahí mismo se acordó sacar el producto de todos los anaqueles del país.
Aquí es donde la cosa se pone interesante. Aunque Colgate-Palmolive se jaló una torta monumental con este producto, hay que decir que el retiro es "voluntario". Esto quiere decir que la misma empresa está organizando la logística para recoger los chunches, pero no crean que es por pura buena fe. El Ministerio, a través de la Dirección de Regulación de Productos de Interés Sanitario, les va a estar respirando en la nuca para asegurarse de que cumplan al pie de la letra. Ahora les toca a ellos el brete de peinar el país para que no quede ni un solo tubo a la venta, y a Salud el de fiscalizar que lo hagan bien.
Pero más allá del retiro en sí, esto nos deja pensando. Diay, ¿y ahora? Uno crece viendo los anuncios de estas marcas gigantes, confiando ciegamente en que sus productos pasaron mil y un controles de calidad. Compramos estas varas sin cuestionar, porque asumimos que son seguras. Una noticia así le mueve el piso a cualquiera. ¿Cuántos de nosotros hemos usado esa pasta sin tener idea del riesgo? ¿O cuántos habrán sentido alguna molestia y la achacaron a cualquier otra cosa, menos a la crema dental? Es una llamada de atención para no ser tan confiados y, de paso, para aplaudir que las autoridades (aunque sea replicando una alerta internacional) estén encima del tema.
En resumen: el mensaje es claro y directo. Vayan a sus baños, busquen la pasta Colgate Total Clean Mint Prevención Activa y si la tienen, mejor deséchenla. No es para jugar de alarmistas, pero como dicen, es mejor prevenir que lamentar, y en este caso, lamentar podría significar una visita de emergencia al dentista. El Ministerio de Salud ya hizo su parte al comunicar, ahora nos toca a nosotros como consumidores cuidarnos la espalda (y la boca). La confianza cuesta años en construirse y segundos en destruirse, y este despiste le va a costar caro a Colgate.
Ahora en serio, maes, más allá de correr a botar la pasta, ¿qué opinan de esta vara? ¿Les golpea la confianza en una marca tan gigante como Colgate, o les parece que es un buen gesto que al menos estén respondiendo al problema? ¡Los leo!