¡Aguántate! Parece que Álvaro Ramos, el candidato del PLN, anda buscando sabiduría ancestral... o eso parece. Resulta que el mae quiere preguntarle cositas a Laura Chinchilla, la ex presidenta, para ver cómo manejar la seguridad del país si llega a la silla de Zapote. ¿Será que le faltan ideas frescas o simplemente está tratando de capitalizar el buen paso que tuvo Doña Laura en temas de seguridad?
La movida salió a relucir en una entrevista exclusiva con Grupo Extra, precisamente en el espacio llamado 'Costa Rica Decide 2026', donde Ramos expuso sus planes de campaña. Según él, tiene una relación cordial con Chinchilla, pese a que esta última decidió dejar el partido verde y blanco hace algunos años. Trabajó con ella durante su gestión, y reconoce tenerle ‘mucha admiración y respeto’. Un clásico, vamos.
Ahora bien, entendámonos: la seguridad es el brete número uno en Costa Rica ahorita. La violencia está a todas horas, dando qué hablar. Ramos insiste que el C5 sigue siendo clave en su plan, aunque admitió que otras candidaturas también lo tienen en la mira. Él cree que la diferencia estará en la ejecución, claro, como siempre. ¡Parece que todos andan tirando la misma vaina, changui!
Lo interesante es que Ramos destacó el período en que Chinchilla fue ministra de Seguridad, mencionando que durante su administración se lograron reducir los índices de violencia. Y ahí viene el golpe: “Le digo a la gente, la última vez que se logró disminuir la violencia en Costa Rica fue en un gobierno de Liberación Nacional, el de doña Laura justamente.” No es para menos, echándole toda la responsabilidad a su predecesora, ¿verdad?
Pero, ¿qué tan efectiva será esta estrategia? Algunos analistas políticos opinan que es una jugada inteligente para recuperar votantes moderados, especialmente aquellos que recuerdan con cariño la época de Chinchilla, considerada por muchos una líder firme y decidida en temas de seguridad. Otros dicen que es un reconocimiento implícito de que Ramos necesita ayuda experta en el tema. Al final, la vara está puesta y ahora toca ver si realmente puede aportar algo nuevo.
Además, Ramos enfatizó que, más allá de quién haya propuesto primero las ideas, le alegra que haya consenso entre los diferentes partidos políticos en materia de seguridad. “Es como cuando uno va donde el doctor y el doctor siempre dice: haga dieta y haga ejercicio. La receta casi nunca cambia”. Un chiste tico, básicamente: todo el mundo dice lo mismo, pero nadie aplica como debería.
Aunque suena bonito todo esto del consenso, la realidad es que la ciudadanía está harta de promesas vacías. Queremos ver hechos concretos, resultados tangibles. Que nos digan cómo van a combatir el narcotráfico, el crimen organizado y la creciente sensación de inseguridad que vivimos día tras día. Porque al final, lo único que le interesa al pueblo es sentirse seguro en su propia casa y en las calles.
En fin, veremos cómo se desarrolla esta colaboración entre Ramos y Chinchilla. Una cosa es segura: la polémica está servida. Considerando esta búsqueda de consejo, y teniendo en cuenta la actual situación de seguridad nacional, ¿creen que Álvaro Ramos está tomando la decisión correcta al buscar la asesoría de Laura Chinchilla, o sería preferible enfocarse en nuevas ideas y enfoques?
La movida salió a relucir en una entrevista exclusiva con Grupo Extra, precisamente en el espacio llamado 'Costa Rica Decide 2026', donde Ramos expuso sus planes de campaña. Según él, tiene una relación cordial con Chinchilla, pese a que esta última decidió dejar el partido verde y blanco hace algunos años. Trabajó con ella durante su gestión, y reconoce tenerle ‘mucha admiración y respeto’. Un clásico, vamos.
Ahora bien, entendámonos: la seguridad es el brete número uno en Costa Rica ahorita. La violencia está a todas horas, dando qué hablar. Ramos insiste que el C5 sigue siendo clave en su plan, aunque admitió que otras candidaturas también lo tienen en la mira. Él cree que la diferencia estará en la ejecución, claro, como siempre. ¡Parece que todos andan tirando la misma vaina, changui!
Lo interesante es que Ramos destacó el período en que Chinchilla fue ministra de Seguridad, mencionando que durante su administración se lograron reducir los índices de violencia. Y ahí viene el golpe: “Le digo a la gente, la última vez que se logró disminuir la violencia en Costa Rica fue en un gobierno de Liberación Nacional, el de doña Laura justamente.” No es para menos, echándole toda la responsabilidad a su predecesora, ¿verdad?
Pero, ¿qué tan efectiva será esta estrategia? Algunos analistas políticos opinan que es una jugada inteligente para recuperar votantes moderados, especialmente aquellos que recuerdan con cariño la época de Chinchilla, considerada por muchos una líder firme y decidida en temas de seguridad. Otros dicen que es un reconocimiento implícito de que Ramos necesita ayuda experta en el tema. Al final, la vara está puesta y ahora toca ver si realmente puede aportar algo nuevo.
Además, Ramos enfatizó que, más allá de quién haya propuesto primero las ideas, le alegra que haya consenso entre los diferentes partidos políticos en materia de seguridad. “Es como cuando uno va donde el doctor y el doctor siempre dice: haga dieta y haga ejercicio. La receta casi nunca cambia”. Un chiste tico, básicamente: todo el mundo dice lo mismo, pero nadie aplica como debería.
Aunque suena bonito todo esto del consenso, la realidad es que la ciudadanía está harta de promesas vacías. Queremos ver hechos concretos, resultados tangibles. Que nos digan cómo van a combatir el narcotráfico, el crimen organizado y la creciente sensación de inseguridad que vivimos día tras día. Porque al final, lo único que le interesa al pueblo es sentirse seguro en su propia casa y en las calles.
En fin, veremos cómo se desarrolla esta colaboración entre Ramos y Chinchilla. Una cosa es segura: la polémica está servida. Considerando esta búsqueda de consejo, y teniendo en cuenta la actual situación de seguridad nacional, ¿creen que Álvaro Ramos está tomando la decisión correcta al buscar la asesoría de Laura Chinchilla, o sería preferible enfocarse en nuevas ideas y enfoques?
