¡Ay, Dios mío! Aquí vamos de nuevo con el tema de las pensiones. Parece que nunca terminamos de lidiar con esto. Resulta que la CCSS anda tramitando una nueva reforma al Régimen IVM, la cual esperan meterle mano en el 2026. No sé ustedes, pero a mí me suena a que nos quieren echar otro brete encima.
Según Jaime Barrantes, el gerente de Pensiones de la CCSS, la idea es ajustar cómo pagamos todos – empleados, empleadores – y también revisar cuánto le toca a la gente cuando se jubila, medida esa que llaman tasa de reemplazo. Pero ojo, ahí dicen que no van a tocar la edad de jubilación, porque eso ya lo hicieron hace poco. Uno piensa, ¿será que realmente van a dejar eso así?
Pero la cosa se complica aún más, ¿eh? Porque resulta que ahora algunos quieren cambiar las reglas del juego con el ROPC, ese fondo complementario que muchos tenemos. Hay proyectos de ley dando vueltas que podrían permitir sacar todo el dinero de ahí. ¡Imagínense qué barbaridad sería! Si eso pasa, nos tocará aumentar las cotizaciones al IVM como mínimo un 16%… ¡o hasta un 20%! Diay, uno ya ni sabe qué pensar.
Roger Porras, presidente de Acop, la asociación de operadoras de pensiones, nos dice que, según los estudios, para el 2047 el sistema empezará a usar sus ahorros para pagar las pensiones. Eso, mis panas, es ponerle parche a la llaga. Necesitamos empezar a discutir esto con cabeza fría, como decía Porras, pero parece que ya es demasiado tarde... o no.
Y no es solamente la opinión de Porras. El economista Ronulfo Jiménez, de la UCR, también nos avisa que hay que apurarnos porque la población está envejeciendo rapidito. Dice que tendremos que aumentar las contribuciones, subir la edad de jubilación e incluso bajar el monto de la pensión. Un panorama feo, ¿verdad? Que carga!
Gregory Quirós, gerente de Vida Plena Pensiones, tampoco se queda callado. Nos recuerda que ahora que estamos en plena campaña electoral, hay que estar pendientes de lo que prometen los candidatos. A ver si alguien sale con una propuesta sensata para abordar este tema de frente, y no como una simple promesa vacía. Porque, vamos a ser honestos, nadie quiere quedar mal en las elecciones, pero necesitamos soluciones reales.
Y para rematar, a partir del próximo año, tanto los empleados como los patrones tendrán que aportar un poquito más al IVM. Son apenas unos porcentajes pequeños – 0,32% distribuidos entre ambos – pero bueno, cada grano de arena cuenta, dicen. La contribución patronal sube del 5,42% al 5,58%, y la de los trabajadores del 4,17% al 4,33%. Una paja, pero bueno, mejor algo que nada, supongo.
En fin, señores, este tema de las pensiones sigue siendo una verdadera incógnita. Con tanta reforma, cambio de leyes y promesas políticas, uno no sabe si estamos avanzando o retrocediendo. ¿Será que realmente podemos construir un sistema de pensiones sostenible para las futuras generaciones, o estamos condenados a repetir la misma ‘torta’ una y otra vez? ¿Cuál creen que debería ser la solución más viable para asegurar un futuro digno para nuestros adultos mayores?
Según Jaime Barrantes, el gerente de Pensiones de la CCSS, la idea es ajustar cómo pagamos todos – empleados, empleadores – y también revisar cuánto le toca a la gente cuando se jubila, medida esa que llaman tasa de reemplazo. Pero ojo, ahí dicen que no van a tocar la edad de jubilación, porque eso ya lo hicieron hace poco. Uno piensa, ¿será que realmente van a dejar eso así?
Pero la cosa se complica aún más, ¿eh? Porque resulta que ahora algunos quieren cambiar las reglas del juego con el ROPC, ese fondo complementario que muchos tenemos. Hay proyectos de ley dando vueltas que podrían permitir sacar todo el dinero de ahí. ¡Imagínense qué barbaridad sería! Si eso pasa, nos tocará aumentar las cotizaciones al IVM como mínimo un 16%… ¡o hasta un 20%! Diay, uno ya ni sabe qué pensar.
Roger Porras, presidente de Acop, la asociación de operadoras de pensiones, nos dice que, según los estudios, para el 2047 el sistema empezará a usar sus ahorros para pagar las pensiones. Eso, mis panas, es ponerle parche a la llaga. Necesitamos empezar a discutir esto con cabeza fría, como decía Porras, pero parece que ya es demasiado tarde... o no.
Y no es solamente la opinión de Porras. El economista Ronulfo Jiménez, de la UCR, también nos avisa que hay que apurarnos porque la población está envejeciendo rapidito. Dice que tendremos que aumentar las contribuciones, subir la edad de jubilación e incluso bajar el monto de la pensión. Un panorama feo, ¿verdad? Que carga!
Gregory Quirós, gerente de Vida Plena Pensiones, tampoco se queda callado. Nos recuerda que ahora que estamos en plena campaña electoral, hay que estar pendientes de lo que prometen los candidatos. A ver si alguien sale con una propuesta sensata para abordar este tema de frente, y no como una simple promesa vacía. Porque, vamos a ser honestos, nadie quiere quedar mal en las elecciones, pero necesitamos soluciones reales.
Y para rematar, a partir del próximo año, tanto los empleados como los patrones tendrán que aportar un poquito más al IVM. Son apenas unos porcentajes pequeños – 0,32% distribuidos entre ambos – pero bueno, cada grano de arena cuenta, dicen. La contribución patronal sube del 5,42% al 5,58%, y la de los trabajadores del 4,17% al 4,33%. Una paja, pero bueno, mejor algo que nada, supongo.
En fin, señores, este tema de las pensiones sigue siendo una verdadera incógnita. Con tanta reforma, cambio de leyes y promesas políticas, uno no sabe si estamos avanzando o retrocediendo. ¿Será que realmente podemos construir un sistema de pensiones sostenible para las futuras generaciones, o estamos condenados a repetir la misma ‘torta’ una y otra vez? ¿Cuál creen que debería ser la solución más viable para asegurar un futuro digno para nuestros adultos mayores?
