Ay, Dios mío, qué despiche nos espera este diciembre. Con las fiestas a toda marcha y la gente recibiendo visita, los robachicos se han puesto bien activos, dejando a muchos dueños de casa temblando en sus botas. Parece que este año, aprovecharse del descuido se les puso fácil, fácil.
Según el Organismo de Investigación Judicial (OIJ), los robos a viviendas han aumentado considerablemente en comparación con años anteriores. No es para sorprenderse mucho, pues con tanta rumba y reunión familiar, la atención se dispersa y las oportunidades para los delincuentes se multiplican. Han metido manos a hurto, tacha, hasta asalto directo, lo que demuestra que no andan jugando.
Douglas Rodríguez, jefe de la unidad de investigación de la Sección de Robos del OIJ, nos soltó que la modalidad más común es la de “invitados” o aprovechaos. Imagínate, llegan como si fueran pan comido a una pedida de mano o a una cena de Navidad, y en un abrir y cerrar de ojos, te quitan el celular o, peor aún, las tarjetas de crédito y débito. ¡Qué carga!
Y ahí va la estocada final: usan esas tarjetas para hacer compras en diferentes tiendas, dejándote en la ruina. No es broma, mae. Esto demuestra que hay que estar muy atentos y no bajar la guardia ni un segundo, aunque sea tu propia familia quien esté visitando. Mejor prevenir que lamentar, dicen por ahí.
Pero ojo, no todo está perdido. El OIJ hace un llamado urgente a denunciar cualquier caso, por pequeño que parezca. ¿Por qué? Porque esa información sirve para crear esos mapas de calor delictivos, identificar a las bandas que andan merodeando y enfocar los operativos policiales. Cada reporte cuenta, así que no te quedes callado si ves algo raro.
Además, la institución recomienda invertir en seguridad, y no precisamente en aparatos costosos. Unas cámaras de video básicas, unos sensores de movimiento, reforzar las cerraduras y los portones…todo eso ayuda a disuadir a los delincuentes y facilita la investigación policial en caso de que ocurra algo. Mejor gastarle unos lulos a la seguridad que tener que pagarle a un abogado por recuperar lo que te robaron.
Lo más preocupante es que también se han reportado falsos allanamientos. Imagínate, llegan tipo policía, con chalecos y placas falsas, haciéndose pasar por agentes del OIJ para meterse a tu casa. Ahí sí que debes mantener la calma y priorizar tu seguridad personal. Lo primero es no enfrentarlos y tratar de averiguar quiénes son realmente. ¡Qué torta!
Así que, vamos a ponerle pausa a la confianza ciega, a revisar las medidas de seguridad y a estar siempre alerta. Este diciembre, más que celebrar, debemos proteger nuestros hogares y evitar convertirnos en víctimas de estos oportunistas. ¿Ustedes creen que debería haber campañas más agresivas de concientización sobre esto, o piensa que la responsabilidad recae principalmente en cada dueño de casa?
Según el Organismo de Investigación Judicial (OIJ), los robos a viviendas han aumentado considerablemente en comparación con años anteriores. No es para sorprenderse mucho, pues con tanta rumba y reunión familiar, la atención se dispersa y las oportunidades para los delincuentes se multiplican. Han metido manos a hurto, tacha, hasta asalto directo, lo que demuestra que no andan jugando.
Douglas Rodríguez, jefe de la unidad de investigación de la Sección de Robos del OIJ, nos soltó que la modalidad más común es la de “invitados” o aprovechaos. Imagínate, llegan como si fueran pan comido a una pedida de mano o a una cena de Navidad, y en un abrir y cerrar de ojos, te quitan el celular o, peor aún, las tarjetas de crédito y débito. ¡Qué carga!
Y ahí va la estocada final: usan esas tarjetas para hacer compras en diferentes tiendas, dejándote en la ruina. No es broma, mae. Esto demuestra que hay que estar muy atentos y no bajar la guardia ni un segundo, aunque sea tu propia familia quien esté visitando. Mejor prevenir que lamentar, dicen por ahí.
Pero ojo, no todo está perdido. El OIJ hace un llamado urgente a denunciar cualquier caso, por pequeño que parezca. ¿Por qué? Porque esa información sirve para crear esos mapas de calor delictivos, identificar a las bandas que andan merodeando y enfocar los operativos policiales. Cada reporte cuenta, así que no te quedes callado si ves algo raro.
Además, la institución recomienda invertir en seguridad, y no precisamente en aparatos costosos. Unas cámaras de video básicas, unos sensores de movimiento, reforzar las cerraduras y los portones…todo eso ayuda a disuadir a los delincuentes y facilita la investigación policial en caso de que ocurra algo. Mejor gastarle unos lulos a la seguridad que tener que pagarle a un abogado por recuperar lo que te robaron.
Lo más preocupante es que también se han reportado falsos allanamientos. Imagínate, llegan tipo policía, con chalecos y placas falsas, haciéndose pasar por agentes del OIJ para meterse a tu casa. Ahí sí que debes mantener la calma y priorizar tu seguridad personal. Lo primero es no enfrentarlos y tratar de averiguar quiénes son realmente. ¡Qué torta!
Así que, vamos a ponerle pausa a la confianza ciega, a revisar las medidas de seguridad y a estar siempre alerta. Este diciembre, más que celebrar, debemos proteger nuestros hogares y evitar convertirnos en víctimas de estos oportunistas. ¿Ustedes creen que debería haber campañas más agresivas de concientización sobre esto, o piensa que la responsabilidad recae principalmente en cada dueño de casa?