¡Ay, Dios mío! Quién lo diría, el candidato presidencial del PUSC, Juan Carlos Hidalgo, se mandó una bronca tremenda. Resulta que echó de patitas altas a cinco diputados de su campaña – Melina Ajoy, María Marta Carballo, Carlos Andrés Robles, Horacio Alvarado y Leslye Bojorges – por no apoyar levantarle el fuero al presidente Chaves. ¡Imagínate el cachivache!
Todo esto viene de atrás, ¿eh? La Corte Suprema de Justicia pidió levantarle el fuero a Don Rodri, y Hidalgo le pidió a la bancada que lo apoyara. Pero estos diputados decidieron hacerle bolas y no le dieron el visto bueno. Ahora, Hidalgo, en plan de agarrarle la ley por su mano, los mandó a volar. ¡Un despique, te digo!
Y ni hablar de cómo reaccionaron los diputados. Algunos, como Alvarado, dijeron que no les importaba porque fueron despedidos y punto. Otros, como Melina Ajoy, se mostraron más críticos, diciendo que supongo que a la campaña ya no le hacen falta sus votos. ¡Ya ven, pura chinamanería!
Pero el que realmente salió con todo fue Leslye Bojorges. El mae no se anda con rodeos y le tiró duro a Hidalgo, diciendo que es el peor candidato que ha tenido el PUSC en toda su historia. Lo acusó de tomar decisiones equivocadas, como echar a gente que son pilares en sus territorios. ¡Qué nivel de gallos! Parece que se les metió el demonio.
Para colmo, algunos dirigentes del PUSC en Coto Brus y Limón también le retiraron el apoyo a Hidalgo, y ahora andan pensando en darle su respaldo a Laura Fernández de Pueblo Soberano. ¡Esto se puso más caliente que chile criollo! Se ve que la cosa no pinta nada bonita para el PUSC en estas elecciones.
Y ahí entra otro rollo: aunque los diputados estén afuera de la campaña, dicen que en la papeleta a diputados sí van a apoyar al partido. ¡Qué cosas, eh! Lealtad dividida a morir. Uno, Horacio Alvarado, hasta ofreció trabajar por mantener la curul que consiguió el año pasado, y Paola Sáenz lo apoya a full. A ver qué onda con eso…
Ahora, Hidalgo intenta restarle importancia a todo esto, diciendo que están enfocados en conectar con la gente y que hay nuevos liderazgos en el partido. Habla de emparejar la cancha y ofrecer oportunidades a todos. Pero la verdad es que parece que se le está escapando el control de la situación. ¡Qué brocha, la política!
Después de tanta controversia, salidas y cambios de bando, me pregunto: ¿Crees que esta purga dentro del PUSC le hará daño a largo plazo a la campaña de Hidalgo, o simplemente es un tropiezo más en medio del camino hacia las elecciones? ¿Será que el PUSC está perdiendo terreno frente a otros partidos, o aún tienen oportunidad de remontar?
Todo esto viene de atrás, ¿eh? La Corte Suprema de Justicia pidió levantarle el fuero a Don Rodri, y Hidalgo le pidió a la bancada que lo apoyara. Pero estos diputados decidieron hacerle bolas y no le dieron el visto bueno. Ahora, Hidalgo, en plan de agarrarle la ley por su mano, los mandó a volar. ¡Un despique, te digo!
Y ni hablar de cómo reaccionaron los diputados. Algunos, como Alvarado, dijeron que no les importaba porque fueron despedidos y punto. Otros, como Melina Ajoy, se mostraron más críticos, diciendo que supongo que a la campaña ya no le hacen falta sus votos. ¡Ya ven, pura chinamanería!
Pero el que realmente salió con todo fue Leslye Bojorges. El mae no se anda con rodeos y le tiró duro a Hidalgo, diciendo que es el peor candidato que ha tenido el PUSC en toda su historia. Lo acusó de tomar decisiones equivocadas, como echar a gente que son pilares en sus territorios. ¡Qué nivel de gallos! Parece que se les metió el demonio.
Para colmo, algunos dirigentes del PUSC en Coto Brus y Limón también le retiraron el apoyo a Hidalgo, y ahora andan pensando en darle su respaldo a Laura Fernández de Pueblo Soberano. ¡Esto se puso más caliente que chile criollo! Se ve que la cosa no pinta nada bonita para el PUSC en estas elecciones.
Y ahí entra otro rollo: aunque los diputados estén afuera de la campaña, dicen que en la papeleta a diputados sí van a apoyar al partido. ¡Qué cosas, eh! Lealtad dividida a morir. Uno, Horacio Alvarado, hasta ofreció trabajar por mantener la curul que consiguió el año pasado, y Paola Sáenz lo apoya a full. A ver qué onda con eso…
Ahora, Hidalgo intenta restarle importancia a todo esto, diciendo que están enfocados en conectar con la gente y que hay nuevos liderazgos en el partido. Habla de emparejar la cancha y ofrecer oportunidades a todos. Pero la verdad es que parece que se le está escapando el control de la situación. ¡Qué brocha, la política!
Después de tanta controversia, salidas y cambios de bando, me pregunto: ¿Crees que esta purga dentro del PUSC le hará daño a largo plazo a la campaña de Hidalgo, o simplemente es un tropiezo más en medio del camino hacia las elecciones? ¿Será que el PUSC está perdiendo terreno frente a otros partidos, o aún tienen oportunidad de remontar?