¡Ay, Dios mío! Aquí vamos otra vez con los debates que nunca terminan. Esta vez, la polémica se centra en los tuk tuks, esos triciclos motorizados que se han convertido en un símbolo de muchos pueblos turísticos, pero que ahora tienen a Canatrans y a la diputada Rosalía Brown Young discutiendo a quién le toca ponerle candado. Parece que esto va pa’ largo, mae.
La jugada, según parece, es un expediente presentado en la Asamblea Legislativa que busca darle un marco legal a estos vehículos. El nombre completo es una boca, literalmente: “Adición de un inciso 121 al artículo 2 y adición de un artículo 48 bis de la Ley de Tránsito por Vías Públicas Terrestres y Seguridad Vial, N.° 9078, del 4 de octubre de 2012, y sus reformas, para la regulación de los Tuk Tuks”. En resumen, quieren dejar claro cómo y dónde pueden andar estos aparatos.
Pero Silvia Bolaños, la jefa de Canatrans, no anda muy contenta con la idea. Ella dice que esto es como meterle agua fría al sector del transporte público, que ya está batallando con la pandemia, los aplicativos y un montón de cosas más. Según ella, legalizar los tuk tuks sería como abrirle la puerta a la competencia desleal y poner en riesgo la seguridad de todos. "Es un grave retroceso", soltó, y vaya si lo dijo, porque la tensión se palpaba a metros.
Y es que hay que entender que los taxistas y transportistas formales tienen que cumplir un montón de normas, invertir en mantenimientos, pagar seguros... todo el rollo. Con los tuk tuks, parece que eso no aplica tanto, y ahí es donde la señora Bolaños ve el problema. Dice que algunos ni siquiera tienen los requisitos mínimos de seguridad, y que los seguros no cubren bien los accidentes. ¡Imagínate la bronca si pasa algo!
Pero la diputada Brown Young no se quedó callada. Ella argumenta que, aunque respeta las opiniones de todos, cree que el proyecto es bueno para ordenar el servicio y darle tranquilidad a las familias que dependen de él. “No es un retroceso, es una solución”, afirmó contundentemente. Además, señaló que en muchas zonas rurales y costeras, donde el transporte público no llega, los tuk tuks son la única opción para moverse. ¡Eso sí que es un brete para la gente!
La diputada también hizo hincapié en que la ley establece requisitos obligatorios, límites de velocidad y supervisión estatal, así que no es como si fuera a haber tuk tuks volando por doquier. “Fortalece la seguridad vial”, insistió, “y brinda soluciones donde más se necesitan”. Parece que tiene mucha fe en el proyecto, y espera que los legisladores le den luz verde. ¡A ver qué sale de esto!
Ahora mismo, el expediente está en manos del Plenario Legislativo, esperando su turno para ser debatido y votado. Lo que queda por verse es si prevalecerá el argumento de la seguridad y la regulación, o el temor a afectar al sector del transporte público establecido. Esto promete ser un debate interesante, lleno de pasiones y argumentos encontrados, como casi todas las veces que se tocan temas que afectan el bolsillo de la gente.
Y colorín colorado, este cuento ha terminado… pero la controversia apenas comienza. ¿Ustedes creen que es justo regular los tuk tuks, o deberían dejarlos operar como hasta ahora, asumiendo los riesgos? ¡Déjenme saber su opinión en los comentarios, pura vida!
La jugada, según parece, es un expediente presentado en la Asamblea Legislativa que busca darle un marco legal a estos vehículos. El nombre completo es una boca, literalmente: “Adición de un inciso 121 al artículo 2 y adición de un artículo 48 bis de la Ley de Tránsito por Vías Públicas Terrestres y Seguridad Vial, N.° 9078, del 4 de octubre de 2012, y sus reformas, para la regulación de los Tuk Tuks”. En resumen, quieren dejar claro cómo y dónde pueden andar estos aparatos.
Pero Silvia Bolaños, la jefa de Canatrans, no anda muy contenta con la idea. Ella dice que esto es como meterle agua fría al sector del transporte público, que ya está batallando con la pandemia, los aplicativos y un montón de cosas más. Según ella, legalizar los tuk tuks sería como abrirle la puerta a la competencia desleal y poner en riesgo la seguridad de todos. "Es un grave retroceso", soltó, y vaya si lo dijo, porque la tensión se palpaba a metros.
Y es que hay que entender que los taxistas y transportistas formales tienen que cumplir un montón de normas, invertir en mantenimientos, pagar seguros... todo el rollo. Con los tuk tuks, parece que eso no aplica tanto, y ahí es donde la señora Bolaños ve el problema. Dice que algunos ni siquiera tienen los requisitos mínimos de seguridad, y que los seguros no cubren bien los accidentes. ¡Imagínate la bronca si pasa algo!
Pero la diputada Brown Young no se quedó callada. Ella argumenta que, aunque respeta las opiniones de todos, cree que el proyecto es bueno para ordenar el servicio y darle tranquilidad a las familias que dependen de él. “No es un retroceso, es una solución”, afirmó contundentemente. Además, señaló que en muchas zonas rurales y costeras, donde el transporte público no llega, los tuk tuks son la única opción para moverse. ¡Eso sí que es un brete para la gente!
La diputada también hizo hincapié en que la ley establece requisitos obligatorios, límites de velocidad y supervisión estatal, así que no es como si fuera a haber tuk tuks volando por doquier. “Fortalece la seguridad vial”, insistió, “y brinda soluciones donde más se necesitan”. Parece que tiene mucha fe en el proyecto, y espera que los legisladores le den luz verde. ¡A ver qué sale de esto!
Ahora mismo, el expediente está en manos del Plenario Legislativo, esperando su turno para ser debatido y votado. Lo que queda por verse es si prevalecerá el argumento de la seguridad y la regulación, o el temor a afectar al sector del transporte público establecido. Esto promete ser un debate interesante, lleno de pasiones y argumentos encontrados, como casi todas las veces que se tocan temas que afectan el bolsillo de la gente.
Y colorín colorado, este cuento ha terminado… pero la controversia apenas comienza. ¿Ustedes creen que es justo regular los tuk tuks, o deberían dejarlos operar como hasta ahora, asumiendo los riesgos? ¡Déjenme saber su opinión en los comentarios, pura vida!