¡Ay, Dios mío! Esto se puso interesante, ¿eh? Resulta que Constantino Urcuyo, el profe de Laura Fernández y figura histórica en política nacional, anda diciendo que no tiene ni idea de haberse echado un cafecito con Óscar Arias y la propia Fernández. ¡Una verdadera novela!
Todo este relajo empezó porque Fernández, en medio de una conferencia de prensa para hablar de un supuesto espionaje en su oficina – ¡qué situación! –, contó cómo Urcuyo, siendo su profesor, le ofreció ir a tomar café con el expresidente Arias a cambio de sacar la mejor nota en el curso. Según ella, esto pasó hace “más de 15 años”. Parece sacado de una telenovela, pero así andamos.
Para ponerle pausa al asunto, Urcuyo salió a negar la versión de Fernández. El hombre, que fue diputado por el PLN y ha sido profesor universitario durante 44 años dando vueltas, declaró a *El Observador* que no recuerda absolutamente nada de ese encuentro. Dice que sí reconoce a Fernández como alumna suya, pero el café con Arias... ¡ni modo, ni pedazo! Este señor lleva experiencia, pues ha visto pasar por sus aulas a figuras como Laura Chinchilla, Max Esquivel e incluso Hugo Picado, a quienes sí recuerda con cariño. ¡Imagínate la cantidad de historias que tendrá guardadas!
Urcuyo, con toda la calma del mundo, explicó que en sus casi cuatro décadas enseñando en la UCR, estima haber tenido más de mil estudiantes. Dijo que es posible que la señora Fernández haya sido una de ellos, seguramente en el programa de Maestría en Gobierno y Políticas Públicas. Pero insistió: la anécdota del café con Arias es pura invención. ¡Un bronca que se armó!
Lo curioso de todo este caso es la fotografía que circula por redes sociales, donde se ve a Fernández sentada junto a Arias. Ahí parece que sí hubo un encuentro, pero Urcuyo niega rotundamente haber sido el puente entre ambos. Ahora la gente se pregunta: ¿quién está mintiendo? ¿Fue una confusión de memoria, una exageración para darle sabor a la historia, o hay algo más detrás?
Pero la cosa no termina ahí. Urcuyo también recordó a otras personalidades que pasaron por sus aulas, incluyendo momentos especiales como cuando invitó al entonces presidente José Figueres Ferrer a conversar con sus estudiantes sobre los hechos del ’48. Ese brete, según contó, fue autorizado por el Consejo Universitario y resultó en una dirección de tesis para la profesora Sandra Piszk. ¡Un recorrido impresionante de gente importante que tuvo el privilegio de aprender de este hombre!
Entre tanto, Fernández sigue defendiéndose de las acusaciones de utilizar la imagen de Arias para fines políticos. Asegura que la foto es antigua y que han manipulado videos y publicaciones para difamarla. ¡Un lío tremendo, vamos! Esta controversia ha puesto bajo la lupa la credibilidad de ambos personajes y ha generado un debate encendido sobre la veracidad de los recuerdos y la influencia de la política en nuestra sociedad. ¿Será que la memoria nos juega malas pasas o estamos ante una estrategia más maquiavélica?
Y tú, ¿qué piensas? ¿Crees que Urcuyo está diciendo la verdad, o es que Fernández está tratando de capitalizar políticamente esta conexión con Arias? ¿Te parece que este tipo de polémicas afecta la calidad del debate electoral en nuestro país, o simplemente es parte del juego político? ¡Déjanos tus comentarios en el foro!
Todo este relajo empezó porque Fernández, en medio de una conferencia de prensa para hablar de un supuesto espionaje en su oficina – ¡qué situación! –, contó cómo Urcuyo, siendo su profesor, le ofreció ir a tomar café con el expresidente Arias a cambio de sacar la mejor nota en el curso. Según ella, esto pasó hace “más de 15 años”. Parece sacado de una telenovela, pero así andamos.
Para ponerle pausa al asunto, Urcuyo salió a negar la versión de Fernández. El hombre, que fue diputado por el PLN y ha sido profesor universitario durante 44 años dando vueltas, declaró a *El Observador* que no recuerda absolutamente nada de ese encuentro. Dice que sí reconoce a Fernández como alumna suya, pero el café con Arias... ¡ni modo, ni pedazo! Este señor lleva experiencia, pues ha visto pasar por sus aulas a figuras como Laura Chinchilla, Max Esquivel e incluso Hugo Picado, a quienes sí recuerda con cariño. ¡Imagínate la cantidad de historias que tendrá guardadas!
Urcuyo, con toda la calma del mundo, explicó que en sus casi cuatro décadas enseñando en la UCR, estima haber tenido más de mil estudiantes. Dijo que es posible que la señora Fernández haya sido una de ellos, seguramente en el programa de Maestría en Gobierno y Políticas Públicas. Pero insistió: la anécdota del café con Arias es pura invención. ¡Un bronca que se armó!
Lo curioso de todo este caso es la fotografía que circula por redes sociales, donde se ve a Fernández sentada junto a Arias. Ahí parece que sí hubo un encuentro, pero Urcuyo niega rotundamente haber sido el puente entre ambos. Ahora la gente se pregunta: ¿quién está mintiendo? ¿Fue una confusión de memoria, una exageración para darle sabor a la historia, o hay algo más detrás?
Pero la cosa no termina ahí. Urcuyo también recordó a otras personalidades que pasaron por sus aulas, incluyendo momentos especiales como cuando invitó al entonces presidente José Figueres Ferrer a conversar con sus estudiantes sobre los hechos del ’48. Ese brete, según contó, fue autorizado por el Consejo Universitario y resultó en una dirección de tesis para la profesora Sandra Piszk. ¡Un recorrido impresionante de gente importante que tuvo el privilegio de aprender de este hombre!
Entre tanto, Fernández sigue defendiéndose de las acusaciones de utilizar la imagen de Arias para fines políticos. Asegura que la foto es antigua y que han manipulado videos y publicaciones para difamarla. ¡Un lío tremendo, vamos! Esta controversia ha puesto bajo la lupa la credibilidad de ambos personajes y ha generado un debate encendido sobre la veracidad de los recuerdos y la influencia de la política en nuestra sociedad. ¿Será que la memoria nos juega malas pasas o estamos ante una estrategia más maquiavélica?
Y tú, ¿qué piensas? ¿Crees que Urcuyo está diciendo la verdad, o es que Fernández está tratando de capitalizar políticamente esta conexión con Arias? ¿Te parece que este tipo de polémicas afecta la calidad del debate electoral en nuestro país, o simplemente es parte del juego político? ¡Déjanos tus comentarios en el foro!