#Reseña
Chica: Esmeralda.
El pasado 31 de diciembre, para cerrar el año como se debía, me fui a visitar a esta mujer, la verdad que me mande por las diferentes referencias y buenas reseñas que dejaban sobre ella.
Lugar: bonito, seguro y discreto, la habitación con ducha y en muy buena presentación.
Atención y servicio: La guila es muy buena gente y se esmera porque uno la pase bien, es una completa perra en el buen sentido de la palabra, le pague la hora completa, la guila se pega la bate y hay que agarrarse para no venirse a la primera, la mae la ensaliva, se la mete toda, la escupe, bueno que no hace con esa boca, en la culiada ay papá que buena que es, a los que les gusta que las guilas griten y le digan varas sucias esta es la indicada, nada más rico que agarrarla y darle de cuatro bien duro, al final me le regué en la boca, cosa más deliciosa.
En fin, toca repetir y al que no ha ido, vaya sin miedo.
Saludos lecheros.