¡Ay, patético! El país entero está de luto este jueves luego de conocer la partida de Ericka Benavides, una mujer que dejó huella tanto en la política como en el corazón de quienes la conocieron. La asesora legislativa y candidata a diputada por San José del PLP, falleció producto de un terrible accidente en Buenos Aires de Palmares, dejando un vacío imposible de llenar, especialmente en su familia.
La tragedia ocurrió mientras Ericka viajaba junto al diputado Eliécer Feinzaig Mintz y otra persona, cuando el vehículo en el que iban chocó contra un camión. Aunque Feinzaig sufrió heridas leves y se encuentra fuera de peligro en el Hospital Metropolitano, el estado de salud de Ericka era crítico y finalmente no pudo superar las lesiones. El conductor del vehículo, lamentablemente, también se encuentra en condición delicada en el Hospital México, según confirmó la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS). Qué desmadre, realmente…
Pero más allá de la figura pública, Ericka era una madre ejemplar, así lo expresó con el alma en vilo su hijo, Álvaro Artavia Benavides, en declaraciones a La Teja. Entre lágrimas y fértiles recuerdos, él la describió como “la mejor mamá del mundo”, una mujer luchadora que superó un cáncer hace siete años y siempre estuvo dispuesta a ayudar a los demás. Un linfoma de Hodgkin que venció, creyendo que la vida tenía mucho más que ofrecerle, para que terminara así…
Álvaro contó que la noticia lo golpeó duramente justo cuando estaba a punto de abordar un vuelo hacia Panamá. Gracias a la rápida respuesta del personal de Avianca, pudieron detener el avión a tiempo para que pudiera recibir la devastadora noticia. Imagínate el susto, tener que bajarte corriendo del avión para enfrentarte a semejante dolor. ¡Un brete, we!
Lo que más resalta de la historia de Ericka es su temple inquebrantable y su profunda espiritualidad. Terminó su carrera en Derecho recientemente y anhelaba servir a Costa Rica desde la Asamblea Legislativa. Estaba llena de ilusiones, buscando representar al pueblo josefino durante el período 2026-2030. Su compromiso político era evidente, y su dedicación al servicio público, incuestionable. Era pura vara buena, sin duda alguna.
El Partido Liberal Progresista suspendió todas sus actividades en señal de duelo, reconociendo la valiosa contribución de Ericka. Sus compañeros la recuerdan como una persona comprometida, apasionada por el derecho y con un espíritu solidario. Uno de esos personajes que deja un legado imborrable, no por cargos ostentados, sino por la calidad humana que irradiaba. Realmente nos deja una gran pena, eh.
Más allá de las causas del fatal accidente – que ya están siendo investigadas a fondo por las autoridades correspondientes – queda claro que Costa Rica ha perdido una pieza valiosa. Eliécer Feinzaig, pese a sus heridas, ha manifestado su profundo pesar por la pérdida de su colega y amiga, reafirmando el compañerismo que existía entre ambos. En estos momentos, lo importante es brindar apoyo a la familia de Ericka y honrar su memoria, recordándola como la mujer íntegra y servicial que fue.
Este acontecimiento nos invita a reflexionar sobre la fragilidad de la vida y la importancia de valorar cada momento. Nos recuerda que debemos aprovechar al máximo el tiempo que tenemos con nuestros seres queridos y vivir cada día con intensidad y gratitud. Ahora bien, viendo la rapidez con la que sucedieron los hechos, y considerando las investigaciones preliminares sobre el accidente, ¿creen que las autoridades deberían revisar y reforzar las medidas de seguridad en las carreteras, especialmente en puntos críticos como Buenos Aires de Palmares?
La tragedia ocurrió mientras Ericka viajaba junto al diputado Eliécer Feinzaig Mintz y otra persona, cuando el vehículo en el que iban chocó contra un camión. Aunque Feinzaig sufrió heridas leves y se encuentra fuera de peligro en el Hospital Metropolitano, el estado de salud de Ericka era crítico y finalmente no pudo superar las lesiones. El conductor del vehículo, lamentablemente, también se encuentra en condición delicada en el Hospital México, según confirmó la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS). Qué desmadre, realmente…
Pero más allá de la figura pública, Ericka era una madre ejemplar, así lo expresó con el alma en vilo su hijo, Álvaro Artavia Benavides, en declaraciones a La Teja. Entre lágrimas y fértiles recuerdos, él la describió como “la mejor mamá del mundo”, una mujer luchadora que superó un cáncer hace siete años y siempre estuvo dispuesta a ayudar a los demás. Un linfoma de Hodgkin que venció, creyendo que la vida tenía mucho más que ofrecerle, para que terminara así…
Álvaro contó que la noticia lo golpeó duramente justo cuando estaba a punto de abordar un vuelo hacia Panamá. Gracias a la rápida respuesta del personal de Avianca, pudieron detener el avión a tiempo para que pudiera recibir la devastadora noticia. Imagínate el susto, tener que bajarte corriendo del avión para enfrentarte a semejante dolor. ¡Un brete, we!
Lo que más resalta de la historia de Ericka es su temple inquebrantable y su profunda espiritualidad. Terminó su carrera en Derecho recientemente y anhelaba servir a Costa Rica desde la Asamblea Legislativa. Estaba llena de ilusiones, buscando representar al pueblo josefino durante el período 2026-2030. Su compromiso político era evidente, y su dedicación al servicio público, incuestionable. Era pura vara buena, sin duda alguna.
El Partido Liberal Progresista suspendió todas sus actividades en señal de duelo, reconociendo la valiosa contribución de Ericka. Sus compañeros la recuerdan como una persona comprometida, apasionada por el derecho y con un espíritu solidario. Uno de esos personajes que deja un legado imborrable, no por cargos ostentados, sino por la calidad humana que irradiaba. Realmente nos deja una gran pena, eh.
Más allá de las causas del fatal accidente – que ya están siendo investigadas a fondo por las autoridades correspondientes – queda claro que Costa Rica ha perdido una pieza valiosa. Eliécer Feinzaig, pese a sus heridas, ha manifestado su profundo pesar por la pérdida de su colega y amiga, reafirmando el compañerismo que existía entre ambos. En estos momentos, lo importante es brindar apoyo a la familia de Ericka y honrar su memoria, recordándola como la mujer íntegra y servicial que fue.
Este acontecimiento nos invita a reflexionar sobre la fragilidad de la vida y la importancia de valorar cada momento. Nos recuerda que debemos aprovechar al máximo el tiempo que tenemos con nuestros seres queridos y vivir cada día con intensidad y gratitud. Ahora bien, viendo la rapidez con la que sucedieron los hechos, y considerando las investigaciones preliminares sobre el accidente, ¿creen que las autoridades deberían revisar y reforzar las medidas de seguridad en las carreteras, especialmente en puntos críticos como Buenos Aires de Palmares?
