¡Ay, Dios mío! ¿Se imaginan qué vaina estamos viviendo? Resulta que la Ministra de Salud, Mary Munive, soltó la bomba: los hospitales podrían colapsar a finales de este año por falta de especialistas. Y ni hablar de la temporada navideña, con todos los viajes, parrandas y accidentes que eso trae aparejado... ¡Qué despache!
La jefa de Salud advierte que la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS) no anda dando abasto con los especialistas, y mucho menos ahora que la demanda se dispara. Dice que muchos hospitales regionales van a quedar sin nadie que atienda las emergencias, obligando a la gente a irse directamente a los hospitales centrales, echándonos toda la bronca encima. Imagínate la cola, mae, pura torta.
Y claro, como si fuera poco, añade que esta situación puede llevar a cosas peores: más riesgo para la salud pública, aumento de la mortalidad infantil y demoras en la atención de emergencias. Dice que tenemos que ser responsables, no tomar y manejar, evitar provocarnos accidentes... ¡Como si fueramos los únicos culpables de este brete!
Pero la verdadera telenovela viene con el Colegio de Médicos. Parece que el gobierno emitió una declaratoria de emergencia sanitaria en diciembre del año pasado para poder contratar especialistas, tanto nacionales como extranjeros, de forma temporal y sin necesidad de estar inscritos en el Colegio. Una movida para tratar de solucionar rápido el problema, ¿no?
Pues resulta que el Colegio se negó rotundamente a dar los permisos. La ministra Munive está furiosa porque dice que el Ministerio de Trabajo y Migración hicieron todo lo posible, fiscalizaron cada paso, pero el Colegio no cedió. Ahora la ministra lanza la pelota al callejón: si pasa algo malo, culpa del Colegio. ¡Qué cargada!
Mientras tanto, el Colegio defiende su postura, argumentando que hay suficientes especialistas formándose cada año y que los problemas reales de la CCSS son otros: retener al personal y distribuir adecuadamente las plazas. Dicen que el problema no es la falta de profesionales, sino cómo los utiliza la Caja. Vamos, ¡otra chincha más en el brete!
El Gobierno, sin dejarse amedrentar, sigue apostando por el proyecto de ley 24.015, que busca acelerar el proceso de nombramiento de especialistas. A pesar de que han intentado atrasarlo con casi 400 mociones (¡sí, cuatro cientos!), dicen que ya está listo para votación. Munive enfatiza que Costa Rica no puede seguir perdiendo tiempo y que la salud del pueblo no puede estar en pausa. Lo que nos lleva a preguntarnos... ¿Será que realmente el Colegio está defendiendo sus intereses o realmente cree que está protegiendo la calidad de la atención médica?
Bueno, compas, esta vaina está que arde. Con todo este panorama, me pregunto: ¿creen ustedes que el Colegio de Médicos debería haber dado los permisos temporales, o estaban en lo correcto al mantener su posición? ¿Qué medidas deberían tomarse urgentemente para evitar el colapso de los hospitales y garantizar una atención médica digna para todos los costarricenses?
La jefa de Salud advierte que la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS) no anda dando abasto con los especialistas, y mucho menos ahora que la demanda se dispara. Dice que muchos hospitales regionales van a quedar sin nadie que atienda las emergencias, obligando a la gente a irse directamente a los hospitales centrales, echándonos toda la bronca encima. Imagínate la cola, mae, pura torta.
Y claro, como si fuera poco, añade que esta situación puede llevar a cosas peores: más riesgo para la salud pública, aumento de la mortalidad infantil y demoras en la atención de emergencias. Dice que tenemos que ser responsables, no tomar y manejar, evitar provocarnos accidentes... ¡Como si fueramos los únicos culpables de este brete!
Pero la verdadera telenovela viene con el Colegio de Médicos. Parece que el gobierno emitió una declaratoria de emergencia sanitaria en diciembre del año pasado para poder contratar especialistas, tanto nacionales como extranjeros, de forma temporal y sin necesidad de estar inscritos en el Colegio. Una movida para tratar de solucionar rápido el problema, ¿no?
Pues resulta que el Colegio se negó rotundamente a dar los permisos. La ministra Munive está furiosa porque dice que el Ministerio de Trabajo y Migración hicieron todo lo posible, fiscalizaron cada paso, pero el Colegio no cedió. Ahora la ministra lanza la pelota al callejón: si pasa algo malo, culpa del Colegio. ¡Qué cargada!
Mientras tanto, el Colegio defiende su postura, argumentando que hay suficientes especialistas formándose cada año y que los problemas reales de la CCSS son otros: retener al personal y distribuir adecuadamente las plazas. Dicen que el problema no es la falta de profesionales, sino cómo los utiliza la Caja. Vamos, ¡otra chincha más en el brete!
El Gobierno, sin dejarse amedrentar, sigue apostando por el proyecto de ley 24.015, que busca acelerar el proceso de nombramiento de especialistas. A pesar de que han intentado atrasarlo con casi 400 mociones (¡sí, cuatro cientos!), dicen que ya está listo para votación. Munive enfatiza que Costa Rica no puede seguir perdiendo tiempo y que la salud del pueblo no puede estar en pausa. Lo que nos lleva a preguntarnos... ¿Será que realmente el Colegio está defendiendo sus intereses o realmente cree que está protegiendo la calidad de la atención médica?
Bueno, compas, esta vaina está que arde. Con todo este panorama, me pregunto: ¿creen ustedes que el Colegio de Médicos debería haber dado los permisos temporales, o estaban en lo correcto al mantener su posición? ¿Qué medidas deberían tomarse urgentemente para evitar el colapso de los hospitales y garantizar una atención médica digna para todos los costarricenses?