¡Ay, mi Dios! Aquí andamos tranquilos tomándonos un café y de pronto sale el astrofísico Avi Loeb, del Harvard, a decirnos que el cometa 3I/Atlas es más grande y pelao' que el Cerro Pirrí. Uno piensa, '¿Otro cometa?', pero resulta que este parece que va a romper todos los moldes. Ya saben, esos cosas que te hacen preguntarte si estamos solos en el universo, ¿saben?
Según Loeb, el núcleo de este cosito espacial es como si le pusieras encima tres Cerro Brenas uno encima del otro, ¡más de cinco kilómetros de diámetro! Y la masa, ni me hablen, dice que son unos 33 mil millones de toneladas. Imagínate la rosca que puede armar si se acerca demasiado al sol… ¡uff!
Lo que más tiene a los científicos rayándose la cabeza son los datos que les mandó el telescopio James Webb. Resulta que el cometa está echando material a toda velocidad, más rápido que un carro de Orosi bajando la cuesta. Esto quiere decir que tiene una composición bien rara, o algo pasando adentro que no entendemos todavía. Ya saben, la ciencia siempre tiene esas sorpresas.
Y hablando de sorpresas, Loeb lo compara con el ‘Oumuamua y el Borisov, dos visitantes espaciales que ya estuvieron por acá, pero este Atlas, según él, es otra onda. Dice que 'rompe todos los esquemas', y como saben, Loeb no se anda con rodeos cuando habla. Siempre tiene algo que sacudirle a la comunidad científica, como si le gustara meternos en bronca, jeje.
El cometa, que ahora mismo está dando vueltas por ahí, lejos del sistema solar, sigue una trayectoria bien peculiar. No está enganchado al Sol, así que, una vez que pase cerca de nosotros, se va pa’ donde nunca volveremos a verlo. Está moviéndose a casi 58 kilómetros por segundo, ¡eso es más rápido que un taxi en hora pico en San José! Llegará a su punto más cercano al Sol a fin de mes, justo entre la Tierra y Marte, y luego seguirá su camino al infinito.
Pero lo que realmente está poniendo a todos a pensar es el resplandor verdoso que le vieron desde Marte, gracias a la sonda ExoMars TGO. Pues dicen que no deberían estar viendo ese color, porque no hay suficientes elementos que normalmente producen esa luminiscencia. Loeb está diciendo que podría ser algún químico extraño o incluso algo que todavía no conocemos de la física. ¡Imagínense!, que tengamos que reescribir los libros de ciencias por culpa de un cometa...
Claro, también hay quien dice que Loeb está tratando de hacernos drama, como cuando propuso que el ‘Oumuamua era una nave alienígena. Muchos astrónomos aseguran que el Atlas es un cuerpo natural, que se formó hace muchísimos años, quizás cuando el universo era apenas un chiquillo. Dicen que este cometa nos puede dar pistas sobre cómo eran los sistemas estelares en sus inicios, qué materiales había dando vuelta por ahí. Como encontrar fósiles de dinosaurios, pero a escala cósmica, ¿me entienden?
Así que, pues, vamos a estar pendientes de esto, porque las próximas semanas van a ser cruciales para saber exactamente qué es este cometa, qué tan grande es, y de qué está hecho. ¡Es un espectáculo que no nos podemos perder! Pero dime, compañero: ¿crees que Loeb está exagerando o realmente hay algo raro con este cometa, y deberíamos empezar a construir refugios anti-espaciales? ¿O simplemente es pura ciencia ficción?”,
Según Loeb, el núcleo de este cosito espacial es como si le pusieras encima tres Cerro Brenas uno encima del otro, ¡más de cinco kilómetros de diámetro! Y la masa, ni me hablen, dice que son unos 33 mil millones de toneladas. Imagínate la rosca que puede armar si se acerca demasiado al sol… ¡uff!
Lo que más tiene a los científicos rayándose la cabeza son los datos que les mandó el telescopio James Webb. Resulta que el cometa está echando material a toda velocidad, más rápido que un carro de Orosi bajando la cuesta. Esto quiere decir que tiene una composición bien rara, o algo pasando adentro que no entendemos todavía. Ya saben, la ciencia siempre tiene esas sorpresas.
Y hablando de sorpresas, Loeb lo compara con el ‘Oumuamua y el Borisov, dos visitantes espaciales que ya estuvieron por acá, pero este Atlas, según él, es otra onda. Dice que 'rompe todos los esquemas', y como saben, Loeb no se anda con rodeos cuando habla. Siempre tiene algo que sacudirle a la comunidad científica, como si le gustara meternos en bronca, jeje.
El cometa, que ahora mismo está dando vueltas por ahí, lejos del sistema solar, sigue una trayectoria bien peculiar. No está enganchado al Sol, así que, una vez que pase cerca de nosotros, se va pa’ donde nunca volveremos a verlo. Está moviéndose a casi 58 kilómetros por segundo, ¡eso es más rápido que un taxi en hora pico en San José! Llegará a su punto más cercano al Sol a fin de mes, justo entre la Tierra y Marte, y luego seguirá su camino al infinito.
Pero lo que realmente está poniendo a todos a pensar es el resplandor verdoso que le vieron desde Marte, gracias a la sonda ExoMars TGO. Pues dicen que no deberían estar viendo ese color, porque no hay suficientes elementos que normalmente producen esa luminiscencia. Loeb está diciendo que podría ser algún químico extraño o incluso algo que todavía no conocemos de la física. ¡Imagínense!, que tengamos que reescribir los libros de ciencias por culpa de un cometa...
Claro, también hay quien dice que Loeb está tratando de hacernos drama, como cuando propuso que el ‘Oumuamua era una nave alienígena. Muchos astrónomos aseguran que el Atlas es un cuerpo natural, que se formó hace muchísimos años, quizás cuando el universo era apenas un chiquillo. Dicen que este cometa nos puede dar pistas sobre cómo eran los sistemas estelares en sus inicios, qué materiales había dando vuelta por ahí. Como encontrar fósiles de dinosaurios, pero a escala cósmica, ¿me entienden?
Así que, pues, vamos a estar pendientes de esto, porque las próximas semanas van a ser cruciales para saber exactamente qué es este cometa, qué tan grande es, y de qué está hecho. ¡Es un espectáculo que no nos podemos perder! Pero dime, compañero: ¿crees que Loeb está exagerando o realmente hay algo raro con este cometa, y deberíamos empezar a construir refugios anti-espaciales? ¿O simplemente es pura ciencia ficción?”,