¡Aguántense, mi gente! El Alajuelense le pegó duro al Liberia en el primer capítulo de esta serie de ida y vuelta por la final. Con un 2-0 contundente en el Morera, los nuestros casi aseguran su lugar en la gran final. ¡Qué partidazo se vivió anoche, pura emoción!
Desde temprano se palpaba la tensión en San José. Todos sabíamos que Liberia no iba a regalar nada, pero bueno, a veces la vida te da sorpresas, ¿no es así? El ambiente en el estadio era electrizante, con la manada roja haciendo sentir su presencia, empujando al equipo desde el calentamiento.
Liberia salió a buscar el gol desde el principio, tratando de imponer su ritmo, pero nuestro equipo estaba bien parco, paciente, esperando el momento preciso para atacar. Se veía que tenían un plan claro, sin desesperarse ni irse al traste buscando un gol rápido. Celso Borges, qué mae, demostró por qué es capitán y figura indiscutible.
Y llegó el minuto 41, ¡boom! Una jugada elaborada en el área, varios rebotes y Celso, con sangre fría, mandó la pelota al fondo de la red. ¡El Morera estalló en júbilo! La afición se vino arriba y se sentía que ya teníamos medio pie en la final. ¡Qué chimba de gol, la verdad!
Pero no nos dormimos ahí, porque a los pocos minutos, Cisneros aprovechó un error defensivo de Liberia y con un remate certero, amplió la ventaja en el marcador. ¡Otra vez a temblar el Morera! Dos a cero, con esto ya prácticamente habíamos sentenciado la serie. Se escuchaban gritos de '¡Vamos, vamos, Alajuelense!' por todos lados.
Ahora mismo, el marcador global dice 3-1 a nuestro favor. Esto nos da una ventaja importantísima de cara al juego de vuelta en el Rosales, pero hay que mantener la calma y seguir trabajando duro. No podemos confiarnos, todavía queda un partido y sabemos que Liberia puede reaccionar. Este brete requiere concentración máxima y disciplina táctica.
Muchos analistas deportivos dicen que ya estamos clasificados, pero nosotros no nos relajamos. Sabemos que el fútbol es impredecible y que cualquier cosa puede pasar en noventa minutos. Lo importante es enfocarnos en nuestro juego, seguir entrenando y salir a ganar el próximo partido. Que no se nos vaya al agua todo este esfuerzo, diay.
En fin, una noche memorable para la familia manuda. Pero ahora, les pregunto a ustedes, compañeros del Foro: ¿Creen que Alajuelense podrá sostener este nivel de juego en el partido de vuelta y levantar la copa, o Liberia nos dará una sorpresa amarga?
Desde temprano se palpaba la tensión en San José. Todos sabíamos que Liberia no iba a regalar nada, pero bueno, a veces la vida te da sorpresas, ¿no es así? El ambiente en el estadio era electrizante, con la manada roja haciendo sentir su presencia, empujando al equipo desde el calentamiento.
Liberia salió a buscar el gol desde el principio, tratando de imponer su ritmo, pero nuestro equipo estaba bien parco, paciente, esperando el momento preciso para atacar. Se veía que tenían un plan claro, sin desesperarse ni irse al traste buscando un gol rápido. Celso Borges, qué mae, demostró por qué es capitán y figura indiscutible.
Y llegó el minuto 41, ¡boom! Una jugada elaborada en el área, varios rebotes y Celso, con sangre fría, mandó la pelota al fondo de la red. ¡El Morera estalló en júbilo! La afición se vino arriba y se sentía que ya teníamos medio pie en la final. ¡Qué chimba de gol, la verdad!
Pero no nos dormimos ahí, porque a los pocos minutos, Cisneros aprovechó un error defensivo de Liberia y con un remate certero, amplió la ventaja en el marcador. ¡Otra vez a temblar el Morera! Dos a cero, con esto ya prácticamente habíamos sentenciado la serie. Se escuchaban gritos de '¡Vamos, vamos, Alajuelense!' por todos lados.
Ahora mismo, el marcador global dice 3-1 a nuestro favor. Esto nos da una ventaja importantísima de cara al juego de vuelta en el Rosales, pero hay que mantener la calma y seguir trabajando duro. No podemos confiarnos, todavía queda un partido y sabemos que Liberia puede reaccionar. Este brete requiere concentración máxima y disciplina táctica.
Muchos analistas deportivos dicen que ya estamos clasificados, pero nosotros no nos relajamos. Sabemos que el fútbol es impredecible y que cualquier cosa puede pasar en noventa minutos. Lo importante es enfocarnos en nuestro juego, seguir entrenando y salir a ganar el próximo partido. Que no se nos vaya al agua todo este esfuerzo, diay.
En fin, una noche memorable para la familia manuda. Pero ahora, les pregunto a ustedes, compañeros del Foro: ¿Creen que Alajuelense podrá sostener este nivel de juego en el partido de vuelta y levantar la copa, o Liberia nos dará una sorpresa amarga?
