Diay, maes. Entre que sube el dólar, que las presas son un despiche y que la política a veces parece un reality show de mala muerte, hay días en que cuesta encontrar noticias que a uno le saquen una sonrisa. Pero de vez en cuando, sale una de esas historias que le recuerdan a uno que Costa Rica tiene un corazón gigante. Y esta semana, ese corazón late bien fuerte en Aserrí. Por segundo año, la gente del cantón se mandó con una iniciativa que, sinceramente, es de las varas más tuanis que he visto para celebrar el 15 de setiembre: van a forrar la icónica Piedra de Aserrí con una bandera monumental. Y cuando digo monumental, no estoy jugando. Hablamos de seis lienzos de 50 metros cada uno. ¡Qué nivel!
La movida se llama “Bandera en la Piedra de Aserrí: Iluminamos la Esperanza” y los cargas detrás de todo este brete son los compas de La Potente Radio TV. Hay que darles crédito, porque organizar un chunche de esta magnitud no es cualquier cosa. No es solo de llegar y guindar las telas; es una logística enorme que demuestra un amor por el cantón que ya quisieran muchos. La bandera va a estar ondeando desde el 11 hasta el 15 de setiembre, convirtiendo un paisaje que ya de por sí es chiva, en una postal patriótica que se ve desde un montón de lados. Es un recordatorio visual, a cachete, de que las fiestas patrias pueden ser mucho más que solo desfiles y faroles.
Pero aquí es donde la vara se pone todavía mejor y pasa de ser un evento visual a algo con alma. Este año, los organizadores no se quedaron solo en lo estético. Se fueron a escuelas, colegios y hasta centros diurnos del cantón con una misión: recolectar mensajes de paz y esperanza. Y la respuesta fue increíble. Imagínense a un güila de 4 años, con su letra toda temblorosa, escribiendo al lado del mensaje de un abuelito de 80. Cientos de aserriceños plasmaron sus palabras, sus dibujos y hasta sus firmas en las telas. Esa bandera que vemos desde lejos no es solo tela roja, blanca y azul; es un collage de los anhelos de toda una comunidad. Es la prueba de que el patriotismo más puro no está en los discursos, sino en estas pequeñas acciones que unen a la gente.
Y como buenos millennials y centennials que son, los organizadores le metieron el toque digital a la iniciativa. La invitación está abierta para que todo el mundo le tome fotos a la bandera desde donde sea que la vean y las suban a redes con el hashtag #BanderaEnLaPiedra. La idea es construir un collage digital gigante, hecho por la misma gente. Como dijo Fabián Alvarado, el director de La Potente Radio TV, la meta es que la bandera no sea solo algo que se ve a lo lejos, sino que se sienta en las manos y en el corazón de cada persona. Es una forma súper inteligente de hacer que la gente no sea solo espectadora, sino parte activa del evento. Una forma de decir "esta bandera también es mía".
Al final, proyectos como este son un tanque de oxígeno. Demuestran que cuando hay voluntad y se unen empresas, instituciones, comercios y familias, se pueden lograr cosas impresionantes. Es un ejemplo perfecto de que el orgullo de ser tico no necesita ser ruidoso ni politizado, sino que puede ser creativo, colaborativo y, sobre todo, inspirador. Un aplauso de pie para la gente de Aserrí. Ojalá más cantones se contagiaran de este espíritu. Y ahora les pregunto a ustedes, maes: Más allá de lo que pasa en Chepe, ¿qué otras iniciativas así de cargas y positivas conocen que estén pasando en sus comunidades para estas fiestas patrias? ¡Cuenten para ver si nos llenamos de más noticias buenas!
La movida se llama “Bandera en la Piedra de Aserrí: Iluminamos la Esperanza” y los cargas detrás de todo este brete son los compas de La Potente Radio TV. Hay que darles crédito, porque organizar un chunche de esta magnitud no es cualquier cosa. No es solo de llegar y guindar las telas; es una logística enorme que demuestra un amor por el cantón que ya quisieran muchos. La bandera va a estar ondeando desde el 11 hasta el 15 de setiembre, convirtiendo un paisaje que ya de por sí es chiva, en una postal patriótica que se ve desde un montón de lados. Es un recordatorio visual, a cachete, de que las fiestas patrias pueden ser mucho más que solo desfiles y faroles.
Pero aquí es donde la vara se pone todavía mejor y pasa de ser un evento visual a algo con alma. Este año, los organizadores no se quedaron solo en lo estético. Se fueron a escuelas, colegios y hasta centros diurnos del cantón con una misión: recolectar mensajes de paz y esperanza. Y la respuesta fue increíble. Imagínense a un güila de 4 años, con su letra toda temblorosa, escribiendo al lado del mensaje de un abuelito de 80. Cientos de aserriceños plasmaron sus palabras, sus dibujos y hasta sus firmas en las telas. Esa bandera que vemos desde lejos no es solo tela roja, blanca y azul; es un collage de los anhelos de toda una comunidad. Es la prueba de que el patriotismo más puro no está en los discursos, sino en estas pequeñas acciones que unen a la gente.
Y como buenos millennials y centennials que son, los organizadores le metieron el toque digital a la iniciativa. La invitación está abierta para que todo el mundo le tome fotos a la bandera desde donde sea que la vean y las suban a redes con el hashtag #BanderaEnLaPiedra. La idea es construir un collage digital gigante, hecho por la misma gente. Como dijo Fabián Alvarado, el director de La Potente Radio TV, la meta es que la bandera no sea solo algo que se ve a lo lejos, sino que se sienta en las manos y en el corazón de cada persona. Es una forma súper inteligente de hacer que la gente no sea solo espectadora, sino parte activa del evento. Una forma de decir "esta bandera también es mía".
Al final, proyectos como este son un tanque de oxígeno. Demuestran que cuando hay voluntad y se unen empresas, instituciones, comercios y familias, se pueden lograr cosas impresionantes. Es un ejemplo perfecto de que el orgullo de ser tico no necesita ser ruidoso ni politizado, sino que puede ser creativo, colaborativo y, sobre todo, inspirador. Un aplauso de pie para la gente de Aserrí. Ojalá más cantones se contagiaran de este espíritu. Y ahora les pregunto a ustedes, maes: Más allá de lo que pasa en Chepe, ¿qué otras iniciativas así de cargas y positivas conocen que estén pasando en sus comunidades para estas fiestas patrias? ¡Cuenten para ver si nos llenamos de más noticias buenas!