¡Aguafiestas! Otra vez el Partido Liberación Nacional (PLN) tuvo que echar marcha atrás con la asamblea cantonal de San Ramón. Ya van varias veces que posponen esto, parece que tienen miedo de enfrentar a la gente. Con la bronca que les causa a los vecinos no tener representantes bien definidos, uno se pregunta si realmente les importa escuchar a la ciudadanía.
La excusa de rigor, como siempre: lluvia. Dicen que hay pronosticadas lluvias fuertes para este sábado, que era la fecha original, así que prefirieron cancelar y evitar que la gente se empapara. Pero vamos, maé, ¿no podrían haberlo previsto antes? Parece que se les olvidó que en Costa Rica llueve bastante y que la vida sigue pese a las nubes grises.
Álvaro Ramírez, el jefe de campaña del PLN, salió a explicar la situación, tratando de restarle importancia. Dijo que “no se va a poder realizar la asamblea por fuertes lluvias” y que “no es un día adecuado”. Suena a cortina de humo, ¿verdad? Como diciendo “la culpa no es nuestra, es el clima”. Pero eso de la burocracia liberacionista a veces te deja pensando si hacen caso a las señales o viven en otro planeta.
Y aquí viene la verdadera preocupación, porque si no logran hacer la asamblea, se arriesgan a perder el acceso a la deuda política en la próxima campaña. El Código Electoral es clarito: los partidos tienen que estar al día con la renovación en todos los cantones y provincias para poder recibir el fajate. Así que, con la crisis económica que tenemos, perder esa fuente de financiamiento sería un golpe duro para el PLN. Uno se imagina las caras largas en Piedades.
Ahora, la nueva fecha es el próximo miércoles 8 de octubre. Esperemos que sí se concrete, porque la gente de San Ramón ya está harta de tanto “vamos allá” y tanta decepción. Se han organizado, quieren participar, pero el partido parece que anda dando vueltas como quien busca hueso para roer. Ya saben cómo dicen, ‘dime con quién andas y te diré quién eres’...y el PLN anda dando vueltas que dan arcabuces.
Esta situación también pone de manifiesto algunos problemas estructurales dentro del PLN. Parece que hay internas, desacuerdos, y falta de coordinación entre sus diferentes facciones. Es difícil avanzar cuando no hay un liderazgo claro y definido. Y eso, maé, se nota a leguas. Además, la gente empieza a preguntarse si realmente les interesa representar los intereses del país o si solo están buscando mantener el poder a toda costa.
No podemos negar que el PLN ha tenido momentos históricos en nuestro país, pero últimamente parece que se les ha ido el norte. Están perdiendo la conexión con la base social, y eso es peligroso. Necesitan urgentemente refrescar ideas, escuchar a la gente, y demostrar que todavía pueden ofrecer soluciones reales a los problemas que nos aquejan. Si siguen arrastrando los pies, se van a meter en un brete del que será muy difícil salir. Además, si esto sigue pasando, ¿cuánto tardarán en perder apoyo popular?
En fin, la suspensión de la asamblea de San Ramón es solo la punta del iceberg de una serie de problemas que enfrenta el PLN. Y ahora me pregunto: ¿cree usted que el PLN logrará superar esta crisis interna y recuperar la confianza de los ciudadanos, o estamos viendo el principio del fin de este partido histórico?
La excusa de rigor, como siempre: lluvia. Dicen que hay pronosticadas lluvias fuertes para este sábado, que era la fecha original, así que prefirieron cancelar y evitar que la gente se empapara. Pero vamos, maé, ¿no podrían haberlo previsto antes? Parece que se les olvidó que en Costa Rica llueve bastante y que la vida sigue pese a las nubes grises.
Álvaro Ramírez, el jefe de campaña del PLN, salió a explicar la situación, tratando de restarle importancia. Dijo que “no se va a poder realizar la asamblea por fuertes lluvias” y que “no es un día adecuado”. Suena a cortina de humo, ¿verdad? Como diciendo “la culpa no es nuestra, es el clima”. Pero eso de la burocracia liberacionista a veces te deja pensando si hacen caso a las señales o viven en otro planeta.
Y aquí viene la verdadera preocupación, porque si no logran hacer la asamblea, se arriesgan a perder el acceso a la deuda política en la próxima campaña. El Código Electoral es clarito: los partidos tienen que estar al día con la renovación en todos los cantones y provincias para poder recibir el fajate. Así que, con la crisis económica que tenemos, perder esa fuente de financiamiento sería un golpe duro para el PLN. Uno se imagina las caras largas en Piedades.
Ahora, la nueva fecha es el próximo miércoles 8 de octubre. Esperemos que sí se concrete, porque la gente de San Ramón ya está harta de tanto “vamos allá” y tanta decepción. Se han organizado, quieren participar, pero el partido parece que anda dando vueltas como quien busca hueso para roer. Ya saben cómo dicen, ‘dime con quién andas y te diré quién eres’...y el PLN anda dando vueltas que dan arcabuces.
Esta situación también pone de manifiesto algunos problemas estructurales dentro del PLN. Parece que hay internas, desacuerdos, y falta de coordinación entre sus diferentes facciones. Es difícil avanzar cuando no hay un liderazgo claro y definido. Y eso, maé, se nota a leguas. Además, la gente empieza a preguntarse si realmente les interesa representar los intereses del país o si solo están buscando mantener el poder a toda costa.
No podemos negar que el PLN ha tenido momentos históricos en nuestro país, pero últimamente parece que se les ha ido el norte. Están perdiendo la conexión con la base social, y eso es peligroso. Necesitan urgentemente refrescar ideas, escuchar a la gente, y demostrar que todavía pueden ofrecer soluciones reales a los problemas que nos aquejan. Si siguen arrastrando los pies, se van a meter en un brete del que será muy difícil salir. Además, si esto sigue pasando, ¿cuánto tardarán en perder apoyo popular?
En fin, la suspensión de la asamblea de San Ramón es solo la punta del iceberg de una serie de problemas que enfrenta el PLN. Y ahora me pregunto: ¿cree usted que el PLN logrará superar esta crisis interna y recuperar la confianza de los ciudadanos, o estamos viendo el principio del fin de este partido histórico?
