¡Aguántense, pura vida! Resulta que el Ministerio de Obras Públicas y Transportes (MOPT) soltó el rollo de las multas por la restricción vehicular en San José, y la cifra da escalofríos. A ver, pité, que no todos tenemos carro nuevo pa’ esquivar la placa.
Según los datos que salió a relucir, desde que implementaron la restricción por placas, hasta noviembre pasado, ¡más de 10 mil personas ya recibieron una multa de ¢26.000! Imagínate, eso es plata que se va directo al bolsillo del Estado, y nosotros, los trabajadores honrados, andamos ajustando el cinturón. ¿Será que el MOPT no ve que muchos estamos luchando pa' salir adelante?
La restricción, como bien sabemos, busca aliviar el tráfico en el centro de San José, limitando el paso de vehículos según la terminación de la placa. Lunes, placas 1 o 2, martes placas 3 o 4... y así sucesivamente hasta el viernes. Pero claro, no todos podemos cambiar nuestro carro cada semana pa’ evitar la multa. ¡Eso sí que sería un brete!
Lo curioso es que hay tramos exentos, como el norte de la Circunvalación entre Calle Blancos y La Uruca. Parece que ahí sí pueden respirar tranquilos. Mientras tanto, el resto de nosotros andamos con la mosca detrás de la oreja, revisando la placa cada vez que queremos ir al centro.
Y ojo, porque según el MOPT, esta restricción tendrá unas vacaciones navideñas del 19 de diciembre, pero volverá con todo el empuje el 5 de enero de 2026. Así que preparen sus agendas y sus bolsillos, porque parece que esto seguirá siendo una realidad por un buen rato.
Si hacemos cuentas rápidas, sale que, en promedio, ¡31 personas al día reciben una sanción! Eso quiere decir que casi medio carro por hora está infringiendo la norma. Uno se pregunta si realmente la restricción está logrando el efecto deseado, o si simplemente está generando ingresos extras para el gobierno. No digo que la idea sea mala, pero quizás podrían buscar alternativas más eficientes…¿No creen?
Muchos vecinos han expresado su frustración, diciendo que la restricción afecta gravemente sus trabajos y actividades diarias. Algunos tienen que tomar varios buses para llegar a su destino, otros prefieren pagar la multa porque es más rápido. ¡En fin, un lío digno de novela!
Ahora me pregunto, ¿ustedes qué opinan? ¿Creen que la restricción vehicular es una medida efectiva para reducir el tráfico en San José, o es simplemente un botín fácil para el MOPT? Dejen sus comentarios abajo y vamos a debatir sobre este tema que nos afecta a todos los purichos. ¡Pité, pura vida y a darle con todo!
Según los datos que salió a relucir, desde que implementaron la restricción por placas, hasta noviembre pasado, ¡más de 10 mil personas ya recibieron una multa de ¢26.000! Imagínate, eso es plata que se va directo al bolsillo del Estado, y nosotros, los trabajadores honrados, andamos ajustando el cinturón. ¿Será que el MOPT no ve que muchos estamos luchando pa' salir adelante?
La restricción, como bien sabemos, busca aliviar el tráfico en el centro de San José, limitando el paso de vehículos según la terminación de la placa. Lunes, placas 1 o 2, martes placas 3 o 4... y así sucesivamente hasta el viernes. Pero claro, no todos podemos cambiar nuestro carro cada semana pa’ evitar la multa. ¡Eso sí que sería un brete!
Lo curioso es que hay tramos exentos, como el norte de la Circunvalación entre Calle Blancos y La Uruca. Parece que ahí sí pueden respirar tranquilos. Mientras tanto, el resto de nosotros andamos con la mosca detrás de la oreja, revisando la placa cada vez que queremos ir al centro.
Y ojo, porque según el MOPT, esta restricción tendrá unas vacaciones navideñas del 19 de diciembre, pero volverá con todo el empuje el 5 de enero de 2026. Así que preparen sus agendas y sus bolsillos, porque parece que esto seguirá siendo una realidad por un buen rato.
Si hacemos cuentas rápidas, sale que, en promedio, ¡31 personas al día reciben una sanción! Eso quiere decir que casi medio carro por hora está infringiendo la norma. Uno se pregunta si realmente la restricción está logrando el efecto deseado, o si simplemente está generando ingresos extras para el gobierno. No digo que la idea sea mala, pero quizás podrían buscar alternativas más eficientes…¿No creen?
Muchos vecinos han expresado su frustración, diciendo que la restricción afecta gravemente sus trabajos y actividades diarias. Algunos tienen que tomar varios buses para llegar a su destino, otros prefieren pagar la multa porque es más rápido. ¡En fin, un lío digno de novela!
Ahora me pregunto, ¿ustedes qué opinan? ¿Creen que la restricción vehicular es una medida efectiva para reducir el tráfico en San José, o es simplemente un botín fácil para el MOPT? Dejen sus comentarios abajo y vamos a debatir sobre este tema que nos afecta a todos los purichos. ¡Pité, pura vida y a darle con todo!
