Miren, queridos foreros, estamos casi en diciembre y ya se prende el humo con los ritualitos pa' atraer plata y espantar la mala onda. Ya saben, lo típico de fin de año, cuando todos quieren empezar el nuevo año con el bolsillo lleno y la vida organizada. Pero bueno, aquí en Costa Rica somos bien supersticiosos y nos agarramos a cualquier cosita que nos prometa milagros, ¿verdad?
Esta vez, la moda del momento es un ritual sencillo, aparentemente: laurel, arroz blanco y una escoba nueva. Sí, señores, una escoba nueva, ¡como si eso fuera a solucionar todos nuestros problemas financieros! Dicen que es pa’ limpiar la casa de malas vibras y abrirle paso a la prosperidad. Claro, nadie dice que haya estudios científicos que respalden todo este rollo, pero a mucha gente le funciona creerlo.
La movida, según explican los expertos en 'espiritualidad alternativa' de Facebook, es empezar el primero de diciembre esparciendo arroz por todos los rincones de la casa. Esto, supuestamente, llama a la abundancia, como si el arroz mágico se transformara en billetes mientras dormimos. Después, pulverizan unas hojitas de laurel por ahí, a soltar su aromita que dicen que tranquiliza y trae buena suerte. Y luego, ¡zas!, barren toda la casa con la escoba nueva, como si barrer fuera a deshacerse de todas nuestras deudas y preocupaciones. Qué harta, ¿eh?
Y ojo, porque el laurel no es cualquier laurel, tiene que estar seco y molido para que libere todo su potencial. El arroz tiene que ser crudo, ¡pa’ que fermente y traiga la buena vibra! Y la escoba, ni hablar, tiene que ser nueva, ¡bien cepillada y lista para la batalla contra el polvo y la mala suerte! Uno se pregunta, ¿será que las tiendas de artículos para el hogar han aumentado sus ventas gracias a estos rituales? Me imagino a los dueños de ferreterías festejando, jeje.
Pero miremos el lado positivo, bretes. Aunque no creamos en todo este tinglado, organizar la casa, limpiarla y darle mantenimiento no le hace daño a nadie. Al menos te quitas el estrés de ver todo revuelto y empiezas el mes con un ambiente más agradable. Y si, de paso, los espíritus de la abundancia deciden visitarte, pues mucho mejor, ¿no creen? Uno nunca sabe cuándo llega la oportunidad.
Lo que me da risa es cómo le ponemos empeño a estas cosas. Hay gente que hasta escribe mantras y visualizaciones positivas mientras barre. Como si la fuerza de voluntad fuera suficiente para pagar las cuentas, ¡diay! Yo creo que más vale buscar un buen empleo o invertir inteligentemente que depender de un ritualito de laurel y arroz. No digo que no sirva como complemento, pero ojo con poner toda la fe en ello, que al final uno puede terminar decepcionado.
Además, hay que tener cuidado con esas prácticas que prometen resultados milagrosos. Puede haber gente aprovechándose de la necesidad ajena y vendiendo cosas caras o dando consejos dudosos. Siempre hay algún charlatán dispuesto a sacarle unos colones a alguien que busca desesperadamente mejorar su situación económica. Así que, muchísima precaución, fíjense bien lo que hacen y no se dejen llevar por modas pasajeras.
En fin, queridos foreros, ¿ustedes creen que estos rituales realmente funcionan o son pura pérdida de tiempo? ¿Se animarán a probar el ritual del laurel y arroz este diciembre, o prefieren confiar en su propio esfuerzo y dedicación? ¡Déjenme sus opiniones en los comentarios, quiero saber qué piensa la comunidad!
Esta vez, la moda del momento es un ritual sencillo, aparentemente: laurel, arroz blanco y una escoba nueva. Sí, señores, una escoba nueva, ¡como si eso fuera a solucionar todos nuestros problemas financieros! Dicen que es pa’ limpiar la casa de malas vibras y abrirle paso a la prosperidad. Claro, nadie dice que haya estudios científicos que respalden todo este rollo, pero a mucha gente le funciona creerlo.
La movida, según explican los expertos en 'espiritualidad alternativa' de Facebook, es empezar el primero de diciembre esparciendo arroz por todos los rincones de la casa. Esto, supuestamente, llama a la abundancia, como si el arroz mágico se transformara en billetes mientras dormimos. Después, pulverizan unas hojitas de laurel por ahí, a soltar su aromita que dicen que tranquiliza y trae buena suerte. Y luego, ¡zas!, barren toda la casa con la escoba nueva, como si barrer fuera a deshacerse de todas nuestras deudas y preocupaciones. Qué harta, ¿eh?
Y ojo, porque el laurel no es cualquier laurel, tiene que estar seco y molido para que libere todo su potencial. El arroz tiene que ser crudo, ¡pa’ que fermente y traiga la buena vibra! Y la escoba, ni hablar, tiene que ser nueva, ¡bien cepillada y lista para la batalla contra el polvo y la mala suerte! Uno se pregunta, ¿será que las tiendas de artículos para el hogar han aumentado sus ventas gracias a estos rituales? Me imagino a los dueños de ferreterías festejando, jeje.
Pero miremos el lado positivo, bretes. Aunque no creamos en todo este tinglado, organizar la casa, limpiarla y darle mantenimiento no le hace daño a nadie. Al menos te quitas el estrés de ver todo revuelto y empiezas el mes con un ambiente más agradable. Y si, de paso, los espíritus de la abundancia deciden visitarte, pues mucho mejor, ¿no creen? Uno nunca sabe cuándo llega la oportunidad.
Lo que me da risa es cómo le ponemos empeño a estas cosas. Hay gente que hasta escribe mantras y visualizaciones positivas mientras barre. Como si la fuerza de voluntad fuera suficiente para pagar las cuentas, ¡diay! Yo creo que más vale buscar un buen empleo o invertir inteligentemente que depender de un ritualito de laurel y arroz. No digo que no sirva como complemento, pero ojo con poner toda la fe en ello, que al final uno puede terminar decepcionado.
Además, hay que tener cuidado con esas prácticas que prometen resultados milagrosos. Puede haber gente aprovechándose de la necesidad ajena y vendiendo cosas caras o dando consejos dudosos. Siempre hay algún charlatán dispuesto a sacarle unos colones a alguien que busca desesperadamente mejorar su situación económica. Así que, muchísima precaución, fíjense bien lo que hacen y no se dejen llevar por modas pasajeras.
En fin, queridos foreros, ¿ustedes creen que estos rituales realmente funcionan o son pura pérdida de tiempo? ¿Se animarán a probar el ritual del laurel y arroz este diciembre, o prefieren confiar en su propio esfuerzo y dedicación? ¡Déjenme sus opiniones en los comentarios, quiero saber qué piensa la comunidad!